Otro grato recuerdo me trae ésta imagen con el balde lleno…Mi Padre pasaba horas jugando conmigo en la arena y hacíamos una suerte de “obra hidráulica” que siempre tenía diversas formas y constaba de varios “pozos” separados por una determinada distancia unos de otros ; luego de hechos los pozos él comenzaba a hacer un túnel de un lado y yo hacía lo mismo en otro de los pozos pero en dirección contraria , de manera de “encontrarnos” a medio camino y dejar unidos los pozos por debajo y encima de ellos un “puente” de arena . Así hacíamos varios unidos entre sí y luego yo realizaba interminables “viajes” hasta la orilla en busca de agua con mi balde (color azul con cuadros blancos) para llenar los pozos y que el agua transcurriera por debajo atravesando los puentes…el tema era que al menos los primeros ocho ó diez baldes de agua eran absorbidos por la arena…hasta que ésta se “saturaba” y recién allí el agua comenzaba a inundar los pozos…
Sr. Julián: Muy lindo recuerdo, gracias por compartirlo. Un cariñoso saludo para Ud., el Lic. Somma, para el creador de este blog y para todos aquellos que lo compartimos y disfrutamos. Nilda
LOS MILES Y MILLONES DE NIÑOS QUE HAN DISFRUTADO DE ESTAS PLAYAS MARPLATENSES, PODIAN IR DESDE LA MAÑANA HASTA LA TARDECITA Y JAMAS UN CHICO SE IBA A ABURRIR, JAMAS…….
Sr. julián, aunque yo envié la foto y soy todavía un poco con 58 años el niño de la foto, sus comentarios hicieron que reviviera las “obras hidráulicas” que también realizaba con mi familia y amigos en las playas marplatenses. Los viajes en la arena a buscar agua y sentir los pies calientes al mediodía todavía los vivo, siento y vuelo en mi agradable nostalgia. Muchas gracias por sus recuerdos. Horacio Fernández.
Julián: Me place mucho leer su comentario ya que me remonta a mi época de niño jugando en la arena de San Sebastián en La Perla… Gracias por compartir sus recuerdos.
A mi me retrotrae a las bohemias playas de Punta Mogotes de los 60, con las bajadas de tierra y los tamariscos desperdigados. Allí ibamos con mis viejos en el Renault Dauphine, cargando la sombrilla de lona naranja comprada en “Vendaval” y la Noblex Carina con la que mi vieja reemplazó a la Hitachi a transitores ( toda una revolución en esos años). Las tardes parecías extenderse hasta el infinito en el tiempo y la distancia. Caminar con mi viejo desde el balneario Hurlinghan hasta el California era una travesía digna de Lawrence de Arabia. Aparecía a la tardecita el vendedor de los exquisitos helados Noel, y obviamnete el barquillero y el “cocacolero”. Un recuerdo de aquellas lejanas tardes de sábado y domingo, transparentes, saladas y arenosas que también condimentaron mi esencia.
Me encanta leer los comentarios de todas esas personas recordando su niñez en mar del plata, aunque no lo quieran creer la nostalgia los vuelve un poco poetas!!!!!!!!!!!y a ese niño que fueron lo llevarán por siempre en la mochila!!!!!!!!!!!!!!!
En las fotos 7669 y 7666 que mande hace tiempo, está ese mismo niño que tal vez haga volar a otros a las andadas en bicicleta en la Plaza Mitre, o en algún paseo por la bella Sierra de los Padres. Gracias a todos por enriquecer la vida!!!!!
Otro grato recuerdo me trae ésta imagen con el balde lleno…Mi Padre pasaba horas jugando conmigo en la arena y hacíamos una suerte de “obra hidráulica” que siempre tenía diversas formas y constaba de varios “pozos” separados por una determinada distancia unos de otros ; luego de hechos los pozos él comenzaba a hacer un túnel de un lado y yo hacía lo mismo en otro de los pozos pero en dirección contraria , de manera de “encontrarnos” a medio camino y dejar unidos los pozos por debajo y encima de ellos un “puente” de arena . Así hacíamos varios unidos entre sí y luego yo realizaba interminables “viajes” hasta la orilla en busca de agua con mi balde (color azul con cuadros blancos) para llenar los pozos y que el agua transcurriera por debajo atravesando los puentes…el tema era que al menos los primeros ocho ó diez baldes de agua eran absorbidos por la arena…hasta que ésta se “saturaba” y recién allí el agua comenzaba a inundar los pozos…
Prof. Julián Mendozzi.
Sr. Julián: Muy lindo recuerdo, gracias por compartirlo. Un cariñoso saludo para Ud., el Lic. Somma, para el creador de este blog y para todos aquellos que lo compartimos y disfrutamos. Nilda
LOS MILES Y MILLONES DE NIÑOS QUE HAN DISFRUTADO DE ESTAS PLAYAS MARPLATENSES, PODIAN IR DESDE LA MAÑANA HASTA LA TARDECITA Y JAMAS UN CHICO SE IBA A ABURRIR, JAMAS…….
Sra.Lago , mis respetos y un cordial saludo para usted.
Atte. Prof. Julián Mendozzi.
Sr. julián, aunque yo envié la foto y soy todavía un poco con 58 años el niño de la foto, sus comentarios hicieron que reviviera las “obras hidráulicas” que también realizaba con mi familia y amigos en las playas marplatenses. Los viajes en la arena a buscar agua y sentir los pies calientes al mediodía todavía los vivo, siento y vuelo en mi agradable nostalgia. Muchas gracias por sus recuerdos. Horacio Fernández.
Julián: Me place mucho leer su comentario ya que me remonta a mi época de niño jugando en la arena de San Sebastián en La Perla… Gracias por compartir sus recuerdos.
A mi me retrotrae a las bohemias playas de Punta Mogotes de los 60, con las bajadas de tierra y los tamariscos desperdigados. Allí ibamos con mis viejos en el Renault Dauphine, cargando la sombrilla de lona naranja comprada en “Vendaval” y la Noblex Carina con la que mi vieja reemplazó a la Hitachi a transitores ( toda una revolución en esos años). Las tardes parecías extenderse hasta el infinito en el tiempo y la distancia. Caminar con mi viejo desde el balneario Hurlinghan hasta el California era una travesía digna de Lawrence de Arabia. Aparecía a la tardecita el vendedor de los exquisitos helados Noel, y obviamnete el barquillero y el “cocacolero”. Un recuerdo de aquellas lejanas tardes de sábado y domingo, transparentes, saladas y arenosas que también condimentaron mi esencia.
Me encanta leer los comentarios de todas esas personas recordando su niñez en mar del plata, aunque no lo quieran creer la nostalgia los vuelve un poco poetas!!!!!!!!!!!y a ese niño que fueron lo llevarán por siempre en la mochila!!!!!!!!!!!!!!!
En las fotos 7669 y 7666 que mande hace tiempo, está ese mismo niño que tal vez haga volar a otros a las andadas en bicicleta en la Plaza Mitre, o en algún paseo por la bella Sierra de los Padres. Gracias a todos por enriquecer la vida!!!!!