Postal serie “Mar del Plata-Ciudad Balnearia y de Turismo- Nº 571 – Ediciones Terley, distribuidora Casa Moroni. Perteneciente a Patricia Fernández Pini. Enviada por Nilda Lago.
Siempre que aprecio una imagen de éste sector recuerdo las historias “Marplatenses” que solía relatarme un querido y respetado Directivo de uno de los Establecimientos donde me desempeño actualmente…Marplatense y amante de su Ciudad y de la práctica de la pesca el estimado Daniel me contaba sus días en la “Playa de los Ingleses” cuando “…En ese lugar con mi viejo pescábamos desde la calle…”
Agradecido una vez mas a las Sras. Lago y Fernández Pini por sus aportes y vaya también entonces mi recuerdo indeleble y por siempre agradecido al Sr. Daniel , a quien de uno u otro modo le estaré siempre en deuda y mis deseos mas fervientes por una nueva y feliz etapa de la vida .
Prof. Julián Mendozzi.
No son ésos los colores que recuerdo. Supongo que quisieron ‘alegrar’ una vista que, aun en ByN, es hermosa. Es muy lindo ver tan concurrido el lugar. Las famosas sillas de mimbre MdP, puestas a resguardo de la marea. Lafra.
HISTORIA AMBIENTAL Y TURISMO EN LA COSTA BONAERENSE.
De playas, vacaciones y ecología. (Extractos).
“…Gracias al éxito de Mar del Plata como villa balnearia, las playas fueron incluidas por primera vez en un proyecto económico y social de poblamiento, y devinieron ámbito deseable para el ocio y la recreación. Para la concepción de esa época (vigente también hoy, de manera más embozada), era necesario domesticarlas (“completarlas” según las palabras de Groussac) por el progreso, ese progreso cuya función declarada por sus impulsores era “perfeccionar a la naturaleza…”
“…Originalmente concebidas como entorno escénico para una vida social alejada de las vicisitudes cotidianas y de los contrastes sociales, adecuadas para realizar paseos elegantes, baños higiénico-recreativos y contemplaciones inspiradoras, las playas naturales fueron transformadas paulatinamente en balnearios urbanos para el turismo masivo…”
“…La muy deseable democratización del veraneo permitió su disfrute por las clases populares, pero la transformación de las playas inhabitadas en balnearios turísticos en la mayoría de los casos fue realizada con desconocimiento de los procesos naturales. Las regulaciones tendieron siempre a ser reactivas en vez de
preventivas, receta inmejorable para conducir a un estado de crisis crónica. Los ciclos económicos favorables fueron aprovechados para la expansión inmobiliaria…”
“…En Mar del Plata, el sistema de escolleras y defensas costeras generó problemas de erosión crónicos, que se agudizaron a partir de la construcción del puerto. Las escolleras que protegían las playas del centro al trasladaron el problema hacia el norte, hasta trasladarlo a las playas de Santa Clara del Mar…”
Casi a fin de siglo, el 12 de enero de 1999, se reinauguraron las playas Bristol, Varese y Grande remozadas por el repoblamiento artificial de arena, en un novedoso (para el país) esfuerzo por mejorar el principal atractivo turístico de la ciudad…”
“…Retrospectivamente, las playas turísticas encarnaron sucesivos proyectos de desarrollo económico y social. Consideradas inicialmente inhóspitas y carentes de interés, al finalizar el siglo formaban parte de la oferta de un mercado mundial, global y al mismo tiempo, muy segmentado. Los distintos proyectos orientaron y definieron profundas transformaciones ambientales, a través de procesos de
integración territorial, social y económica crecientes. Pero como consecuencias indeseadas, trajeron aparejados problemas ambientales también crecientes, lo que indica la existencia de límites precisos a la intervención humana. Por eso, sólo a través de la comprensión de los aciertos y de los errores que se sucedieron a lo largo de la historia ambiental del siglo veinte podrán encontrarse las claves para proyectar correctamente el futuro de estas playas…”
AUTOR : Dadón , José R. ; CONICET; Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo; y Facultad de Ciencias Exactas y Naturales, Universidad de Buenos Aires.
EN : Revista “Todo es Historia” ; N° 450 ; Enero 2005 ; páginas 54-62.
