-Plus Ultra una revista VIP:
La revista-suplemento Plus Ultra fue precursora de la mítica revista Sur. En las diferencias y semejanzas entre ambas publicaciones se deja leer una relación tensa entre modernidad y belle époque,que caracteriza el pasaje de la década del 20 al 30.Si el grotesco,en la franja popular de los años 20,se despega del sainete mediante interiorizaciones y una economía de procedimientos,Plus Ultra por razones análogas,aunque en el otro extremo de la ciudad se va distribuyendo entre 1916 y 1930 como suplemento de Caras y Caretas.La clase media porteña,durante Yrigoyen, contaba con su revista;pero Alvear implicó el gran modelo señorial que se iba encarnando en un aludido más allá.Aquella lectura semanal en Flores o en Caballito se había convertido en una necesidad leer mensualmente una revista satinada con nombre en latín se trocaba en privilegio del Barrio Norte.El tránsito desde las insinuaciones carnavalescas a la divisa monárquica española fue subrayando así un valor agregado sobrentendido como linaje.Especialista en interiores que ofertan el presunto prestigio de dormitorios y comedores apelando al “rango destacado” y a “la más fina originalidad,distinción y belleza”, Plus Ultra operaba la ritualización de las virtudes domésticas proyectadas….(Fuente: David Viñas/Página 12/Marzo 14 de 2004).
Estas fotos merecen dos comentarios: Por un lado, la enorme riqueza arquitectónica de nuestro país y, específicamente, la de Mar del Plata.-
Por el otro, la extraordinaria diferencia social que existía en aquellos tiempos, en la cual sólo una élite podía gozar de Mar del Plata.-
Con posterioridad, es evidente la evolución social que permitió a las clases populares el acceso al mar y gozar de las playas.-
Constituye un retroceso añorar tiempos pasados, sin remarcar que sólo unos pocos, seguramente los dueños de esas residencias, gozaban de esos privilegios.-
Pablo.-
Pablo, el problema no es querer que las clases populares gocen de la playa. El problema se presentó cuando el populismo intentó usar el choque cultural en masa como modo perverso de hostigar a la clase acomodada, directamente donde esta se había radicado.
Argentina tiene una extensísima costa… Y Mar del Plata no es una ciudad milenaria. Ni siquiera es una ciudad como Buenos Aires, fundada por un español. Mar del Plata fue fundada por un Peralta Ramos, como lugar de veraneo.
Yo celebro que en el país exista un lugar en donde mi familia, como familia trabajadora, haya podido veranear. Lo que no celebro es que nuestras familias hayan sido usadas para molestar a otros.
Y toda esa maldad disfrazada de ayuda, esa experiencia histórica nos dice que ese paso de odio dado por el peronismo, no sólo nos generó grandes pérdidas, si no que aún hoy nos genera a los argentinos, miles de millones de dólares de pérdidas, dado que a raíz de ello la clase alta argentina se trasladó a Punta del Este, lugar que no abandonó hasta nuestros días.
En síntesis, el que perdió, fue el país en su conjunto… Hoy la clase alta argentina paga altísimos impuestos en Uruguay por las mansiones que tiene allí, debe allí también contratar mucho personal para mantenerlas, consumen allá, etc.
Si realmente el fin hubiera sido ayudar al pobre, lejos de querer levantarle al lado de una casona una torre sindical que les quitara toda privacidad, se hubiera fundado una localidad o paraje más popular. Después de todo, si lo lindo de Mar del Plata es su naturaleza, esta se encuentra también en sus alrededores. Porque quedó demostrado que para el peronismo lo lindo no era su arquitectura, dado que hizo todo lo posible para demolerla (¿arquitectura oligárquica a sus ojos?).
En fin… Que no fue por los trabajadores, fue una guerra odiosa en la que perdió el país sin ninguna duda. Más que guerra, mero ataque, planeado con perversidad, cuyas consecuencias aún hoy nos siguen reportando miles de millones de pérdidas.
Sí, tuvimos una clase alta como la de los países exitosos, que pensó en construir y quedarse en su propio país. Sólo que acá el resentimiento pudo más y se hizo todo lo posible para echarlos. Hasta que se logró. ¿Algún beneficiado? Ninguno.
Cuando hoy podríamos tener a Mar del Plata como un pintoresco enclave funcionando, gastando en lujos en Argentina (lo que hace a la redistribución), contratando gente acá, y por qué no también otra localidad cercana, con una impronta más sindical, y todos contentos.
Nada se puede lograr por la fuerza. Cuando querés forzar algo, se cae todo. Y sale mal. Lo pensado con odio sale mal. Y perdemos todos.
Incluir no es imponer contingentes en masa justo donde se pusieron otros. Eso es perseguir. Sólo basta con ver la inmensa extensión de la costa atlántica argentina para darse cuenta de ello.
Hola Pablo! Creo comprender tu profundo mensaje… tal vez, se podrían haber construido edificios para que Todos tuvieran y hoy siguieran teniendo acceso para disfrutar la maravilla que es Mar del Plata pero sin haber destruido Chalets y Palacios que tanta belleza e identidad le aportaban. Soy bisnieta del arquitecto Alula Baldassarini, constructor de no solo “Villa Regina” propiedad del entonces Presidente Marcelo T. de Alvear, sino de múltiples y bellisimos Chalets que fueron derribados. Saludos a vos, a todos y gracias por este amoroso espacio!
