Un cohete lanzado desde la Franja causó siete heridos. Brigadas israelíes se movilizan al enclave palestino.
TEL AVIV, Israel.- La caída de un cohete lanzado desde la Franja de Gaza que causó siete heridos, entre ellos tres menores, al impactar sobre una casa en la comunidad de Mishmeret, disparó este lunes el refuerzo de brigadas de infantería y blindadas israelíes en las regiones periféricas al enclave palestino y amenaza con generar una réplica desde Israel.
El cohete “alcanzó más de 120 kilómetros desde el enclave. Es un cohete de Hamas de fabricación casera. Hamas lanzó este cohete. Vemos a Hamas como responsable de todo lo que pasa”, señaló la vocera militar israelí Mika Lifshitz en rueda de prensa telefónica.
Lifshitz anunció que se han reforzado con dos brigadas adicionales de infantería y blindadas las regiones periféricas de Gaza después de una reunión del jefe del Estado Mayor, la agencia de Inteligencia y otros responsables de seguridad del país.
El cohete se disparó sobre las 5.30 hora local hacia la región central de Israel e impactó en una casa en la comunidad de Mishmeret, que quedó gravemente dañada.
“Nos tomamos este evento muy en serio”, dijo la vocera militar sobre un evento que ocasionó siete heridos, incluidos una niña de 12 años, un niño de 3, y un bebé de año y medio, según el servicio de emergencia Maguen David Adom (Estrella de David Roja, equivalente en Israel a la Cruz Roja).
Los equipos de emergencia también dieron atención médica a varias personas que sufrieron ataques de ansiedad y heridas leves al correr hacia los refugios.
El domingo, las sirenas se activaron en varias localidades israelíes adyacentes al enclave palestino, por el lanzamiento de unas 300 granadas de estruendo y explosivos contra la verja de separación por parte de jóvenes palestinos de las denominadas “unidades de confusión nocturna”.
Un palestino murió y otros tres resultaron heridos por fuego israelí en los disturbios del sábado noche, informó el Ministerio de Sanidad Palestino citado por la agencia Efe.
El nuevo repunte de tensión dejó en alerta a la región, donde existe una marcada incertidumbre sobre qué va a ocurrir en las próximas horas. El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, anunció su regreso adelantado desde Estados Unidos para abordar la crisis.
El Ejército israelí cortó los accesos al enclave palestino bajo bloqueo y ha desplegado dos brigadas adicionales de tropas de infantería y blindadas en las inmediaciones de Gaza, pero hasta acá no hubo ataque de represalia, como suele hacer inmediatamente después de ser lanzados cohetes.
El liderazgo del movimiento islamista Hamas en Gaza aguarda la respuesta armada, y evacuó las instalaciones militares, oficinas y residencias de sus principales líderes, reportó la agencia Efe.
En la Franja la gente hace acopio de pan y otros alimentos, así como de combustible, para estar preparados ante cualquier eventualidad, y en la mayoría de las escuelas públicas los niños fueron devueltos a sus casas.
Se repiten las llamadas de teléfono para estar al tanto de la situación de los seres queridos y también las cancelaciones de reservas en hoteles de quienes tenían previsto entrar en la Franja hoy y no pudieron tras el cierre de la frontera israelí, o los que tendrán que renovar su estancia al haberse quedado encerrados en el enclave.
Trabajadores humanitarios y periodistas internacionales quedaron dentro del enclave sin poder salir tras el cierre precipitado por Israel del cruce militar de Erez, en el norte.
Mientras, la Cámara Conjunta de Operaciones de Gaza, que incluye a los brazos armados de varias facciones políticas encabezadas por Hamas, advirtió a Israel en un comunicado de las repercusiones de un ataque y aseguró que responderá “de inmediato” ante daños “contra edificios o gente y sus propiedades”.
Según la agencia palestina Maan, el grupo advirtió a Israel que “no ponga a prueba a la resistencia o se verá sorprendido por una dura y colectiva respuesta que la ocupación no podrá soportar”.