En el año 1970, alquilábamos en invierno con dos amigos, uno de los chalets que estaban en la barranca de Playa de los Ingleses, precisamente designado como Chalet N°4. La administración estaba llegando a Cabo Corrientes y a cargo del Gobierno de la Pcia. de Buenos Aires. Todo el mobiliario del chalet de dos plantas tenía un gran sello rectangular que rezaba: “PROPIEDAD DEL GOBIERNO DE LA PROVINCIA DE BUENOS AIRES”. Este chalet como todos los demás cayó bajo la piqueta a fines de la década del 70. Lo que recuerdo claramente es que estaba preparando el fuego en una parrilla que había en el exterior y escuchando la radio. En ese momento comunicaron que la Nación tenía nuevo presidente: Roberto Marcelo Levingston.
Continuando mi comentario anterior… Hacía unos días había sido destituído por la Junta de Comandantes el presidente (de facto) Juan Carlos Onganía. Ese año 1970 estuvo muy convulsionado; secuestraron y ejecutaron al general Pedro Eugenio Aramburu y el año anterior se había producido el Cordobazo. Estos hechos, entre otros, provocaron la salida de Onganía.
Estimado Carlos: Ese auto dorado, que aparece algo distorsionado, me parece que era marca “NASH” de origen norteamericano de alrededor de 1950. No es mi especialidad los autos pero los amigos siempre observadores de nuestra ciudad seguramente aportarán mas datos sobre el “dorado”. Un abrazo a Fotos de Familia y a todos los participantes que diariamente colaboran con este sitio que, a esta altura, se ha constituido en uno de los hitos mas significativos de nuestra identidad.
Señor Montagni: para mi ojo, es casi seguro que usted acertó con la marca de ese automóvil. Pese a la distorsión y los falsos colores, parece ser un Nash Rambler 1950 de American Motors. Llamaron mucho la atención por sus modernas líneas, que dejaron de lado los tradicionales guardabarros separados delanteros/traseros. Saludos.
Reverso de una postal “Terley-Moroni”
http://bimg2.mlstatic.com/pp15-mar-del-plata-pasco-costanero-postal-terley-antigua_MLA-F-139182897_9600.jpg
Prof. Julián Mendozzi.
Siempre que aprecio una imagen de éste sector recuerdo las historias “Marplatenses” que solía relatarme un querido y respetado Directivo de uno de los Establecimientos donde me desempeño actualmente…Marplatense y amante de su Ciudad y de la práctica de la pesca el estimado Daniel me contaba sus días en la “Playa de los Ingleses” cuando “…En ese lugar con mi viejo pescábamos desde la calle…”
Agradecido una vez mas a las Sras. Lago y Fernández Pini por sus aportes y vaya también entonces mi recuerdo indeleble y por siempre agradecido al Sr. Daniel , a quien de uno u otro modo le estaré siempre en deuda y mis deseos mas fervientes por una nueva y feliz etapa de la vida .
Prof. Julián Mendozzi.
En la foto 7128,enviada por el Sr. Roque Martinez,leemos en su epìgrafe:
Triste Final del Hotel Bella Vista….
http://www.lacapitalmdp.com/contenidos/fotosfamilia/fotos/7128
En la foto 7649,remitida por el Sr. Roque Martinez,podemos ver tristemente,la demoliòn del inolvidable Hotel Bella Vista.
http://www.lacapitalmdp.com/contenidos/fotosfamilia/fotos/7649
No son ésos los colores que recuerdo. Supongo que quisieron ‘alegrar’ una vista que, aun en ByN, es hermosa. Es muy lindo ver tan concurrido el lugar. Las famosas sillas de mimbre MdP, puestas a resguardo de la marea. Lafra.
HISTORIA AMBIENTAL Y TURISMO EN LA COSTA BONAERENSE.
De playas, vacaciones y ecología. (Extractos).
