Detalle de la foto anterior: ubicación de la primera pileta Giaccaglia y construcciones sobre la terraza de la Rambla Bristol. Material enviado por Ignacio Iriarte.
Detalle de la foto anterior: ubicación de la primera pileta Giaccaglia y construcciones sobre la terraza de la Rambla Bristol. Material enviado por Ignacio Iriarte.
Recordando algunos de mis comentarios en la foto 8213,enviada por el Sr. Enrique M. Palacio;sobre la familia Giaccaglia;Don Roberto T. Barili,escribiò:
El Sr. César Giaccaglia llegó a MdP en 1888,trabajando en el balneario La Perla,de Carboni Hnos. y en 1890,se instaló en la playa Brístol,con el balneario La Estrella del Mar,en sociedad con Francisco Ventura.
Era la época en que un pasaje elevado,-verdadero puente-de 70 mts. de largo aproximadamente,conducía desde el Hotel Brístol,hasta la playa,y casillas con ruedas eran arrastradas hasta la orilla del mar,para evitar el trayecto a los bañistas sobre la arena.Este balneario fue destruído por un incendio que se inició a las 1.30 de la madrugada del miércoles 8 de Noviembre de 1905,y las pérdidas fueron estimadas en 10 mil pesos.El Sr. Juan Lasalle,hizo reconstruir el Balneario Brístol,que fuera habilitado en 1890,por el Sr.José Cano,frente al mismo Brístol Hotel,y lo entregó en representación de una comisión en arrendamiento a los señores,Giaccaglia Hnos.El Balneario Argentino,también reconstituído fue entregado en iguales condiciones al Sr. Zátrate;años después los arrendamientos los pagó a la Provincia.
El Sr. Giaccaglia presidió la Sociedad Unión Salvamento en 1908,4 años antes los bañeros habían planteado un reclamo a los propietarios y arrendatarios de balnearios y en un acta levantada el 30-1-904 se dispuso por el artìculo 1º que cada propietario abonará al bañero un sueldo que a su juicio crea conveniente,y en su artìculo 2do.dice que los bañeros estaban sujetos a todas las obligaciones que han tenido anteriormente.Esa resolución fue tomada por los propietarios,en vista que no era posible aumentar la tarifa vigente,por considerarla elevada.
El problema de la jurisdicción de las playas preocupaba,como se pone de relieve en la nota del 6-12-1902,suscripta por el Dr. Ercheverry,del Ministerio de Obras Públicas de la Provincia,dirigida al intendente de Gral. Pueyrredón,referente a la jurisdicción y domino de las playas y riberas de la ciudad,la nota de referencia,menciona que el gobierno nacional resuelve desconocer la jurisdicción de las autoridades de la provincia,por lo tanto no puede intervenir,y sugiere al intendente que que si esta resolución afecta a los intereses de la Municipalidad,le queda la vía judicial para defenderse,recurriendo a la Suprema Corte. Desde 1913 hasta 1915 el Sr. Giaccaglia tuvo una pileta de natación en la Rambla Brístol en sociedad con Zárate.Un violento temporal destruyó ese natatorio.César Giaccaglia tuvo activa participación en sociedades vecinales y fuera de temporada dirigía trabajos en su chacra,en el pueblo de Peralta Ramos.El hijo de César Giaccaglia,Albano,nació en el Horno de Lázzaro,en inmediaciones de Chapadmalal,de niño vivió en el hotel Pierini,propiedad de su abuelo Fortunato Pierini,que estaba en Rivadavia y Entre Ríos,edificado por Pedro Besozzi.En 1898,concurrió al colegio de las señoritas Julia y Marcela Balerdi,en la esquina de Rivadavia y San Luis,en la casa de Peralta Ramos;también fue alumno del colegio de Bartolomé Musante ubicado en Santiago del Estero entre Luro y San Martín.En 1900 vivió en el hotel de Rafael Agustinelli y concurrió al colegio De Franc,situado en la calle Córdoba entre Rivadavia y San Martín,lindero hacia la primer calle mencionada,al almacén Aliende y hacia San Martín,la casa Crivelli y Cetta. Posteriormente en 1904 fue alumno del colegio a cargo del maestro Andochetti,que funcionaba en la antigua residencia del Sr. Juan B. Saffouret,en Hpólito Yrigoyen,entre Luro y 25 de Mayo,donde fue tiempo después el hotel Sorrento.En 1906 fué alumno de la escuela número 1, siendo su maestra Clotilde Alió de Francheri y la Señorita Donadío.Entre los alumnos de esa escuela se habían formado 2 bandos, el de la loma de Santa Cecilia,integrada por Degregori,Muttoni,Dentis,La Cava,Rizzo,Bonorino,Aliende,Gascón Grilli,García Vega,Rica,Bronzini, Frigerio,Caporaletti,Lozano,Albano Giaccaglia y otros;el otro bando, estaban Giri,Bouzas Galeppi (el Bendito) y otros,se recuerda que en 1907,Muttoni propinó una paliza que hizo época,al famoso Bendito,que además acostumbraba junto a otros a usar revolver y cuchillo.Se recuerda otra gresca estre estos alumnos,cuando se jugaba un partido de fútbol,con posterior asado en la calle Tucumán,donde luego se instaló la mueblería de los hermanos Bronzini.Albano Giaccaglia actúo en el campo de las actividades deportivas,como en Amigos Unidos que se iniciaban en la práctica del fútbol;posteriormente defendió los colores del San Martín.En 1916 fue designado presidente del Club Motociclista Marplatense,que funcionaba en esa época en España entre Luro y 25 de Mayo.Corrían en moto Riganti,Niglia,Enrique Genero,Galeano etc. En 1920,Albano,fundó el Mar del Plata Moto Club,de cuya comisión fue presidente durante varios años;se reunían en la Casa Ecker,de la calle Bolívar.Giaccaglia se retiró de esa actividades en 1928.
