El intendente enumeró el déficit recibido y dijo que "el daño que le han producido a la ciudad es grave". Sin embargo, entendió que "se renovó la confianza del contribuyente en la municipalidad".
PINAMAR (Corresponsal).– El intendente de Pinamar, Martín Yeza, abrió este viernes el período de sesiones ordinarias y trazó un crítico panorama sobre la municipalidad recibida al calificar de “grave” el déficit heredado y la corrupción instalada en la administración pública.
Entre otros párrafos, Yeza expresó que “venimos de una desorganización absoluta, esto alimentó una estructura corrupta” y aseguró que “la municipalidad refleja los efectos de una crisis recaudatoria y una política de gastos errática”.
Además, destacó que “el daño que le han producido a la ciudad es grave” aunque entendió que “se renovó la confianza del contribuyente en la municipalidad” y prometió que “cualquier escollo de la corrupción será erradicado”.
Como ejemplo de lo que sucedía en la comuna cuyos intendentes Roberto Porretti y Blas Altieri fueron destituidos en 2008 y 2012, respectivamente, Yeza manifestó que “durante los primeros 20 días venían los empresarios o inversores y querían arreglar con el intendente, no sé cómo llegamos a esto pero nosotros no transamos”.
Enumeró en el derrotero de gobierno que “asumimos una municipalidad en la que el teléfono e internet estaban cortados desde hacía meses, en la mayoría de las áreas no había ni sillas para sentarse, un nivel de desidia que era observable por cualquiera”.
También manifestó que al asumir el 10 de diciembre “la contabilidad del municipio indicaba que debía haber en cuentas corrientes destinadas a los fondos afectados de obras a la comunidad un total aproximado de 42.218.000 pesos, sin embargo el análisis de las cuentas bancarias en el cambio de autoridades de la administración municipal arroja que se disponía aproximadamente 9.045.000 pesos”.
“Se desprende – continuó- que 33.173.000 pesos de fondos afectados habían sido usados para gastos corrientes, principalmente sueldos ante la incapacidad de generar recursos genuinos” y criticó que “deberían haber sido utilizados en la construcción de obras como por ejemplo la planta depuradora y debían haber sido devueltos antes del 31 de diciembre, cosa que no ocurrió”.
Yeza sumó la complicación que afrontó para afrontar los salarios y aguinaldos de diciembre porque contaba con sólo 6 millones de pesos de libre disponibilidad pero que debía abonar 32 millones. Ese recurso se originó con “una marcada mejora en los ingresos corrientes de diciembre asociada a la estacionalidad que presenta nuestro sistema de recaudación”.
Deterioro
En su descripción, Yeza culpó a las gestiones anteriores porque “faltó gasto y se nota en el deterioro del parque automotor, faltó inversión, las calle no pudieron ser arregladas por mucho tiempo, no estaban pintadas, el hospital y el hogar de abuelos se llueve, las luminarias no se reemplazaron, las ambulancias no alcanzan”.
Precisó que “9 de cada 10 pesos que se recaudaron en 2015 fueron a sueldos. Ninguna organización puede sobrevivir demasiado tiempo con el 90 por ciento de sus ingresos destinados a sueldos”.
Para enfrentar ese panorama sostuvo que “venimos trabajando parar revertir los magros resultados en la cobrabilidad de tasas” y recordó que “en 2015 la tasa de servicios urbanos, la de mayor ingreso, fue del 59 por ciento” mientras que “al 23 de marzo (de este año) se cobró el 64 por ciento de lo emitido por tasas de servicios urbanos durante 2015”.
Por otra parte, Yeza dijo que una de los ejes de su gestión será la transparencia por lo cual ha implementado “una agenda abierta de gobierno” y procedió a la publicación de decretos online.
Incluso, anunció que pondrá en marcha un sistema legislativo en la web. “Nuestra agenda legislativa está online en la página pinamartransparente.com y ahí pueden entrar los vecinos y hacer sus comentarios, críticas y aportes a los proyectos y además marcar de qué manera votarían en cada uno de ellos”, aclaró.
En tanto, reconoció que “hubiera preferido la prohibición total” de los franelitas durante la temporada “pero el proyecto de Juan José Dos Santos (concejal) fue más viable, sacamos de circulación a casi 250 trapitos, casi 50 de ellos tenían pedidos de captura y ahora saben que si quieren venir el verano que viene no serán bienvenidos”.
Proyectos
Entre los proyectos a desarrollar, Yeza mencionó el inicio y construcción de la planta depuradora, la revitalización del espacio público “en los lugares donde más hace falta” donde destacó que “en Ostende no sólo no hay cafés sino que no hay plazas populares”, y la organización progresiva de las cuentas y del trabajo municipal.
Agregó que se recuperará “la fiesta del Poseidón” como insignia pinamarense de años anteriores y buscará la capacitación obligatoria del personal que recibe al turista para mejorar la calidad de prestación de servicios.