En uno de los avisos de la derecha en la presente imagen se lee:
“Sunny Clime,de E..R.Amos-Productos de Río Negro-Fruta y Vinos,posiblemente su representante en MdP y de acuerdo al teléfono que se indica n° 1809,podría corresponder al Sr. Oscar J. Rumbo con Domicilio en la calle 6 de Septiembre 2421 (actual H. Yrigoyen) de acuerdo a los registros de época aportados por el Sr. Miguel L. Rosarno.
Hasta entrada la década del 80 uno de los hoteles mencionados en los avisos (el Pinot) estaba en pie, en muy malas condiciones. Si no me equivoco después de la demolición funcionó ahí la sucursal del desaparecido Banco Alas, que tenía sus novedosos cajeros automáticos en la vereda de enfrente.
En 1930 el Sr. Dante Poggi,que vemos mencionado en el presente aviso (Petit Hotel Turista) tenía un Balneario con su nombre en la Playa Brístol y también el Hotel “La Concordia” que se ubicaba en la calle 3 de Febrero 2751.
-Y recordando la foto 9405,enviada por el Sr. Ignacio Iriarte,el Sr. José Alberto Lago en el 10° comentario menciona:
“…vemos el Hotel Torreón llamado así por la torre de bombeo que estuvo a su lado que era de obras sanitarias luego se traslada a la sala que esta enfrente casi debajo del boulevard en el parque,donde cumple la función hoy…”
En el aviso de abajo,del lado derecho se observa la publicidad de la Ferretería de José Bañuelos,años después en dicha dirección funcionó Calzado Murias,de Manuel Murias y Cía. con telef.2-1279.
Sobre el Sr. José Bañuelos,podemos agregar la foto 9395,enviada por la Sra. Zulema Grilli,en cuyo epígrafe se lee: “Capilla ardiente montada en el Colegio Nacional antes del traslado del cuerpo de Alfonsina Storni a Buenos Aires”.Y en el 2do. comentario mencioné:
“Rodean los despojos de Alfonsina Storni los señores Roque Aronna;Edgardo Arata;Enrique Orlandini;Isaac Souessia;Amadeo A. Courel;Julio Auliel;corresponsal de “La Naciòn” Roberto T. Barili;Inspector de Enseñanza Secundaria a cargo del Colegio profesor don Juliàn Garcìa Velloso;Josè Bañuelos;Ezequiel P. Calleja y J. Calvo”
En uno de los avisos de la izquierda se lee “Hotel y Balneario Ocean”,de los hermanos Cánepa,podemos agregar que se admistraba en locales de la Rambla Brístol,y cuando esta comenzó a demolerse antes de finalizar la década del 30,la firma se dedicó a otra actividad,instalando un local de Fiambrería en la calle Rivadavia 2563,que estuvo durante muchos años,llamándose en la década del 50 “Casa Cánepa”,y a fines de los años 60 funcionó el Restaurante “Los Troncos”.
En el aviso publicitario del Hotel Torreón se hace mención a los “boletos combinados”. En 2016 LA CAPITAL publicó un artículo explicando esa mecánica de promoción turística y sus antecedentes, que datan de principios de siglo. En dicho artículo, que reproduciremos a continuación, se menciona como fuente documental un aviso publicitario publicado por Caras y Caretas. También fue enviado por el Prof. Mendozzi y podemos verlo en: http://www.lacapitalmdp.com/contenidos/fotosfamilia/fotos/9749
Los “paquetes turísticos”,
un invento centenario
La idea de vender “paquetes turisticos” para atraer visitantes a Mar del Plata ya cumplió 100 anos, cuestión que parece contradecir algunas creencias históricas.
El emprendimiento, novedoso por cierto, apuntaba a captar un publico de limitados recursos economicos. Es decir que en pleno fulgor del turismo aristocratico se hicieron los primeros intentos por atraer a un sector social menos favorecido.
La iniciativa, lejos aún del concepto de turismo social, tenia un proposito comercial: fortalecer la actividad turistica en fechas inexploradas, estableciendo una curiosa “pretemporada” entre fines de diciembre y la primera quincena de enero. Sus dos pilares eran la
hoteleria local y el Ferrocarril del Sud (de capitales ingleses), a quienes se requirio tarifas promocionales para conformar un paquete accesible.