Leemos en el epìgrafe de la foto 3348:
“Pileta de natación Giaccaglia y Zárate que se encontraba en la Rambla Bristol.Imagen del álbum editado en 1915 por el fotógrafo Mateo Bonnin y enviada a Fotos de Familia por Julio César Rodriguez”.
Recordando comentarios anteriores:
No hay en la ciudad planos de la Rambla.En efecto,como pasa con casi todas las obras oficiales o las que,sin tener ese carácter fueron pensadas desde Buenos Aires,como las estaciones ferroviarias,algunas escuelas estatales,los cementerios,algunas obras ribereñas y hasta obras privadas con destinos diversos,no existen en la Municipalidad planos de la Rambla.Desde hace mucho tiempo los buscamos,pero no hemos podido dar con ellos.Hace algunos meses fuimos,en su busca,con ilusorias esperanzas,a Obras Sanitarias.Esta repartición oficial,heredera de una tradición ingenieril de primer orden,donde cada elemento proyectado debía responder a normas taxativamente establecidas,no podía permitir que una obra de naturaleza de la que tratamos no tuviera planos exactos y aprobados de todos los sanitarios a instalar.Durante años,frecuentamos los archivos de la entidad en la calle Belgrano.Y en la calle Güemes,sin embargo,nos informaron –sin saber si hubo allí alguna vez planos de la Rambla- que por falta de espacio todos los planos de lo demolido en la ciudad fueron destruidos.Y solo cabe ponerse de pie y hacer un minuto de silencio.Conocimos los exteriores de la Rambla desde que tuvimos memoria y vimos cientos de fotografías de ese carácter.¿Cómo era,sin embargo,la Rambla Bristol? Años de observación de documentos –entre ellos,un par de planos de conjunto y un croquis de los locales de edificio-,y decenas de entrevistas a personas mayores que nos permiten,finalmente,tener una idea global de la obra aunque hay dudas imposibles de aclarar sin planos a la vista.
Y un anticipo general del caso podría ser el siguiente: la Rambla era una larga y estrecha faja de aproximadamente 400 metros de largo y 45 de ancho, compuesta por 3 cuerpos,1 central y 2 laterales vinculados con el 1º por anchas escalinatas.A favor del desnivel existente entre la calle costanera –desaparecida hoy- y el nivel de la arena,el arquitecto Jamín proyectó la rambla con cuatro niveles principales: en el más bajo,sobre la playa,se establecieron los balnearios.Sobre ellos se situaron el paseo –con una zona cubierta y otra descubierta- y los locales principales del edificio.A media altura de la planta de balnearios corría,unos 40 metros más atrás,la nombrada calle costanera y a ese nivel se abría otra galería cubierta a cuya vera se alineaba otra serie de locales.Sobre estos,en un 4º nivel,había viviendas accesibles desde los nombrados locales principales.Y finalmente,a un nivel que quizás pudiera haber sido también el último citado,había 2 cinematógrafos cuyas cubiertas planas eran las más altas del edificio entero.Había en el conjunto patios interiores sobre los que tenemos noticias poco claras y presumimos que no eran,precisamente,los puntos más felices del proyecto.Los rasgos más notables de la Rambla,finalmente,además de su larga columnata,eran 8 cúpulas,4 sobre el lado del mar,de alto perfil,y 4 sobre el lado de la ciudad,de planta oval y poca altura.La planta a nivel de la arena estaba dividida en tres fajas longitudinales.La exterior alojaba principalmente a los balnearios públicos y particulares;la central era un largo pasadizo de 400 metros de longitud,iluminado por claraboyas,y la que seguía,abierta a él y ciega en su parte posterior,alojaba servicios sanitarios,depósitos y dependencias varias abundantes escaleras que conectaban ese nivel con el superior.Con respecto a los balnearios,como hoy no existe nada semejante,es necesario remontarnos en el tama para comprenderlos En efecto,a principios del Siglo XX se tomaban baños de agua salada con fines terapéuticos y,por lo que le toca,el modo de vida de los porteños elegantes,la ceremoniosa lentitud con la que vivían esos privilegiados de la fortuna,distaban mucho de las costumbres de hoy.Por la mañana, se llegaba a la rambla vestido de calle –como se decía-,las mujeres con todos sus perifollos,zapatos,medias,una ropa interior mucho más abundante que la actual –incluido o no el corsé-,un vestido de mañana,muy complicado con relación a los de hoy y,por supuesto,sombrero y joyas infaltables.Los caballeros,por su parte,iban de riguroso traje –o conjunto de saco y pantalón muy formales-,camisa,chaleco y corbata y,faltaría más,el consabido sombrero.Para bañarse en el mar,obviamente,había que cambiarse de ropa.Los hombres resultaban más favorecidos porque su traje de baño era sencillo,pero el de las mujeres,al principio,era casi tan abundoso como el vestido de calle,con zapatillas,medias,traje,gorra y capa.Y de ahí los caperos,que acompañaban a las señoras cubiertas con la capa hasta el borde del bañero.Y la ceremonia se revertía a la salida del mar,cuando la dama volvía al balneario para sacarse primero la capa y acto seguido la que luego comenzó a llamarse malla,para volver a endosarse el vestido con el que había llegado la playa.Antes de vestirse,claro,había que sacarse la arena de los pies con el agua de un recipiente preparado para eso.Semejante ceremonia exigía una estructura montada para