-Plus Ultra una revista VIP:
La revista-suplemento Plus Ultra fue precursora de la mítica revista Sur. En las diferencias y semejanzas entre ambas publicaciones se deja leer una relación tensa entre modernidad y belle époque,que caracteriza el pasaje de la década del 20 al 30.Si el grotesco,en la franja popular de los años 20,se despega del sainete mediante interiorizaciones y una economía de procedimientos,Plus Ultra por razones análogas,aunque en el otro extremo de la ciudad se va distribuyendo entre 1916 y 1930 como suplemento de Caras y Caretas.La clase media porteña,durante Yrigoyen, contaba con su revista;pero Alvear implicó el gran modelo señorial que se iba encarnando en un aludido más allá.Aquella lectura semanal en Flores o en Caballito se había convertido en una necesidad leer mensualmente una revista satinada con nombre en latín se trocaba en privilegio del Barrio Norte.El tránsito desde las insinuaciones carnavalescas a la divisa monárquica española fue subrayando así un valor agregado sobrentendido como linaje.Especialista en interiores que ofertan el presunto prestigio de dormitorios y comedores apelando al “rango destacado” y a “la más fina originalidad,distinción y belleza”, Plus Ultra operaba la ritualización de las virtudes domésticas proyectadas….(Fuente: David Viñas/Página 12/Marzo 14 de 2004).
Estas fotos merecen dos comentarios: Por un lado, la enorme riqueza arquitectónica de nuestro país y, específicamente, la de Mar del Plata.-
Por el otro, la extraordinaria diferencia social que existía en aquellos tiempos, en la cual sólo una élite podía gozar de Mar del Plata.-
Con posterioridad, es evidente la evolución social que permitió a las clases populares el acceso al mar y gozar de las playas.-
Constituye un retroceso añorar tiempos pasados, sin remarcar que sólo unos pocos, seguramente los dueños de esas residencias, gozaban de esos privilegios.-
Pablo.-
Pablo, el problema no es querer que las clases populares gocen de la playa. El problema se presentó cuando el populismo intentó usar el choque cultural en masa como modo perverso de hostigar a la clase acomodada, directamente donde esta se había radicado.
Argentina tiene una extensísima costa… Y Mar del Plata no es una ciudad milenaria. Ni siquiera es una ciudad como Buenos Aires, fundada por un español. Mar del Plata fue fundada por un Peralta Ramos, como lugar de veraneo.
Yo celebro que en el país exista un lugar en donde mi familia, como familia trabajadora, haya podido veranear. Lo que no celebro es que nuestras familias hayan sido usadas para molestar a otros.
Y toda esa maldad disfrazada de ayuda, esa experiencia histórica nos dice que ese paso de odio dado por el peronismo, no sólo nos generó grandes pérdidas, si no que aún hoy nos genera a los argentinos, miles de millones de dólares de pérdidas, dado que a raíz de ello la clase alta argentina se trasladó a Punta del Este, lugar que no abandonó hasta nuestros días.
En síntesis, el que perdió, fue el país en su conjunto… Hoy la clase alta argentina paga altísimos impuestos en Uruguay por las mansiones que tiene allí, debe allí también contratar mucho personal para mantenerlas, consumen allá, etc.
Si realmente el fin hubiera sido ayudar al pobre, lejos de querer levantarle al lado de una casona una torre sindical que les quitara toda privacidad, se hubiera fundado una localidad o paraje más popular. Después de todo, si lo lindo de Mar del Plata es su naturaleza, esta se encuentra también en sus alrededores. Porque quedó demostrado que para el peronismo lo lindo no era su arquitectura, dado que hizo todo lo posible para demolerla (¿arquitectura oligárquica a sus ojos?).
En fin… Que no fue por los trabajadores, fue una guerra odiosa en la que perdió el país sin ninguna duda. Más que guerra, mero ataque, planeado con perversidad, cuyas consecuencias aún hoy nos siguen reportando miles de millones de pérdidas.
Sí, tuvimos una clase alta como la de los países exitosos, que pensó en construir y quedarse en su propio país. Sólo que acá el resentimiento pudo más y se hizo todo lo posible para echarlos. Hasta que se logró. ¿Algún beneficiado? Ninguno.
Cuando hoy podríamos tener a Mar del Plata como un pintoresco enclave funcionando, gastando en lujos en Argentina (lo que hace a la redistribución), contratando gente acá, y por qué no también otra localidad cercana, con una impronta más sindical, y todos contentos.
Nada se puede lograr por la fuerza. Cuando querés forzar algo, se cae todo. Y sale mal. Lo pensado con odio sale mal. Y perdemos todos.
Incluir no es imponer contingentes en masa justo donde se pusieron otros. Eso es perseguir. Sólo basta con ver la inmensa extensión de la costa atlántica argentina para darse cuenta de ello.
Hola Pablo! Creo comprender tu profundo mensaje… tal vez, se podrían haber construido edificios para que Todos tuvieran y hoy siguieran teniendo acceso para disfrutar la maravilla que es Mar del Plata pero sin haber destruido Chalets y Palacios que tanta belleza e identidad le aportaban. Soy bisnieta del arquitecto Alula Baldassarini, constructor de no solo “Villa Regina” propiedad del entonces Presidente Marcelo T. de Alvear, sino de múltiples y bellisimos Chalets que fueron derribados. Saludos a vos, a todos y gracias por este amoroso espacio!