Un artìculo publicado por LA CAPITAL en noviembre de 1915 da cuenta de la génesis del proyecto, cuyo promotor, el comisionado municipal Alberto Acevedo, procuraba “atraer al balneario el mayor nùmero de veraneantes,
aun de aquellos a quienes la modestia de sus limitados recursos pone trabas a sus justos deseos”. Para ello convocò a los hoteleros locales en su despacho
Cuando todavia no existian los CEOS, la ejecutividad demostrada fue asombrosa. En solo 48 horas y tras deliberar en el flamante hotel Regina -Peatonal San Martìn y Córdoba, donde hoy esta La Fonte D`Oro- los
empresarios elevaron una propuesta “verdaderamente al alcance de los bolsillos mas moderados”, segun indica la cronica.
En ella establecieron tres categorias hoteleras -A, B y C- fijando tarifas por siete días con los siguientes servicios: habitaciones interiores con dos o tres camas, desayuno, almuerzo y cena, coche de ida y vuelta a la estación y acarreo de equipaje.
Fueron nueve los hoteles pioneros que adscribieron a la iniciativa. En la categoria A el Regina, el Grand Hotel y el Royal, con una tarifa promocional de 80 pesos. En la B , el Victoria y el Universal (65 pesos). Y en la C el Hotel de Familie, Centenario, La Amistad y París (50 pesos).
Como se observa, el Bristol hotel, que todavía era un ìcono de la aristocracia veraneante, no se sumó inicialmente al emprendimiento.
En la misma nota, los hoteleros le encomendaron al comisionado Acevedo que gestionara ante el Ferrocarril del Sud la implementacion de “boletos de recreo con derecho a siete dias de hotel entre el 24 de diciembre al 15 de
enero”. Es decir que el turista, al momento de adquirir el pasaje rebajado, tambien “compraba” la semana de hotel.
Quizas llame la atención que el periodo promocional se extendiera hasta el 15 de enero, pero en las antiguas cronicas abundan quejas sobre los pocos
beneficios de la primera quincena.
Las gestiones iniciadas ante el presidente del Ferrocarril del Sud -el ingeniero Guillermo White- fueron el embrión de una modalidad de promocion turistica que resultaria beneficiosa en las decadas siguientes con el nombre de “boletos combinados”.
Un aviso publicado por la revista Caras y Caretas el 27 de febrero de 1932 ofrece valiosos datos sobre la evolucion de aquella iniciativa. En principio, la oferta se había mudado de un extremo a otro de la temporada y ahora abarcaba parte de marzo y todo abril. El numero de hoteles
ascendía a 90, divididos en seis categorias lideradas por el Bristol. Las estadìas eran de tres o de ocho dias, pero los turistas podian ampliarlas pagando la diferencia en el hotel.
Tambien observamos que los “boletos combinados” podian adquirirse en 20 ciudades del pais y que el Ferrocarril del Sud habia “tercerizado” su
venta traves de tres firmas: las agencias de viajes Exprinter y Eves y el Expreso Villalonga. Esta ultima tenìa estrechos vinculos comerciales con la empresa ferroviaria, al extremo que fue alcanzada por la expropiación
que años mas tarde pondria en práctica el presidente Juan Domingo Perón.
En el mismo aviso encontramos otra oferta novedosa: mil pasajes de primera clase por 15 pesos -ida y vuelta- en un tren de excursiòn a Mar del Plata el domingo 28 de febrero de 1932. El convoy partia de Constitucion a las 5
y llegaba a las 11.10. El turista permanecia en la ciudad con gastos a su cargo hasta las 18.30, cuando abordaba el mismo tren hacia Buenos Aires.
¿Doce horas de viaje contra siete de permanencia en Mar del Plata?. Si
El aviso incluye una rúbrica: “La Accion Colectiva- Turismo- Mar del Plata”, asociacion de hoteleros que fomentaba estos emprendimientos y subvencionaba la publicidad en los medios de prensa y la folleteria.
Facil es entender que los “boletos combinados” devinieron abstractos con los cambios politicos y sociales de la decada del 40, cuando las temporadas marplatenses se convirtieron en una propuesta masiva, sin
discriminaciones en el calendario veraniego. Pero algo queda – o debe quedar- de aquella centenaria iniciativa: el ingenio, la ejecutividad y el mejoramiento de la oferta “para atraer al balneario el mayor numero de veraneantes”.-
En uno de los avisos de la derecha en la presente imagen se lee:
“Sunny Clime,de E..R.Amos-Productos de Río Negro-Fruta y Vinos,posiblemente su representante en MdP y de acuerdo al teléfono que se indica n° 1809,podría corresponder al Sr. Oscar J. Rumbo con Domicilio en la calle 6 de Septiembre 2421 (actual H. Yrigoyen) de acuerdo a los registros de época aportados por el Sr. Miguel L. Rosarno.