estos efectos y un personal que se ocupara de ellos.Y no olvidemos que en cada balneario había una persona que se encargaba de custodiar las joyas de sus clientes mientras estos tomaban su paño de mar.Las personas mayores,por su parte,acostumbraban tomar baños de inmersión en los balnearios propiamente dichos,preparados para esas circunstancias,con agua dulce o de mar,frías o calientes.Terminadas las ceremonias, l personal se ocupaba de los trajes y las toallas que había que lavar y tender en espera del día siguiente.Y nunca hemos dicho que la gente modesta alquilaba sus trajes de baño,capa incluida para las mujeres.Todo lo dicho sucedía en los balnearios públicos.Pero también existían,y se daba en alquiler,los balnearios privados donde había uno o más cuartos de baño,uno o más cuartos de descanso y sala de conversación Y agregaremos ahora que muchos asuntos de la política o el gobierno del país se debatían en los balnearios,los clubes o las confiterías de la Rambla.Sobre esta planta de balnearios se desarrollaba la planta principal del edificio,con su paseo descubierto,su galería cubierta y sus 45 locales;entre ellos sobresalían 4 por su tamaño,disposición y carácter especial.Eran,del Norte al Sur: la confitería La Brasileña,el Ocean Club,la confitería del Yacht Club y la Galería Witcomb.
Próximos al eje transversal del conjunto y obviamente conectados con la planta inferior estaban los grandes balnearios Bristol,de Giaccaglia Hermanos,y El Argentino,de Zárate Hermanos.Y por encima de ellos se abrían los 2 cines antedichos,el Splendid y el Palace Theatre.La planta al nivel de la calle constaba de una galería con arcos carpaneles detrás de la que se alineaban una cincuentena de locales.Sobre y otros había departamentos conectados con los negocios que medio nivel más abajo,se abrían a la galería que miraba el mar.
Esos departamentos,de los que no podemos concretar tamaño y forma –dados los pocos datos al respecto-,tenían algunos de sus cuartos iluminados con claraboyas y,además de las escaleras que los conectaban con los antedichos negocios y con la planta de los balnearios,disponían de acceso a las terrazas que los coronaban,por lo que deducimos que miles de escalones de mármol de Carrara eran transitados arriba y abajo por todo el edificio.Sin entrar en consideraciones sobre su calidad arquitectónica o constructiva,la Rambla era un edificios festivo,de recreo,un sitio para pasear para ver y ser visto,para mirar el mar,para reunirse en los balnearios,las confiterías o clubes,para ir al cine,para facilitar los baños,para comprar,para ser atendido a cuerpo de rey.Sus paseos,sus galerías,sus salones,sus locales varios cumplían a la perfección lo que se esperaba de ellos.Y tampoco entraremos en consideraciones sobre la frivolidad de la vida que se vivía allí.El edificio era de mampostería de ladrillos,con algunos muros,o parte de ellos,de piedra.Las fundaciones,en su mayor parte,se hicieron sobre pilotes formados por caños de hierro de un pie -30 centímetro- de diámetro,llenados luego con hormigón y hierro,aunque –según hemos visto después de algunos temporales previos al llamado refulado de la playa- la armadura de los pilotes no era demasiado canónica.Todas las columnas de la rambla tenían un alma metálica y todas las estructuras horizontales –entrepisos y cubiertas- eran de bovedillas de perfiles doble T que sostenían,no sabemos si en todos los casos –es lo que se ve en algunas fotografías de la construcción del edificio- bloques prefabricados.El exterior de la Rambla estaba terminado con el revoque llamado aquí símil piedra,compuesto por cemento blanco,polvo de piedra,arena dulce y óxidos varios que le daban color.Este revoque,de una dureza extraordinaria, era peinado con los llamados peines,láminas de acero no más grandes que la mano del que la manejaba,con dientes,a modo de peine,con los que raspaba el revoque fresco para eliminar las huellas del fratacho y darle así una textura pétrea.Los albañiles italianos llamaban material a la mezcla que componía este revoque duro para distinguirlo de la llamada cal,es decir,el revoque común compuesto por cal y arena.El exterior de la Rambla estaba decorado,además,por
cornisas y
molduras,orlas,estatuas,mascarillas,delfines,angelotes,guirnaldas, balaustres y maceteros,todo de argamasa armada,las más de las veces,con refuerzos de hierro.Un rasgo particular de las fachadas lo constituían unas piezas cerámicas,de varios modelos,que ornamentaban el llamado friso,es decir, una faja vertical de poca altura que corría debajo de las cornisas que daban coronamiento a los frentes del conjunto.Conocemos varios ejemplares de estas piezas,de diferentes colores y texturas,y podemos presumir que,para variar, fueron importadas.De este origen eran las baldosas cerámicas lisas que pavimentaban todas las superficies de circulación exteriores de la Rambla.Parte de esas piezas se utilizaron en los años 40 para construir algunas veredas interiores de la plaza Peralta Ramos.Pero el tiempo y las raíces dieron buena cuenta de ellas y,últimamente,muchas fueron removidas y –creemos- tiradas como material descartable cuando merecían ser salvadas de la desaparición,lgunas quedan,sin embargo.Las piezas en cuestión,de durísimo gres,tienen marca.En su cara