Ayer reiteraron el pedido para que se habilite la apertura de un nuevo curso. Mientras tanto, los padres realizan aportes de dinero y trabajo para poner en condiciones el nuevo espacio.
Un nutrido grupo de padres de la Escuela Secundaria Municipal de Educación Técnica Nº1 reiteró ayer el reclamo para que las autoridades habiliten el desdoblamiento del 4º año. En el establecimiento ubicado en Juan B Justo e Yrigoyen, los padres entregaron a los medios el petitorio en el que también solicitan la continuidad de las clases de educación física y pileta en dependencias municipales.
“El éxito del proyecto educativo ha llevado a que 52 alumnos lleguen al 4º año, y necesitamos el desdoblamiento de un curso para que todos sigan concurriendo, pero fue rechazado”, relataron los padres. Asimismo comentaron que hoy “sus hijos tienen clases en un aula con capacidad para 35, haciendo imposible la tarea de aprender”. Por eso consideraron que “se necesita de manera urgente el desdoblamiento del curso que implica el nombramiento de profesores para el curso de creación”.
Los integrantes de la comunidad educativa decidieron hacer público el reclamo tras recibir la negativa de las autoridades de la Secretaría de Educación, de habilitar la apertura de un nuevo curso. Por otra parte, manifestaron su malestar tras conocer la “la triste noticia que el municipio no nos alquilará el gimnasio para que los alumnos puedan hacer educación física, ni tampoco podrán usar la pileta del Emder como lo venían haciendo años anteriores”.
Entre los reclamos, también está la solicitud de un auxiliar. Al respecto explicaron que la escuela hoy tiene una matrícula de 300 alumnos en tres turnos y sólo 2 auxiliares, a partir de las 15 no queda ninguno y se dictan clases hasta las 22, por lo que “es muy importante sumar al plantel ese personal”.
En el marco del reclamo, también se refirieron a la continuidad de las horas PEBA al decir: “Esperamos contar con las horas del Programa de Educación No Formal para los talleres productivos que nos han permitido educar haciendo y financiar gran parte de lo construido por la Esmet”.
Finalmente, los padres dijeron sentirse “orgullosos de elegir esta escuela para formar a nuestros hijos”, entonces dijeron que tanto el espacio físico como el mobiliario para el nuevo curso “correrá por parte de su esfuerzo, el de nuestros hijos y con la gran ayuda de la escuela y sus directivos”.