Día a día de un conflicto que aún no encuentra una solución.
16 de diciembre de 2015: apenas seis días después de la asunción del intendente Arroyo, los municipales se declaran en estado de alerta y movilización ante la incertidumbre por el pago del aguinaldo, horas extras y productividad. También a causa de la “inquietud generalizada de los trabajadores temporarios”.
22 y 23 de diciembre: realizan el primer paro contra el nuevo gobierno en reclamo del aguinaldo. Acusan al secretario de Economía y Hacienda, José Cano, de tener “impericia” para afrontar la situación.
30 de diciembre: el Sindicato de Trabajadores Municipales (STM) se declara nuevamente en estado de alerta. Esta vez, por el posible recorte de 500 empleados temporarios. Esa semana, además, el secretario de Gobierno, Alejandro Vicente, acusa al gremio de tener “connivencia” con la gestión anterior.
1 de febrero de 2016: el STM hace público su pedido de aumento salarial para el primer semestre del año: 30%. A lo largo del mes hay polémica por la suspensión de trabajadores de la delegación del Puerto.
4 de marzo: se difunde el acuerdo salarial, que consiste en un incremento para el personal municipal de 26% (12% retroactivo a enero calculado sobre los valores vigentes en diciembre; 7% a partir de abril calculado sobre los valores de marzo y otro 7% desde junio sobre los valores de mayo).
6 de mayo: luego de haber declarado a principios de semana el estado de alerta y movilización por la situación del personal de la Secretaría de Educación, el STM realiza su primer paro en el año. Toma la decisión tras comprobar que ese día, el quinto hábil del mes, los empleados no percibieron sus haberes.
23 de mayo: el STM presenta una carta para que Arroyo aparte del gobierno a la secretaria de Educación, Ana María Crovetto. Un día después, el intendente la respalda en conferencia de prensa y pide que lo dejen “gobernar en paz”.
26 de mayo: docentes municipales llevan a cabo un paro con movilización ante amenazas de descuentos y “en defensa del sistema educativo municipal”.
9 de julio: el secretario de Salud, Gustavo Blanco, lanza una dura crítica al sindicato municipal porque, pese a que el personal cobró sus salarios, ratificó un paro para el lunes siguiente en reclamo del aguinaldo. Para entonces, Gustavo Schroeder ya ocupaba el cargo de secretario de Economía y Hacienda.
11 de julio: el STM cumple el paro porque el personal no cobró el aguinaldo.
13 de julio: el sindicato anuncia otro paro por falta de pago del aguinaldo, pero el Ministerio de Trabajo de la provincia decreta la conciliación obligatoria y la medida de fuerza queda sin efecto.
5 de agosto: el municipio paga los salarios de forma desdoblada y el STM se moviliza y realiza una retención de tareas.
8 de agosto: los municipales llevan adelante otro paro. Es porque el gobierno municipal abonó hasta $15.000 por empleado y estableció que el resto lo abonará el día 18.
7 de septiembre: el STM decreta un paro por tiempo indeterminado. Es porque Schroeder había anunciado otro pago desdoblado en el que, en primer término, cada agente recibiría hasta $10.000.
14 de septiembre: el gobierno deposita los sueldos tras recibir ayuda de otras jurisdicciones y desactiva el paro iniciado el 7 de septiembre.
16 de septiembre: Arroyo asegura que fue “un error” haberle concedido un aumento de “27%” a los municipales en el primer semestre del año. Por esos días, Schroeder se encargaba de remarcar en charlas informales que el 26% anunciado por el gobierno en el primer semestre en realidad implicó un “28%” de incremento salarial porque sus tres tramos fueron acumulativos.
5 de octubre: el gobierno local pide al Concejo Deliberante autorización para pagar sueldos con fondos afectados a infraestructura y seguridad. Un día después, los jefes de bloque coinciden en que no es necesario un permiso del cuerpo legislativo para que el municipio disponga a su antojo de esos fondos.
12 de octubre: nuevo conflicto con el STM por el retraso en el cobro de horas extras del personal del Ente de Deportes (Emder).
20 de octubre: trasciende la información de que Arroyo y el secretario general del STM, Gilardi, se reunieron por primera vez para reabrir la paritaria.
2 de noviembre: los municipales se declaran en alerta y movilización porque no tienen respuestas sobre el aumento salarial para el segundo semestre. Y hacen público su reclamo: 12%.
21 de noviembre: el personal realiza otro paro ante la falta de respuesta oficial. Al otro día, el municipio propone un incremento acumulativo de 6% (2% retroactivo a octubre, 2% en noviembre y 2% en diciembre). Y un día después, los municipales rechazan la oferta.
7 de diciembre: sin una nueva oferta salarial, los municipales llevan adelante otro paro con movilización.
12 de diciembre: en asamblea, el STM habilita a aceptar un 8% de aumento para el segundo semestre, en lugar del 12% solicitado en un primer momento, y decreta un paro para el día siguiente. Pero en la jornada que debía llevarse a cabo la medida de fuerza el Ministerio de Trabajo dicta la conciliación obligatoria.
20 de diciembre: en audiencia en la sede laboral, el gobierno municipal propone que el aumento sea del 7%, pero la dirigencia del STM no acepta. La próxima audiencia está prevista para el miércoles 28.