inferior se puede leer Louis Escoyez,Tetre,Belgique.Y nos complace la ironía: cuando se construyó la Rambla no había,en nuestro dilatado país,tierras aptas para fabricarlas…Los rasgos más notorios de la Rambla eran,sin embargo,sus columnata y sus cúpulas.De las 8,las más notables eran las 4 de alto perfil que se levantaban sobre el lado del mar,en los flancos de las escalinatas Norte y Sur,y recordaban a las de las Exposiciones Universales europeas de la segunda mitad del siglo XIX,de neta raíz anglofrancesa.Estas cuatro altas y anchas cúpulas tenían una armadura de hierro del mismo cuño que la que sostiene la cúpula del Asilo Unzué.Con perfiles metálicos curvados y vinculados entre sí por planchuelas y remates.Y tan del mismo cuño eran –proyectadas además,y casi contemporáneamente,por arquitectos franceses- que cubrían,unas y otra,octógonos con 4 lados largos y cuatro cortos.El acabado de las que nos interesan era también metálico,de trabajado zinc,mientras que la del Asilo está cubierta por tejas de fibrocemento.Pero en unas y otra acentuaba aún más el parentesco la existencia de vitrales,planos los del asilo y algunos de los de la Rambla,y curvos los de las cúpulas propiamente dichas.En cuanto a las 4 cúpulas de planta oval que cubrían las llamadas rotondas situadas a ambos lados de las escalinatas Norte y Sur,sobre el Paseo Gral. Paz –que semejaban canastillas invertidas-,eran de poca altura y estaban compuestas por una estructura también metálica cubierta por chapas de zinc articuladas entre sí por costillas del mismo material,el todo terminado por un coronamiento bajo,una fuerte cresta de zinc con perforaciones circulares.Y para terminar diremos que el edificio que tratamos, pomposamente inaugurado el 19 de Enero de 1913,era considerado como la 1ª sección de un futuro conjunto mayor.Pero ese proyecto y otros,de los que conocemos dos,nunca se llevaron a cabo.(Fuente: Arquitecto Roberto O. Cova)
En la foto 2676,leemos en su epìgrAfe:
Un ángulo pocas veces visto: Juan Galeppi –abuelo de quien envía la foto- parado en la terraza de la Rambla Brìstol.Año 1937.Enviada por Andrea Galeppi,bisnieta de otro de los famosos fotógrafos de la rambla: Mateo Bonnin.
Sr. Lafra. Efectivamente su observación fue el causal del final de la Rambla Afrancesada se tuvo que tirar una obra que realmente era y seria impactante. Era normal que los edificios de playas Europeas y de las nuestras estuvieran cercanas a la orilla del mar, lamentablemente los constructores no respetaron las (experiencias) aportada en los antiguos edificios que fueron hechos sobre pilares al saber que no ofrecían resistencia al golpe de ola, esto pasa al tener poca superficie a golpear, hubo varios temporales que dejaron huellas era cuestión de estudiar las construcciones que fracasaron. la prueba y error hay que estudiarla y anotarla pera crear una base de datos y no cometer la misma torpeza, en los países desarrollados cuando hay un derrumbe se estudia la causa y se evalúa para las siguientes obras y así evitar en lo posible que suceda lo mismo. Recuerdan como decía Américo Barrios en sus charlas No le parece. Atte. saluda José Alberto Lago
Señor Lago: muchas gracias por su aclaración. En efecto, en distintos lugares de Europa existen construcciones costeras y balnearios con estilos similares al de la vieja rambla Brístol, quizá no tan importantes como lo fue ésta. Algunos están casi encima del agua, pero en mares que no alcanzan a embravecerse tanto como para afectarlos; prueba de ello son los 150 años de existencia -o más- que pueden ostentar la mayoría. Quizá si en Mdp la hubiesen construido con un retiro prudencial, aun estaría en pie esa magnífica rambla. O sea que tendríamos una MdP totalmente distinta, verdad?. Y por cierto que todas estas fotografías dan fe de su enorme belleza arquitectónica, más allá de las connotaciones elitistas que motivaran su aparición y tal vez influyeran en su desaparición. Lo mismo se ve hoy belleza en abundancia, un poco mal mezclada, ni tanta como en estas fotografías de las añoranzas que vemos en FdF. Mis saludos.
Recordando algunos de mis comentarios en la foto 8213,enviada por el Sr. Enrique M. Palacio;sobre la familia Giaccaglia;Don Roberto T. Barili,escribiò:
El Sr. César Giaccaglia llegó a MdP en 1888,trabajando en el balneario La Perla,de Carboni Hnos. y en 1890,se instaló en la playa Brístol,con el balneario La Estrella del Mar,en sociedad con Francisco Ventura.
Era la época en que un pasaje elevado,-verdadero puente-de 70 mts. de largo aproximadamente,conducía desde el Hotel Brístol,hasta la playa,y casillas con ruedas eran arrastradas hasta la orilla del mar,para evitar el trayecto a los bañistas sobre la arena.Este balneario fue destruído por un incendio que se inició a las 1.30 de la madrugada del miércoles 8 de Noviembre de 1905,y las pérdidas fueron estimadas en 10 mil pesos.El Sr. Juan Lasalle,hizo reconstruir el Balneario Brístol,que fuera habilitado en 1890,por el Sr.José Cano,frente al mismo Brístol Hotel,y lo entregó en representación de una comisión en arrendamiento a los señores,Giaccaglia Hnos.El Balneario Argentino,también reconstituído fue entregado en iguales condiciones al Sr. Zátrate;años después los arrendamientos los pagó a la Provincia.