Hasta entrada la década del 80 uno de los hoteles mencionados en los avisos (el Pinot) estaba en pie, en muy malas condiciones. Si no me equivoco después de la demolición funcionó ahí la sucursal del desaparecido Banco Alas, que tenía sus novedosos cajeros automáticos en la vereda de enfrente.
Vemos el hotel España de Belgrano 2530 y a su propietario en la siguiente foto:
http://www.lacapitalmdp.com/contenidos/fotosfamilia/fotos/7602
Entre las numerosas fotos que hay en el blog del hotel Torreón, aporto una que nos da su ubicación:
http://www.lacapitalmdp.com/contenidos/fotosfamilia/fotos/1641
En 1930 el Sr. Dante Poggi,que vemos mencionado en el presente aviso (Petit Hotel Turista) tenía un Balneario con su nombre en la Playa Brístol y también el Hotel “La Concordia” que se ubicaba en la calle 3 de Febrero 2751.
Sobre el Hotel Torreón indicado en la presente imagen,podemos agregar la foto 3391,enviada por el Sr. Carlos Alberto de Adá:
http://www.lacapitalmdp.com/contenidos/fotosfamilia/fotos/3391
-Y recordando la foto 9405,enviada por el Sr. Ignacio Iriarte,el Sr. José Alberto Lago en el 10° comentario menciona:
“…vemos el Hotel Torreón llamado así por la torre de bombeo que estuvo a su lado que era de obras sanitarias luego se traslada a la sala que esta enfrente casi debajo del boulevard en el parque,donde cumple la función hoy…”
En el aviso de abajo,del lado derecho se observa la publicidad de la Ferretería de José Bañuelos,años después en dicha dirección funcionó Calzado Murias,de Manuel Murias y Cía. con telef.2-1279.
Sobre el Sr. José Bañuelos,podemos agregar la foto 9395,enviada por la Sra. Zulema Grilli,en cuyo epígrafe se lee: “Capilla ardiente montada en el Colegio Nacional antes del traslado del cuerpo de Alfonsina Storni a Buenos Aires”.Y en el 2do. comentario mencioné:
“Rodean los despojos de Alfonsina Storni los señores Roque Aronna;Edgardo Arata;Enrique Orlandini;Isaac Souessia;Amadeo A. Courel;Julio Auliel;corresponsal de “La Naciòn” Roberto T. Barili;Inspector de Enseñanza Secundaria a cargo del Colegio profesor don Juliàn Garcìa Velloso;Josè Bañuelos;Ezequiel P. Calleja y J. Calvo”
http://www.lacapitalmdp.com/contenidos/fotosfamilia/fotos/9395
En uno de los avisos de la izquierda se lee “Hotel y Balneario Ocean”,de los hermanos Cánepa,podemos agregar que se admistraba en locales de la Rambla Brístol,y cuando esta comenzó a demolerse antes de finalizar la década del 30,la firma se dedicó a otra actividad,instalando un local de Fiambrería en la calle Rivadavia 2563,que estuvo durante muchos años,llamándose en la década del 50 “Casa Cánepa”,y a fines de los años 60 funcionó el Restaurante “Los Troncos”.
En mi último comentario debe decir “…finalizando la década del 30”
En el aviso publicitario del Hotel Torreón se hace mención a los “boletos combinados”. En 2016 LA CAPITAL publicó un artículo explicando esa mecánica de promoción turística y sus antecedentes, que datan de principios de siglo. En dicho artículo, que reproduciremos a continuación, se menciona como fuente documental un aviso publicitario publicado por Caras y Caretas. También fue enviado por el Prof. Mendozzi y podemos verlo en:
http://www.lacapitalmdp.com/contenidos/fotosfamilia/fotos/9749
Los “paquetes turísticos”,
un invento centenario
La idea de vender “paquetes turisticos” para atraer visitantes a Mar del Plata ya cumplió 100 anos, cuestión que parece contradecir algunas creencias históricas.
El emprendimiento, novedoso por cierto, apuntaba a captar un publico de limitados recursos economicos. Es decir que en pleno fulgor del turismo aristocratico se hicieron los primeros intentos por atraer a un sector social menos favorecido.
La iniciativa, lejos aún del concepto de turismo social, tenia un proposito comercial: fortalecer la actividad turistica en fechas inexploradas, estableciendo una curiosa “pretemporada” entre fines de diciembre y la primera quincena de enero. Sus dos pilares eran la
hoteleria local y el Ferrocarril del Sud (de capitales ingleses), a quienes se requirio tarifas promocionales para conformar un paquete accesible.
