La medida implementada este viernes por la UOCRA para la obra privada fue respaldada por desarrolladores y cámaras empresarias. Continuará la próxima semana. El Municipio no puso trabas. Trabajadores celebraron retomar la actividad.
A pesar de que la obra privada no está permitida dentro de la fase 3, con el respaldo de desarrolladores inmobiliarios y cámaras empresarias los obreros de la construcción de Mar del Plata reactivaron hoy la actividad del sector con una “huelga a la japonesa”: volvieron a trabajar y seguirán haciéndolo la semana que viene como manera de reclamo.
En la ciudad, menos 10 casos de coronavirus se detectaron entre los más de 5000 obreros de la construcción en los últimos cuatro meses en al menos 500 emprendimientos privados. Ninguno se dio en los espacios de trabajo. A diferencia de lo que ocurre en el AMBA, los trabajadores del sector utilizan “muy poco” el transporte público y no viajan de un distrito al otro. Más allá del financiamiento, “no hay diferencia” entre la obra privada y la pública, que sí está habilitada en fase 3.
Con esos argumentos, la Unión Obrera de la Construcción (UOCRA) implementó este viernes una “huelga a la japonesa”, modalidad de reclamo que supone ir a trabajar más de lo habitual como medida de presión, pese a que en realidad en Japón las protestas laborales se realizan mediante huelgas convencionales y la forma es más un mito que una realidad.
“La medida empezó este viernes y ha tenido un alto acatamiento. Es una alegría enorme ver a los muchachos en las obras. La huelga va a seguir hasta que nos digan que podamos trabajar libremente; hasta que los políticos se den cuenta de que nos hace falta trabajar”, manifestó César Trujillo, secretario general de la UOCRA, en diálogo con LA CAPITAL.
Bien temprano, los frentes de las obras privadas volvieron a llenarse de motos y bicicletas en las que se moviliza la mayoría de los obreros de la construcción. Otros trabajadores fueron trasladados en unidades dispuestas por los inversores y empleadores.
“Necesito volver a trabajar. Tengo una familia a cargo, tengo que pagar el alquiler y sabemos que tenemos que cuidarnos mucho, como veníamos haciendo pero era necesario volver a laburar”, contó Juan, trabajador de una obra que Mariani y la costa que volvió a la actividad este viernes.
Respaldo empresarial
Enseguida, los colegios profesionales, desarrolladores inmobiliarios y cámaras empresarias Mar del Plata respaldaron la medida de los obreros, que el jueves por la noche lanzaron un video en el que fundamentaron su adhesión.
Si el resto de la industria puede, la obra privada también👷🏼♀️👷🏽@Carli_Bianco @Kicillofok @JefaturaPba @gmontenegro_ok
Expresión conjunta de @uocra , @camara_mdp, CCyA, Colegios Profesionales y FADU. Abajo un adelanto y aquí el link con el video completo: https://t.co/lf7KDEHJhP pic.twitter.com/GlnRGOsn7q
— Cámara de Desarrolladores Inmobiliarios MdP (@camara_mdp) September 11, 2020
Desde la Cámara de Desarrolladores Inmobiliarios advirtieron que Mar del Plata “quedó en desventaja” ya que “la obra privada quedó ubicada en fase 4 porque en el AMBA muchos se trasladan de un distrito a otro y utilizan transporte público, algo que en la ciudad no pasa, de acuerdo a lo que hemos relevado”, planteó la vicepresidenta de la entidad, Florencia Miconi, en declaraciones a Radio Brisas.
La además representante de la firma constructora Ingeniero Miconi y Asociados SA (Imasa) señaló que desde el retroceso a fase 3 “la situación se volvió insostenible” y recordó que el 11 de mayo las obras privadas habían retomado su actividad, escenario que se interrumpió a fines de agosto ante el retroceso a fase 3.
“La industria se había reactivado el 11 de mayo con un protocolo aprobado por la Nación, el Municipio y la Provincia. Se trabajó cuatro meses en 500 obras y no hubo ni diez contagios. Acompañamos la medida de la UOCRA”, apuntó Miconi.
En tanto, el Centro de Constructores y Anexos de la ciudad celebró la medida impulsada por los obreros. “Eso cambia el tinte del reclamo, es una forma nueva de reclamar que deja en evidencia el grado de necesidad y humildad que tienen en el gremio y no hay que darle la espalda”, indicó Leonardo Tamburini, presidente de la institución en diálogo con LU6 Radio Atlántica.
El Municipio, en tanto, no puso obstáculos para la reactivación de la construcción bajo esa modalidad.
Protocolo
Los obreros de la construcción retomaron con esta modalidad de huelga sus tareas de la mano del mismo protocolo que acompañó a la actividad mientras la ciudad estuvo en fase 4.
“Desde el inicio se hizo hincapié en el estricto cumplimiento de los protocolos, en los cuidados sanitarios que deben tenerse y se desalienta el uso transporte público”, remarcó el titular del Centro de Constructores.
En el mismo sentido se manifestó la UOCRA. “Volvimos a recorrer las obras, hubo un alto acatamiento y constatamos que el protocolo se cumple a rajatabla”, aseguró Trujillo y marcó que en todas las construcciones se toma la temperatura, se aplica alcohol, se completa el registro de los trabajadores, se respeta el distanciamiento y las medidas de cuidado a la hora del ingreso, el descanso y la salida.
“La gente de la construcción es laburante, se levanta a las 5 de la mañana y se va en bicicleta a la obra, esto los políticos lo tienen que entender. Estamos en la misma condición que la obra pública, solo cambia quién la financia. Pero la gente se cuida porque quiere tener el trabajo para sostener a sus familias, pagar el alquiler y vivir”, agregó el titular local de la UOCRA.