El Sr. Giaccaglia presidió la Sociedad Unión Salvamento en 1908,4 años antes los bañeros habían planteado un reclamo a los propietarios y arrendatarios de balnearios y en un acta levantada el 30-1-904 se dispuso por el artìculo 1º que cada propietario abonará al bañero un sueldo que a su juicio crea conveniente,y en su artìculo 2do.dice que los bañeros estaban sujetos a todas las obligaciones que han tenido anteriormente.Esa resolución fue tomada por los propietarios,en vista que no era posible aumentar la tarifa vigente,por considerarla elevada.
El problema de la jurisdicción de las playas preocupaba,como se pone de relieve en la nota del 6-12-1902,suscripta por el Dr. Ercheverry,del Ministerio de Obras Públicas de la Provincia,dirigida al intendente de Gral. Pueyrredón,referente a la jurisdicción y domino de las playas y riberas de la ciudad,la nota de referencia,menciona que el gobierno nacional resuelve desconocer la jurisdicción de las autoridades de la provincia,por lo tanto no puede intervenir,y sugiere al intendente que que si esta resolución afecta a los intereses de la Municipalidad,le queda la vía judicial para defenderse,recurriendo a la Suprema Corte. Desde 1913 hasta 1915 el Sr. Giaccaglia tuvo una pileta de natación en la Rambla Brístol en sociedad con Zárate.Un violento temporal destruyó ese natatorio.César Giaccaglia tuvo activa participación en sociedades vecinales y fuera de temporada dirigía trabajos en su chacra,en el pueblo de Peralta Ramos.El hijo de César Giaccaglia,Albano,nació en el Horno de Lázzaro,en inmediaciones de Chapadmalal,de niño vivió en el hotel Pierini,propiedad de su abuelo Fortunato Pierini,que estaba en Rivadavia y Entre Ríos,edificado por Pedro Besozzi.En 1898,concurrió al colegio de las señoritas Julia y Marcela Balerdi,en la esquina de Rivadavia y San Luis,en la casa de Peralta Ramos;también fue alumno del colegio de Bartolomé Musante ubicado en Santiago del Estero entre Luro y San Martín.En 1900 vivió en el hotel de Rafael Agustinelli y concurrió al colegio De Franc,situado en la calle Córdoba entre Rivadavia y San Martín,lindero hacia la primer calle mencionada,al almacén Aliende y hacia San Martín,la casa Crivelli y Cetta. Posteriormente en 1904 fue alumno del colegio a cargo del maestro Andochetti,que funcionaba en la antigua residencia del Sr. Juan B. Saffouret,en Hpólito Yrigoyen,entre Luro y 25 de Mayo,donde fue tiempo después el hotel Sorrento.En 1906 fué alumno de la escuela número 1, siendo su maestra Clotilde Alió de Francheri y la Señorita Donadío.Entre los alumnos de esa escuela se habían formado 2 bandos, el de la loma de Santa Cecilia,integrada por Degregori,Muttoni,Dentis,La Cava,Rizzo,Bonorino,Aliende,Gascón Grilli,García Vega,Rica,Bronzini, Frigerio,Caporaletti,Lozano,Albano Giaccaglia y otros;el otro bando, estaban Giri,Bouzas Galeppi (el Bendito) y otros,se recuerda que en 1907,Muttoni propinó una paliza que hizo época,al famoso Bendito,que además acostumbraba junto a otros a usar revolver y cuchillo.Se recuerda otra gresca estre estos alumnos,cuando se jugaba un partido de fútbol,con posterior asado en la calle Tucumán,donde luego se instaló la mueblería de los hermanos Bronzini.Albano Giaccaglia actúo en el campo de las actividades deportivas,como en Amigos Unidos que se iniciaban en la práctica del fútbol;posteriormente defendió los colores del San Martín.En 1916 fue designado presidente del Club Motociclista Marplatense,que funcionaba en esa época en España entre Luro y 25 de Mayo.Corrían en moto Riganti,Niglia,Enrique Genero,Galeano etc. En 1920,Albano,fundó el Mar del Plata Moto Club,de cuya comisión fue presidente durante varios años;se reunían en la Casa Ecker,de la calle Bolívar.Giaccaglia se retiró de esa actividades en 1928.
http://www.lacapitalmdp.com/contenidos/fotosfamilia/fotos/8213
Podemos ver una postal coloreada de la Pileta Giaccaglia-Zarate,en la foto 6372,enviada por el Sr. Enrique M, Palacio.
http://www.lacapitalmdp.com/contenidos/fotosfamilia/fotos/6372
Pileta Giaccaglia-Zàrate,en Playa Brìstol,década del 10….,leemos en el epìgrafe de la foto 4689,enviada por el Sr. Enrique M. Palacio.
http://www.lacapitalmdp.com/contenidos/fotosfamilia/fotos/4689
Leemos en el epìgrafe de la foto 3348:
“Pileta de natación Giaccaglia y Zárate que se encontraba en la Rambla Bristol.Imagen del álbum editado en 1915 por el fotógrafo Mateo Bonnin y enviada a Fotos de Familia por Julio César Rodriguez”.
http://www.lacapitalmdp.com/contenidos/fotosfamilia/fotos/3348
Se observan diversas construcciones en la terraza de la rambla, pocas veces vistas. Formaban parte de la construcción original o se agregaron después?
