“Buenos dias, como un amante de la ciudad, celebro esta iniciativa de poder compartir una parte de la historia de la misma en imágenes de (para mi) los mejores años. Tengo 57 y me he criado entre Av. Independencia al 1863 y Rivadavia 4137. He recorrido todos los barrios de los años 50, amo toda esa historia y aquella Mar del Plata antigua. Les mando una foto que encontré de una tia llamada Margarita Estela Amenábar, que fué Gobernanta del Nogaró y del Sasso. La foto esta sacada en la playa que quedaba cuando se retiraba el mar en Playa de Los Ingleses allá por el año 1949. Mi nombre es Jorge H. Seco. Esta tía falleció hace unos dias y creo sin lugar a equivocarme que toda nuestra familia se encontrará muy feliz de verla publicada. Nuevamente felicitaciones por la iniciativa”.-
Sr. Jorge. Aprecio su cometario. Este lugar tiene una linda historia, y me agrada decirles como nació el nombre del Paseo. Vemos la playa con bajamar. En ella los ingleses en epocas que construían el ferrocarril, disfrutaban jugando al fútbol, y los partidos por lógica, eran entre ingleses y argentinos. Cuando se hizo el camino, la sociedad marplatense lo llamó Jesus De Galíndez en honor a este Argentino que fue el goleador de un gran partido. Lo saludo a usted y su familia con todo respeto.
Sr. Jorge: Le agradezco su comentario sobre la foto 1667, en la que están mis abuelos. Comparto con Ud. el elogio a este sitio que nos permite conocer Mar del Plata desde sus raíces. Yo no se demasiado de la historia marplatense y aprendo con el aporte de todos Uds.
Me da mucho gusto ver esta foto y recuerdo todo los comentarios que “la tía Estela” siempre nos hacia de sus días de playa.
Tambien existe otro comentario al respecto del origen del nombre Playa de los Ingleses.
El antiguo nombre de la playa tuvo su origen en la odisea vivida por un grupo de marinos británicos a mediados del siglo XVII, miembros de la flota del Almirante Anson, cuyo país se enfrentaba en aquellos días con el Imperio español en la denominada Guerra de la oreja de Jenkins. Los marinos naufragaron con la fragata HMS Wager cerca de Chiloe, pero se las arreglaron para construir una pequeña balandra, la Speedwell, con los restos de la embarcación y con ella doblar el cabo de Hornos.
Tras varias peripecias, ocho de ellos fueron abandonados en lo que se cree es hoy la zona norte del Cabo Corrientes, es decir, Playa Varese. Dos fueron muertos por una partida de aborígenes, cuatro terminaron prisioneros de los españoles en Buenos Aires y los dos restantes fueron, se presume, llevados como cautivos de los tehuelches a la Patagonia.