Fragmento del plano del edificio de San Martín y Córdoba que hoy conocemos como Palacio Arabe. En realidad, nació sin nombre y luego adquirió esa denominación popular. Su propietario firmó con sus dos identidades: Jalil Hassein y Julián Gali. También se observa la firma del destacado arquitecto porteño Valentín Meyer Brodsky. Aporte de Yamil Hassein, nieto de Jalil.