Recordando comentarios anteriores:
No hay en la ciudad planos de la Rambla.En efecto,como pasa con casi todas las obras oficiales o las que,sin tener ese carácter fueron pensadas desde Buenos Aires,como las estaciones ferroviarias,algunas escuelas estatales,los cementerios,algunas obras ribereñas y hasta obras privadas con destinos diversos,no existen en la Municipalidad planos de la Rambla.Desde hace mucho tiempo los buscamos,pero no hemos podido dar con ellos.Hace algunos meses fuimos,en su busca,con ilusorias esperanzas,a Obras Sanitarias.Esta repartición oficial,heredera de una tradición ingenieril de primer orden,donde cada elemento proyectado debía responder a normas taxativamente establecidas,no podía permitir que una obra de naturaleza de la que tratamos no tuviera planos exactos y aprobados de todos los sanitarios a instalar.Durante años,frecuentamos los archivos de la entidad en la calle Belgrano.Y en la calle Güemes,sin embargo,nos informaron –sin saber si hubo allí alguna vez planos de la Rambla- que por falta de espacio todos los planos de lo demolido en la ciudad fueron destruidos.Y solo cabe ponerse de pie y hacer un minuto de silencio.Conocimos los exteriores de la Rambla desde que tuvimos memoria y vimos cientos de fotografías de ese carácter.¿Cómo era,sin embargo,la Rambla Bristol? Años de observación de documentos –entre ellos,un par de planos de conjunto y un croquis de los locales de edificio-,y decenas de entrevistas a personas mayores que nos permiten,finalmente,tener una idea global de la obra aunque hay dudas imposibles de aclarar sin planos a la vista.
Y un anticipo general del caso podría ser el siguiente: la Rambla era una larga y estrecha faja de aproximadamente 400 metros de largo y 45 de ancho, compuesta por 3 cuerpos,1 central y 2 laterales vinculados con el 1º por anchas escalinatas.A favor del desnivel existente entre la calle costanera –desaparecida hoy- y el nivel de la arena,el arquitecto Jamín proyectó la rambla con cuatro niveles principales: en el más bajo,sobre la playa,se establecieron los balnearios.Sobre ellos se situaron el paseo –con una zona cubierta y otra descubierta- y los locales principales del edificio.A media altura de la planta de balnearios corría,unos 40 metros más atrás,la nombrada calle costanera y a ese nivel se abría otra galería cubierta a cuya vera se alineaba otra serie de locales.Sobre estos,en un 4º nivel,había viviendas accesibles desde los nombrados locales principales.Y finalmente,a un nivel que quizás pudiera haber sido también el último citado,había 2 cinematógrafos cuyas cubiertas planas eran las más altas del edificio entero.Había en el conjunto patios interiores sobre los que tenemos noticias poco claras y presumimos que no eran,precisamente,los puntos más felices del proyecto.Los rasgos más notables de la Rambla,finalmente,además de su larga columnata,eran 8 cúpulas,4 sobre el lado del mar,de alto perfil,y 4 sobre el lado de la ciudad,de planta oval y poca altura.La planta a nivel de la arena estaba dividida en tres fajas longitudinales.La exterior alojaba principalmente a los balnearios públicos y particulares;la central era un largo pasadizo de 400 metros de longitud,iluminado por claraboyas,y la que seguía,abierta a él y ciega en su parte posterior,alojaba servicios sanitarios,depósitos y dependencias varias abundantes escaleras que conectaban ese nivel con el superior.Con respecto a los balnearios,como hoy no existe nada semejante,es necesario remontarnos en el tama para comprenderlos En efecto,a principios del Siglo XX se tomaban baños de agua salada con fines terapéuticos y,por lo que le toca,el modo de vida de los porteños elegantes,la ceremoniosa lentitud con la que vivían esos privilegiados de la fortuna,distaban mucho de las costumbres de hoy.Por la mañana, se llegaba a la rambla vestido de calle –como se decía-,las mujeres con todos sus perifollos,zapatos,medias,una ropa interior mucho más abundante que la actual –incluido o no el corsé-,un vestido de mañana,muy complicado con relación a los de hoy y,por supuesto,sombrero y joyas infaltables.Los caballeros,por su parte,iban de riguroso traje –o conjunto de saco y pantalón muy formales-,camisa,chaleco y corbata y,faltaría más,el consabido sombrero.Para bañarse en el mar,obviamente,había que cambiarse de ropa.Los hombres resultaban más favorecidos porque su traje de baño era sencillo,pero el de las mujeres,al principio,era casi tan abundoso como el vestido de calle,con zapatillas,medias,traje,gorra y capa.Y de ahí los caperos,que acompañaban a las señoras cubiertas con la capa hasta el borde del bañero.Y la ceremonia se revertía a la salida del mar,cuando la dama volvía al balneario para sacarse primero la capa y acto seguido la que luego comenzó a llamarse malla,para volver a endosarse el vestido con el que había llegado la playa.Antes de vestirse,claro,había que sacarse la arena de los pies con el agua de un recipiente preparado para eso.Semejante ceremonia exigía una estructura montada para estos efectos y un personal que se ocupara de ellos.Y no olvidemos que en cada balneario había una persona que se encargaba de custodiar las joyas de sus clientes mientras estos tomaban su paño de mar.Las personas mayores,por su parte,acostumbraban tomar baños de inmersión en los balnearios propiamente dichos,preparados para esas circunstancias,con agua dulce o de mar,frías o calientes.Terminadas las ceremonias, l personal se ocupaba de los trajes y las toallas que había que lavar y tender en espera del día siguiente.Y nunca hemos dicho que la gente modesta alquilaba sus trajes de baño,capa incluida para las mujeres.Todo lo dicho sucedía en los balnearios públicos.Pero también existían,y se daba en alquiler,los balnearios privados donde había uno o más cuartos de baño,uno o más cuartos de descanso y sala de conversación Y agregaremos ahora que muchos asuntos de la política o el gobierno del país se debatían en los balnearios,los clubes o las confiterías de la Rambla.Sobre esta planta de balnearios se desarrollaba la planta principal del edificio,con su paseo descubierto,su galería cubierta y sus 45 locales;entre ellos sobresalían 4 por su tamaño,disposición y carácter especial.Eran,del Norte al Sur: la confitería La Brasileña,el Ocean Club,la confitería del Yacht Club y la Galería Witcomb.