Un artìculo publicado por LA CAPITAL en noviembre de 1915 da cuenta de la génesis del proyecto, cuyo promotor, el comisionado municipal Alberto Acevedo, procuraba “atraer al balneario el mayor nùmero de veraneantes,
aun de aquellos a quienes la modestia de sus limitados recursos pone trabas a sus justos deseos”. Para ello convocò a los hoteleros locales en su despacho
Cuando todavia no existian los CEOS, la ejecutividad demostrada fue asombrosa. En solo 48 horas y tras deliberar en el flamante hotel Regina -Peatonal San Martìn y Córdoba, donde hoy esta La Fonte D`Oro- los
empresarios elevaron una propuesta “verdaderamente al alcance de los bolsillos mas moderados”, segun indica la cronica.
En ella establecieron tres categorias hoteleras -A, B y C- fijando tarifas por siete días con los siguientes servicios: habitaciones interiores con dos o tres camas, desayuno, almuerzo y cena, coche de ida y vuelta a la estación y acarreo de equipaje.
Fueron nueve los hoteles pioneros que adscribieron a la iniciativa. En la categoria A el Regina, el Grand Hotel y el Royal, con una tarifa promocional de 80 pesos. En la B , el Victoria y el Universal (65 pesos). Y en la C el Hotel de Familie, Centenario, La Amistad y París (50 pesos).
Como se observa, el Bristol hotel, que todavía era un ìcono de la aristocracia veraneante, no se sumó inicialmente al emprendimiento.
En la misma nota, los hoteleros le encomendaron al comisionado Acevedo que gestionara ante el Ferrocarril del Sud la implementacion de “boletos de recreo con derecho a siete dias de hotel entre el 24 de diciembre al 15 de
enero”. Es decir que el turista, al momento de adquirir el pasaje rebajado, tambien “compraba” la semana de hotel.
Quizas llame la atención que el periodo promocional se extendiera hasta el 15 de enero, pero en las antiguas cronicas abundan quejas sobre los pocos
beneficios de la primera quincena.
Las gestiones iniciadas ante el presidente del Ferrocarril del Sud -el ingeniero Guillermo White- fueron el embrión de una modalidad de promocion turistica que resultaria beneficiosa en las decadas siguientes con el nombre de “boletos combinados”.
Un aviso publicado por la revista Caras y Caretas el 27 de febrero de 1932 ofrece valiosos datos sobre la evolucion de aquella iniciativa. En principio, la oferta se había mudado de un extremo a otro de la temporada y ahora abarcaba parte de marzo y todo abril. El numero de hoteles
ascendía a 90, divididos en seis categorias lideradas por el Bristol. Las estadìas eran de tres o de ocho dias, pero los turistas podian ampliarlas pagando la diferencia en el hotel.
Tambien observamos que los “boletos combinados” podian adquirirse en 20 ciudades del pais y que el Ferrocarril del Sud habia “tercerizado” su
venta traves de tres firmas: las agencias de viajes Exprinter y Eves y el Expreso Villalonga. Esta ultima tenìa estrechos vinculos comerciales con la empresa ferroviaria, al extremo que fue alcanzada por la expropiación
que años mas tarde pondria en práctica el presidente Juan Domingo Perón.
En el mismo aviso encontramos otra oferta novedosa: mil pasajes de primera clase por 15 pesos -ida y vuelta- en un tren de excursiòn a Mar del Plata el domingo 28 de febrero de 1932. El convoy partia de Constitucion a las 5
y llegaba a las 11.10. El turista permanecia en la ciudad con gastos a su cargo hasta las 18.30, cuando abordaba el mismo tren hacia Buenos Aires.
¿Doce horas de viaje contra siete de permanencia en Mar del Plata?. Si
El aviso incluye una rúbrica: “La Accion Colectiva- Turismo- Mar del Plata”, asociacion de hoteleros que fomentaba estos emprendimientos y subvencionaba la publicidad en los medios de prensa y la folleteria.
Facil es entender que los “boletos combinados” devinieron abstractos con los cambios politicos y sociales de la decada del 40, cuando las temporadas marplatenses se convirtieron en una propuesta masiva, sin
discriminaciones en el calendario veraniego. Pero algo queda – o debe quedar- de aquella centenaria iniciativa: el ingenio, la ejecutividad y el mejoramiento de la oferta “para atraer al balneario el mayor numero de veraneantes”.-