La Justicia de Garantías avaló la investigación del fiscal Fernando Berlingeri y ordenó que Víctor Martínez permanezca detenido por el homicidio del joven Vicente Argentino Gutiérrez (16), ocurrido en horas de la madrugada del domingo 20 de octubre.
La Justicia de Garantías dictó la prisión preventiva del comerciante acusado de cometer el crimen del adolescente Vicente Argentino Gutiérrez (16), ocurrido el domingo 20 de octubre pasado.
Producto del fallo, el imputado Víctor Martínez permanecerá detenido en la Unidad Penal Nº 44 de Batán mientras el fiscal Fernando Berlingeri avanza con la investigación. Cabe recordar que el acusado se había negado a declarar en Tribunales al día siguiente de ocurrido el hecho.
El caso comenzó en horas de la madrugada del domingo 20 de octubre pasado, cuando por motivos que aún deben establecerse Martínez disparó desde una vivienda del barrio Las Heras hacia la vereda. Uno de los balazos hirió a Martínez, quien se encontraba con una joven de 14 años con la que había salido de una fiesta momentos antes.
Todo ocurrió cerca de las 2.30 de la mañana en Génova al 8400. Los menores habían concurrido a una especie de celebración en otra casa ubicada en el cruce de esa calle con Guerrico.
En ese marco, Gutiérrez recibió un tiro y quedó tendido en el asfalto. Poco después, fue trasladado de urgencia al Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA), pero falleció en el trayecto.
Vicente Argentino Gutiérrez tenía 16 años.
Según el testimonio de la adolescente que estaba con la víctima, el agresor fue un hombre que, desde la vereda de enfrente a donde estaban, comenzó a gritar “rastrero” y efectuó, al menos, cinco disparos. Para finalmente huir a pie.
En ese marco, personal del Comando de Patrullas que arribó al lugar identificó a través de la declaración de la testigo presencial al sospechoso de haber efectuado el disparo. Mientras el fiscal Berlingeri y la policía estaban en la cuadra, un hombre salió de la casa señalada por la víctima y se identificó como Víctor Adrián Martínez, quien dijo haber sido el autor de los disparos que terminaron con la vida del adolescente, pero que estos habrían sido al aire al sospechar que querían robarle.
De acuerdo a los primeros datos que trascendieron, el menor asesinado había mantenido conflictos con la ley penal juvenil en el pasado, aunque de menor .
Por la tarde, con la orden del Juzgado de Garantías N° 4, la policía allanó el domicilio de Martínez y en el lugar secuestró un revólver calibre 22 para ser peritado, marca Rubí, con capacidad de nueve proyectiles, cinco de los cuales se hallaban con vainas percutidas y dos cartuchos intactos. Cabe destacar que se trata del mismo calibre que el arma homicida.
El recuerdo de la víctima
El crimen de Gutiérrez caló hondo en el barrio Las Heras, en las amistadas del adolescente, su familia y en la comunidad educativa. Su novia, dos años menor que él, lo despidió con un sentido mensaje en las redes sociales, lleno de amor y también de bronca e impotencia. En su escuela, la Secundaria Nº 19 “Vecinalista Héctor Woollands”, sus compañeros le hicieron un mural en el aula para recordarlo.
Si bien en un primer momento fuentes oficiales dejaron trascender que Vicente tenía antecedentes penales graves, sólo había sido acusado en dos causas por delitos menores de cuando era inimputable: el intento de robo de una cartera en abril de 2023 y el intento de robo de un teléfono celular en una plaza en agosto de 2023.
A pesar de estos errores que pudo cometer cuando tenía 15 años, sus allegados y amigos lo definen como un “loquito que era buen pibe”, como alguien “sano y sin maldad”.
Vicente trabajaba y cursaba, de manera acelerada, el tercer año en la Secundaria Nº 19 “Vecinalista Héctor Woollands”, desde donde el lunes emitieron un comunicado para pedir “respeto y responsabilidad al momento de expresarse” y repudiaron “todo comentario malintencionado y muestra de estigmatización a los jóvenes en general”. “No podemos hacernos eco de comentarios aberrantes que sólo suman más dolor sobre un adolescente de 16 años que ya no puede defenderse”, agregaron desde la comunidad educativa de la que formaba parte.
El adolescente tenía tanto padre como madre ausentes y recientemente había sido adoptado por sus “padres del corazón”. Estaba de novio con una joven de 14 años y estaba enfocado en sus estudios, en trabajar y en las motos, de las que era fanático.
Tal era su fanatismo por las ruedas, que una caravana de jóvenes en moto acompañó al coche fúnebre que llevó al cuerpo de Vicente Gutiérrez hasta el cementerio, como una última despedida. El 23 de febrero hubiese cumplido 17 años, y sus amigos le estaban armando una moto para darle de regalo.
“Mal ahí loco. Cómo te vas a ir así. Pensar que esta foto fue un toque antes de la mierda que nos tocó vivir. Pensar que hace unas horas estábamos con los pibes cagándonos de risa y por culpa de un re gato tocó lo peor. Me va a faltar vida para agradecerte por poner el pecho por mí, para perdonarme el hecho de que te hayas llevado la peor parte y no haber podido hacer nada. Un corazón como el tuyo y la valentía que vos tuviste para poner el pecho no se encuentra en cualquier wacho. Cuidanos desde arriba, te voy a recordar siempre y vas a estar en mi corazón para toda la vida gordo”, escribió su novia en redes sociales al recordarlo con una foto de los dos.