Próximos al eje transversal del conjunto y obviamente conectados con la planta inferior estaban los grandes balnearios Bristol,de Giaccaglia Hermanos,y El Argentino,de Zárate Hermanos.Y por encima de ellos se abrían los 2 cines antedichos,el Splendid y el Palace Theatre.La planta al nivel de la calle constaba de una galería con arcos carpaneles detrás de la que se alineaban una cincuentena de locales.Sobre y otros había departamentos conectados con los negocios que medio nivel más abajo,se abrían a la galería que miraba el mar.
Esos departamentos,de los que no podemos concretar tamaño y forma –dados los pocos datos al respecto-,tenían algunos de sus cuartos iluminados con claraboyas y,además de las escaleras que los conectaban con los antedichos negocios y con la planta de los balnearios,disponían de acceso a las terrazas que los coronaban,por lo que deducimos que miles de escalones de mármol de Carrara eran transitados arriba y abajo por todo el edificio.Sin entrar en consideraciones sobre su calidad arquitectónica o constructiva,la Rambla era un edificios festivo,de recreo,un sitio para pasear para ver y ser visto,para mirar el mar,para reunirse en los balnearios,las confiterías o clubes,para ir al cine,para facilitar los baños,para comprar,para ser atendido a cuerpo de rey.Sus paseos,sus galerías,sus salones,sus locales varios cumplían a la perfección lo que se esperaba de ellos.Y tampoco entraremos en consideraciones sobre la frivolidad de la vida que se vivía allí.El edificio era de mampostería de ladrillos,con algunos muros,o parte de ellos,de piedra.Las fundaciones,en su mayor parte,se hicieron sobre pilotes formados por caños de hierro de un pie -30 centímetro- de diámetro,llenados luego con hormigón y hierro,aunque –según hemos visto después de algunos temporales previos al llamado refulado de la playa- la armadura de los pilotes no era demasiado canónica.Todas las columnas de la rambla tenían un alma metálica y todas las estructuras horizontales –entrepisos y cubiertas- eran de bovedillas de perfiles doble T que sostenían,no sabemos si en todos los casos –es lo que se ve en algunas fotografías de la construcción del edificio- bloques prefabricados.El exterior de la Rambla estaba terminado con el revoque llamado aquí símil piedra,compuesto por cemento blanco,polvo de piedra,arena dulce y óxidos varios que le daban color.Este revoque,de una dureza extraordinaria, era peinado con los llamados peines,láminas de acero no más grandes que la mano del que la manejaba,con dientes,a modo de peine,con los que raspaba el revoque fresco para eliminar las huellas del fratacho y darle así una textura pétrea.Los albañiles italianos llamaban material a la mezcla que componía este revoque duro para distinguirlo de la llamada cal,es decir,el revoque común compuesto por cal y arena.El exterior de la Rambla estaba decorado,además,por
cornisas y
molduras,orlas,estatuas,mascarillas,delfines,angelotes,guirnaldas, balaustres y maceteros,todo de argamasa armada,las más de las veces,con refuerzos de hierro.Un rasgo particular de las fachadas lo constituían unas piezas cerámicas,de varios modelos,que ornamentaban el llamado friso,es decir, una faja vertical de poca altura que corría debajo de las cornisas que daban coronamiento a los frentes del conjunto.Conocemos varios ejemplares de estas piezas,de diferentes colores y texturas,y podemos presumir que,para variar, fueron importadas.De este origen eran las baldosas cerámicas lisas que pavimentaban todas las superficies de circulación exteriores de la Rambla.Parte de esas piezas se utilizaron en los años 40 para construir algunas veredas interiores de la plaza Peralta Ramos.Pero el tiempo y las raíces dieron buena cuenta de ellas y,últimamente,muchas fueron removidas y –creemos- tiradas como material descartable cuando merecían ser salvadas de la desaparición,lgunas quedan,sin embargo.Las piezas en cuestión,de durísimo gres,tienen marca.En su cara inferior se puede leer Louis Escoyez,Tetre,Belgique.Y nos complace la ironía: cuando se construyó la Rambla no había,en nuestro dilatado país,tierras aptas para fabricarlas…Los rasgos más notorios de la Rambla eran,sin embargo,sus columnata y sus cúpulas.De las 8,las más notables eran las 4 de alto perfil que se levantaban sobre el lado del mar,en los flancos de las escalinatas Norte y Sur,y recordaban a las de las Exposiciones Universales europeas de la segunda mitad del siglo XIX,de neta raíz anglofrancesa.Estas cuatro altas y anchas cúpulas tenían una armadura de hierro del mismo cuño que la que