Se llama Maximiliano Núñez, de 36 años y los investigadores intentan establecer si tenía algún conflicto con el detenido. Además, la policía secuestró una escopeta que podría ser el arma homicida. Este martes se hará la autopsia.
El hombre asesinado este martes a la madrugada en la Villa Gascón fue identificado como Maximiliano Núñez, de 36 años, y se espera que en el transcurso del día se realizó la autopsia.
Según explicaron fuentes Judiciales, a simple vista Núñez presentaba un impacto de arma de fuego en el tórax y la autopsia será determinante para establecer el calibre del proyectil que lo mató y verificar si, además, posee más heridas.
Por otra parte, el fiscal Carlos Russo confirmó el aprehendido, un hombre de 32 años, pasará la noche en la Unidad Penal 44 de Batán y el miércoles, a primera hora, será trasladado a Tribunales para declarar, por la imputación del delito de homicidio agravado por el uso de arma de fuego.
Además de esta detención, la policía incautó en la casa de donde salió el sospechoso una escopeta, que por las imágenes de los videos podría tratarse del arma homicida. La operación de autopsia y las pericias balísticas podrían confirmar o no esto.
Si bien la principal hipótesis es que se trató de un ajuste de cuentas por problemas de vieja data, los investigadores no tienen confirmado ningún tipo de conflicto anterior entre víctima y victimario, por lo que el fiscal ordenó que se tomaran todos los testimonios posibles para poder reconstruir qué tipo de relación mantenían en esta zona conflictiva y violenta de la ciudad, como es la Villa Gascón y Monte Varela.
Este martes, cerca de las 4.30 de la madrugada vecinos cercanos a Monte Varela y de la Villa Gascón comenzaron a llamar al 911 para alertar a la policía que se habían escuchado dos balazos en Alberti al 7900 y que un hombre, identificado como Maximiliano Núñez, yacía sin vida en la vereda. Ante esta situación, la policía fue hasta el lugar y le comunicó lo sucedido al fiscal Carlos Russo, quien inició una causa por “homicidio agravado por el uso de arma de fuego”.
Tras las primeras averiguaciones, el fiscal Russo pudo acceder a las imágenes de cámaras de seguridad privada en la zona en las que se veía el asesinato y que el responsable, tras disparar una o dos veces, se marchaba del lugar e ingresaba a una casa de Alberti al 7900.
Con estas pruebas, cerca de las 6 de la mañana la policía se disponía a hacer un allanamiento de urgencia en el lugar, pero el sospechoso salió por la puerta y comenzó a correr para escapar, pero a 200 metros fue aprehendido. En el interior de la casa de la que salió, los uniformados secuestraron la escopeta que podría ser el arma homicida.