En un juicio abreviado, el Tribunal Oral en lo Criminal condenó a Alejandro Matías Mulero a la pena de 4 años y 2 meses de prisión. Ya había cumplido otras dos penas por diferentes robos.
Un joven de 25 años fue condenado por haber asaltado a punta de pistola a una pareja en el barrio San Juan en octubre del año pasado y como ya había cumplido otras penas por robo, fue considerado reincidente por la Justicia.
En un juicio abreviado realizado en Tribunal Oral N° 3, el juez Fabián Riquert condenó a 4 años y 2 meses de prisión a Alejandro Matías Mulero, por encontrarlo culpable del delito de robo doblemente calificado por su comisión con arma de fuego cuya aptitud para el disparo no puede tenerse por acreditada y por ser cometido en lugar poblado y en banda y por ser cometido con un menor de edad.
Mulero se encuentra ininterrumpidamente privado de su libertad desde que fue detenido el 8 de octubre de 2023 y su pena vencerá el 7 de diciembre de 2027. Además, el juez Riquiert lo consideró reincidente y esta sería la tercera vez que la Justicia lo considera así al ladrón, que ya tuvo una condena en el Juzgado en lo Correccional 2 en 2018 de 3 años y 6 meses de prisión, una de 1 año de prisión por un robo y otra de de 3 años de prisión.
El hecho por el que condenaron a Mulero ocurrió el 8 de octubre del 2023 a las 16, en Guido y Belgrano, cuando una pareja estacionaba su camioneta marca Volkswagen Taos.
En ese contexto, Mulero, un adolescente de 16 años y otros dos hombres que no pudieron ser identificados, sorprendieron a la pareja, la amenazaron con armas de fuego y le obligaron a que le dieran las llaves del vehículo y sus pertenencias: una billetera con documentaciones, tarjetas personales, de crédito y débito, y dinero en
efectivo, además de diversos accesorios de la camioneta, un carrito con bolso de golf con 12 palos marca Callaway, dos bolsos de ropa y una cartera.
Tras expulsar a las víctimas del vehículo, los delincuentes subieron, pero no supieron cómo arrancar la camioneta, por lo que amenazaron otra vez al hombre y le exigieron que encendiera por ellos el motor del vehículo. Una vez conseguido esto, Mulero y el resto de los ladrones huyeron del lugar.
La policía fue inmediatamente a la zona y pudo interceptar a la camioneta Volkswagen Taos a las pocas cuadras. Los ladrones bajaron e intentaron perderse entre la gente, sin embargo los efectivos detuvieron a Mulero y a un adolescente de 16 años, quienes fueron reconocidos por testigos.
Para el juez, esto se trató de un caso de “cuasi flagrancia“, en el cual tras cometer el robo y darse a la fuga, fueron observados en todo momento por testigos y detenidos por la policía. “Lo expuesto sella la suerte de Mulero y lo ubica, más allá de toda duda razonable, como el coautor del atraco”, concluyó Riquert.
Finalmente, el magistrado consideró como agravante las sentencias condenatorias previas, que se encuentran acreditadas en el Registro Nacional de Reincidencia.