sostiene la cúpula del Asilo Unzué.Con perfiles metálicos curvados y vinculados entre sí por planchuelas y remates.Y tan del mismo cuño eran –proyectadas además,y casi contemporáneamente,por arquitectos franceses- que cubrían,unas y otra,octógonos con 4 lados largos y cuatro cortos.El acabado de las que nos interesan era también metálico,de trabajado zinc,mientras que la del Asilo está cubierta por tejas de fibrocemento.Pero en unas y otra acentuaba aún más el parentesco la existencia de vitrales,planos los del asilo y algunos de los de la Rambla,y curvos los de las cúpulas propiamente dichas.En cuanto a las 4 cúpulas de planta oval que cubrían las llamadas rotondas situadas a ambos lados de las escalinatas Norte y Sur,sobre el Paseo Gral. Paz –que semejaban canastillas invertidas-,eran de poca altura y estaban compuestas por una estructura también metálica cubierta por chapas de zinc articuladas entre sí por costillas del mismo material,el todo terminado por un coronamiento bajo,una fuerte cresta de zinc con perforaciones circulares.Y para terminar diremos que el edificio que tratamos, pomposamente inaugurado el 19 de Enero de 1913,era considerado como la 1ª sección de un futuro conjunto mayor.Pero ese proyecto y otros,de los que conocemos dos,nunca se llevaron a cabo.(Fuente: Arquitecto Roberto O. Cova)
Esta elocuente fotografía enviada por el señor Iriarte demuestra que los proyectistas de aquella rambla, simplemente, no le dejaron lugar al mar.
En la foto 7827,remitida por el Sr. Hugò Meliàn,leemos en su epìgrafe:
“Vieja Rambla Brìstol vista desde el mar”.
http://www.lacapitalmdp.com/contenidos/fotosfamilia/fotos/7827
En la Foto 6437,remitida por el Sr. Enrique M. Palacio,leemos en su epìgrafe:
“Panorámica de Playa y Rambla Bristol”.
http://www.lacapitalmdp.com/contenidos/fotosfamilia/fotos/6437
Maqueta presentada cuando se hizo el proyecto de la Rambla Brìstol.Foto 5991,enviada por e el Sr. Miguel Solari.
http://www.lacapitalmdp.com/contenidos/fotosfamilia/fotos/5991
Los ùltimos tiempos de la Rambla Brìstol,foto 5643,remitida por el suscripto.
http://www.lacapitalmdp.com/contenidos/fotosfamilia/fotos/5643
Desde la terraza del Club Mar del Plata,permite ver la Rambla Brìstol y el paseo General Paz.Foto 2133,enviada por el Sr. José Alberto Lago.
http://www.lacapitalmdp.com/contenidos/fotosfamilia/fotos/2133
En la foto 2676,leemos en su epìgrAfe:
Un ángulo pocas veces visto: Juan Galeppi –abuelo de quien envía la foto- parado en la terraza de la Rambla Brìstol.Año 1937.Enviada por Andrea Galeppi,bisnieta de otro de los famosos fotógrafos de la rambla: Mateo Bonnin.
http://www.lacapitalmdp.com/contenidos/fotosfamilia/fotos/2676
Sr. Lafra. Efectivamente su observación fue el causal del final de la Rambla Afrancesada se tuvo que tirar una obra que realmente era y seria impactante. Era normal que los edificios de playas Europeas y de las nuestras estuvieran cercanas a la orilla del mar, lamentablemente los constructores no respetaron las (experiencias) aportada en los antiguos edificios que fueron hechos sobre pilares al saber que no ofrecían resistencia al golpe de ola, esto pasa al tener poca superficie a golpear, hubo varios temporales que dejaron huellas era cuestión de estudiar las construcciones que fracasaron. la prueba y error hay que estudiarla y anotarla pera crear una base de datos y no cometer la misma torpeza, en los países desarrollados cuando hay un derrumbe se estudia la causa y se evalúa para las siguientes obras y así evitar en lo posible que suceda lo mismo. Recuerdan como decía Américo Barrios en sus charlas No le parece. Atte. saluda José Alberto Lago
Señor Lago: muchas gracias por su aclaración. En efecto, en distintos lugares de Europa existen construcciones costeras y balnearios con estilos similares al de la vieja rambla Brístol, quizá no tan importantes como lo fue ésta. Algunos están casi encima del agua, pero en mares que no alcanzan a embravecerse tanto como para afectarlos; prueba de ello son los 150 años de existencia -o más- que pueden ostentar la mayoría. Quizá si en Mdp la hubiesen construido con un retiro prudencial, aun estaría en pie esa magnífica rambla. O sea que tendríamos una MdP totalmente distinta, verdad?. Y por cierto que todas estas fotografías dan fe de su enorme belleza arquitectónica, más allá de las connotaciones elitistas que motivaran su aparición y tal vez influyeran en su desaparición. Lo mismo se ve hoy belleza en abundancia, un poco mal mezclada, ni tanta como en estas fotografías de las añoranzas que vemos en FdF. Mis saludos.