La fiscal Andrea Gómez comprobó que Jonathan Mariscal (18), quien había sido nombrado como un posible partícipe del homicidio de Leandro Acosta (23), ocurrido el martes 15 de noviembre, se encontraba en Neuquén al momento del hecho. Otro acusado ya había sido liberado, por lo que un único joven es considerado aún prófugo.
La fiscal Andrea Gómez solicitó a la Justicia de Garantías que quede sin efecto el pedido de detención de un joven de 18 años que había sido mencionado como posible partícipe del crimen de Leandro Acosta (23), ocurrido el último martes 15 de noviembre en el barrio Las Heras, tras comprobar que al momento del hecho no se encontraba en la ciudad.
Se trata de Jonathan Mariscal, quien cuando la víctima fue asesinada se hallaba en la localidad de Confluencia, en la provincia de Neuquén, donde realiza trabajos de perforación. A esa conclusión arribó la investigadora tras recolectar declaraciones testimoniales y demás pruebas, que la llevaron a determinar su inocencia.
Cabe recordar que algo similar había sucedido con Martín Elías Martínez (20), el primer sospechoso que fue señalado en la causa que fuera detenido pocas horas después del crimen de Acosta. Un testigo había dado una descripción que cuadraba: puntualmente, mencionó que el autor tenía un piercing debajo del ojo.
Sin embargo, en su declaración ante la fiscal Lorena Hirigoyen, Martínez negó haber participado del crimen y juró que no estuvo en el lugar. Familiares y allegados dieron fe de estos dichos y expresaron que estaba con ellos en un negocio cuando fue el homicidio.
Después de su liberación, la Justicia de Garantías autorizó la detención de otros dos jóvenes que, se creyó entonces, eran quienes iban en la moto desde donde dispararon y mataron a la víctima: Germán Pereyra (19) y Jonathan Mariscal. Sin embargo, con el avance de la pesquisa, Mariscal quedaría finalmente desvinculado al hecho.
El crimen de Acosta ocurrió el martes 15 de noviembre a la noche, en en William Morris y Rufino Inda y testigos aseguraron que el ataque provino desde una moto. La víctima, tras haber sido baleada fue llevada por allegados hasta el Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA), donde finalmente falleció.
Además, testigos aseguraron que ese mismo martes 15 de noviembre en que la víctima fue asesinada, Pereyra se acercó a la casa de su abuela y dijo: “No sabés, maté a uno“, acto seguido habría dejado un arma de fuego en el lugar y huyó. Desde entonces, es considerado prófugo.
En el marco de la investigación, Gómez se abocó a buscar también a quién habría conducido la motocicleta que, a priori, trasladaba a Pereyra y en esa línea apuntó contra Martínez y Mariscal. Pero luego, la participación de ambos quedó descartada.
Con las pruebas recolectadas, la jueza de garantías Lucrecia Bustos ordenó la captura de ambos y los allanamientos a sus viviendas y a la casa de la abuela de Pereyra. Los allanamientos se realizaron este domingo 20 por la mañana, todos en el barrio Las Heras.
El principal acusado no fue hallado y tampoco el arma de fuego, pero sí pudieron secuestrar celulares, que podrían tener elementos de interés para la causa. Ante este panorama es que este domingo Martínez fue liberado por falta de mérito.