“…Gracias al éxito de Mar del Plata como villa balnearia, las playas fueron incluidas por primera vez en un proyecto económico y social de poblamiento, y devinieron ámbito deseable para el ocio y la recreación. Para la concepción de esa época (vigente también hoy, de manera más embozada), era necesario domesticarlas (“completarlas” según las palabras de Groussac) por el progreso, ese progreso cuya función declarada por sus impulsores era “perfeccionar a la naturaleza…”
“…Originalmente concebidas como entorno escénico para una vida social alejada de las vicisitudes cotidianas y de los contrastes sociales, adecuadas para realizar paseos elegantes, baños higiénico-recreativos y contemplaciones inspiradoras, las playas naturales fueron transformadas paulatinamente en balnearios urbanos para el turismo masivo…”
“…La muy deseable democratización del veraneo permitió su disfrute por las clases populares, pero la transformación de las playas inhabitadas en balnearios turísticos en la mayoría de los casos fue realizada con desconocimiento de los procesos naturales. Las regulaciones tendieron siempre a ser reactivas en vez de
preventivas, receta inmejorable para conducir a un estado de crisis crónica. Los ciclos económicos favorables fueron aprovechados para la expansión inmobiliaria…”
“…En Mar del Plata, el sistema de escolleras y defensas costeras generó problemas de erosión crónicos, que se agudizaron a partir de la construcción del puerto. Las escolleras que protegían las playas del centro al trasladaron el problema hacia el norte, hasta trasladarlo a las playas de Santa Clara del Mar…”
Casi a fin de siglo, el 12 de enero de 1999, se reinauguraron las playas Bristol, Varese y Grande remozadas por el repoblamiento artificial de arena, en un novedoso (para el país) esfuerzo por mejorar el principal atractivo turístico de la ciudad…”
“…Retrospectivamente, las playas turísticas encarnaron sucesivos proyectos de desarrollo económico y social. Consideradas inicialmente inhóspitas y carentes de interés, al finalizar el siglo formaban parte de la oferta de un mercado mundial, global y al mismo tiempo, muy segmentado. Los distintos proyectos orientaron y definieron profundas transformaciones ambientales, a través de procesos de
integración territorial, social y económica crecientes. Pero como consecuencias indeseadas, trajeron aparejados problemas ambientales también crecientes, lo que indica la existencia de límites precisos a la intervención humana. Por eso, sólo a través de la comprensión de los aciertos y de los errores que se sucedieron a lo largo de la historia ambiental del siglo veinte podrán encontrarse las claves para proyectar correctamente el futuro de estas playas…”
AUTOR : Dadón , José R. ; CONICET; Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo; y Facultad de Ciencias Exactas y Naturales, Universidad de Buenos Aires.
EN : Revista “Todo es Historia” ; N° 450 ; Enero 2005 ; páginas 54-62.
Prof. Julián Mendozzi.
VISTAS DEL HOTEL “SAENZ” ; SUPONGO ANTERIORES A ALGUNA AMPLIACIÓN/REFACCIÓN.
http://www.lacapitalmdp.com/contenidos/elgranalbumdemardelplata/imagenes/4601.jpg
http://www.lacapitalmdp.com/contenidos/elgranalbumdemardelplata/imagenes/1896.jpg
Prof. Julián Mendozzi.
Ese auto “dorado” puede que sea un Bordward Isabella ?
En el año 1970, alquilábamos en invierno con dos amigos, uno de los chalets que estaban en la barranca de Playa de los Ingleses, precisamente designado como Chalet N°4. La administración estaba llegando a Cabo Corrientes y a cargo del Gobierno de la Pcia. de Buenos Aires. Todo el mobiliario del chalet de dos plantas tenía un gran sello rectangular que rezaba: “PROPIEDAD DEL GOBIERNO DE LA PROVINCIA DE BUENOS AIRES”. Este chalet como todos los demás cayó bajo la piqueta a fines de la década del 70. Lo que recuerdo claramente es que estaba preparando el fuego en una parrilla que había en el exterior y escuchando la radio. En ese momento comunicaron que la Nación tenía nuevo presidente: Roberto Marcelo Levingston.
Continuando mi comentario anterior… Hacía unos días había sido destituído por la Junta de Comandantes el presidente (de facto) Juan Carlos Onganía. Ese año 1970 estuvo muy convulsionado; secuestraron y ejecutaron al general Pedro Eugenio Aramburu y el año anterior se había producido el Cordobazo. Estos hechos, entre otros, provocaron la salida de Onganía.
Estimado Carlos: Ese auto dorado, que aparece algo distorsionado, me parece que era marca “NASH” de origen norteamericano de alrededor de 1950. No es mi especialidad los autos pero los amigos siempre observadores de nuestra ciudad seguramente aportarán mas datos sobre el “dorado”. Un abrazo a Fotos de Familia y a todos los participantes que diariamente colaboran con este sitio que, a esta altura, se ha constituido en uno de los hitos mas significativos de nuestra identidad.
Señor Montagni: para mi ojo, es casi seguro que usted acertó con la marca de ese automóvil. Pese a la distorsión y los falsos colores, parece ser un Nash Rambler 1950 de American Motors. Llamaron mucho la atención por sus modernas líneas, que dejaron de lado los tradicionales guardabarros separados delanteros/traseros. Saludos.
Gracias Anibal, de todas maneras ya me parecía un poco grande para ser Bordward