Miguel Ángel Galván (38) fue sentenciado por el homicidio de Ernesto Martín, ocurrido en noviembre de 2022 en el barrio Florentino Ameghino. El Tribunal Oral Nº 2 descartó que hubiera actuado en legítima defensa y revocó el arresto domiciliario del que gozaba desde marzo de 2023.
Un hombre fue condenado a la pena de 16 años de prisión por haber asesinado a otro de un balazo y herido a su hijo en la puerta de su casa del barrio Florentino Ameghino, en noviembre de 2022.
Se trata de Miguel Ángel Galván (38), a quien el Tribunal Oral Nº 2 halló culpable de los delitos de “homicidio agravado por el uso de arma de fuego” de Ernesto Martín, y “homicidio agravado en grado de tentativa” de Ignacio Ismael Martín, quien sobrevivió al ataque.
En su fallo, los jueces Roberto Falcone, Alexis Simaz y Néstor Conti descartaron los argumentos de legítima defensa planteados por la defensa de Galván, quien alegó haber sido amenazado por un grupo de hombres armados que habrían acudido a su vivienda de 25 de Mayo al 10.000. Según la resolución, los hechos probados indicaron que Galván disparó contra padre e hijo con fines de matar a ambos.
Durante la instrucción del caso que llevó adelante el fiscal Leandro Arévalo, Galván aseguró que había actuado para protegerse, luego de ser supuestamente acorralado por varias personas en un contexto de amenazas y discusiones vinculadas a deudas de terceros. Sin embargo, las declaraciones de testigos y las pruebas materiales presentadas por la acusación refutaron esta versión, destacaron los magistrados.
El tribunal consideró que los testimonios presentados por la defensa eran contradictorios y que no se pudo acreditar una agresión ilegítima que justificara su accionar. Además, se tuvo en cuenta que, tras los hechos, Galván amenazó a un testigo clave, lo que agravó su situación penal.
Prisión efectiva
Una vez conocida la sentencia, Galván, quien cumplía arresto domiciliario desde marzo de 2023, fue trasladado de inmediato a la Unidad Penal Nº 15 de Batán, ya que los jueces dieron cuenta del riesgo de fuga que implica la gravedad de la pena impuesta, y en ello fundamentaron la revocatoria de la morigeración.
El tribunal determinó que el 3 de noviembre de 2022, Galván baleó a Ernesto Martín en el abdomen. Minutos después, intentó asesinar a Ignacio Martín al dispararle el vehículo en el que se encontraba. Como se explicó antes, ambos hechos fueron calificados como “homicidio agravado” y “tentativa de homicidio”, respectivamente, cometidos “en concurso real”.
Con esta sentencia, la Justicia rechazó la versión del acusado y reafirmó la importancia de las pruebas testimoniales y periciales para esclarecer los casos. Galván enfrentará ahora una condena de 16 años en prisión, mientras su defensa analiza posibles instancias de apelación.