Nueva botadura en el astillero Contessi, la segunda del año y la 148 en el historial de la firma marplatense. Confianza, esperanza y anuncio de futuras construcciones navales.
Después de la cuenta regresiva colectiva y del tradicional bautismo con champagne, el “Americano” fue botado este jueves en una ceremonia desarrollada en el astillero Contessi.
La nave pertenece al grupo Veraz y fue la segunda que se hizo al mar este año desde ese varadero, constituyendo la 148 en la historia de la firma marplatense.
“La Argentina se tiene que recuperar trabajando y no especulando”, sentenció el presidente del directorio de la empresa naval constructora, Domingo Contessi.
Ante la presencia de autoridades de la Base Naval y la Prefectura Naval Argentina, y luego de la entonación de las estrofas del Himno Nacional, el presidente de directorio del astillero, Domingo Contessi, agradeció la presencia de todos y “la confianza del grupo Veraz”, que ya cuenta con 11 embarcaciones provenientes del astillero y pronto sumará uno más, que se llamará Leonilda, en honor a la esposa del fundador del astillero, Federico Contessi, y madre de los actuales directivos.
Cabe recordar que el astillero tiene una participación no mayoritaria, mientras que los restantes accionistas son ex capitanes, ex maquinistas, ingenieros y directivos que sumaron “su compromiso desde su fundación en 1987”.
También estuvieron presentes en la ceremonia el presidente de la comisión de Intereses Marítimos, Fluviales, Pesqueros y Portuarios del Congreso de la Nación, el diputado Héctor Stefani; el presidente del astillero Rio Santiago, Pedro Wasiejko; el empresario Antonio Solimeno y el extitular del Consorcio Regional Pesquero Mar del Plata, Gabriel Felizia, entre otros.
Mejoría
En su alocución, Contessi recordó que la primera botadura del año -concretada en enero pasado- se realizó “en medio del cimbronazo” que significó para todo el sector el anuncio del gobierno nacional sobre la reforma a la Ley Federal de Pesca. Y, en ese sentido, confesó que la situación lo invitó a “reflexionar y realizar una autocrítica dentro del sector pesquero y la industria naval” sobre “lo mal que comunicamos nuestra actividad, los empleos que generamos, la soberanía que defendemos, el valor que agregamos, los impuestos que pagamos y las potencialidades de cada sector”.
Asimismo, destacó que los sigue guiando “la competitividad, un concepto que nos obsesiona” y agradeció “el esfuerzo y la dedicación del gran equipo de trabajo del astillero”.
“La competitividad -insistió- es lo único que asegura la subsistencia de una empresa en el tiempo y acá tenemos 75 años de profesar esa consigna. Queremos hacer buenos productos, de primer nivel, para los argentinos y también para el mundo aunque esto no solo depende de nuestra voluntad”.
El empresario rememoró viejas épocas -como la de “atraso cambiario, nunca más”- y reconoció que “hoy la realidad es muy distinta. Se están haciendo grandes esfuerzos para bajar el déficit, la inflación y ordenar la macroeconomía” aunque aclaró que “los precios industriales todavía no llegaron a reacomodarse lo suficiente”.
Optimismo
También mencionó a los empresarios que los mueve “la pasión” y la escala meritocrática de la industria aunque señaló a los “oportunistas que hacen lobby para seguir importando chatarra usada, barcos totalmente amortizados que se venden a valores de rezago”.
“Sabíamos que con el cambio de gobierno -añadió- iban a intentar convencer a las nuevas autoridades con sus cantos de sirenas. Ojalá no lo consigan porque sería un gran retroceso. La consigna debe ser que todos compitamos con las mismas armas”.
En el marco de las vicisitudes de la industria y el pais, recordó que el “Americano sería ‘el quinto ´Huafeng’,
pero las penurias económicas que sufrieron las empresas pesqueras generaron dificultades” y decidieron reinvertir en la renovación del “Victoria II”.
Con todo, Contessi se mostró optimista y adelantó que “ya comenzaron las obras 152 y 153” y en la nueva nave inaugurada a principios de años “se han colocado las quillas de las obras 154, 155 y 156. La Argentina se tiene que recuperar trabajando y no especulando”.
Por su parte, el presidente de la comisión de Intereses Marítimos, Fluviales, Pesqueros y Portuarios del Congreso de la Nación, el diputado Héctor Stefani recordó que durante su juventud en Bahía Blanca se embarcó en la pesca del langostino, y aseguró que conoce los problemas por los que atraviesa la industria.
Así, desde su posición se comprometió “a estar cerca para cambiar los necesarios para que la industria vuelva a estar de pie”.
Emoción
El “Americano” fue bautizado así en honor al hermano del fundador del astillero Federico Contessi, Batista Antonio, quien “al saludar a todos les decía ´hola americano´”, recordaron en la ceremonia.
La madrina fue Norma Destasio, gerente del establecimiento de Pesquera Veraz S.A. en Mar del Plata, y encargada de estrellar la botella de champagne contra el casco del buque en el instante previo a que tocara por primera vez las aguas del mar.
“Estoy muy emocionada por todo lo que significa, son muchos años y muchos recuerdos”, reconoció. Asimismo, en otra tradicional ceremonia, recibió la medalla conmemorativa de la ceremonia de manos del último colaborador que ingresó al astillero y participó en la construcción del barco, Eloy Ezequiel Rubio.
Por su parte, el capitán es Osvaldo Aguilar, que subió a la embarcación con el crucifijo cristiano después de la bendición que estuvo a cargo del padre Armando Ledesma.
El “Americano” tiene una eslora de 24,10 metros, una manga de 7,80 metros y puede navegar a 10 nudos , siendo una embarcación “versatil, apta para pesca de arrastre y media agua” que operará desde el puerto local.