Compartieron en las redes sociales las insólitas diferencias entre sus pedidos y lo que finalmente les enviaron.
Un grupo de clientes se llevó una gran sorpresa cuando los artículos que compraron por Internet no se parece en nada a lo que imaginaban. Desilusionados por las diferencias con las fotos decidieron ponerle un poco de humor y compartieron sus fallidos en las redes sociales.
Desde vestidos que sólo le entran a la modelo, medias que no resultaron para nada sensuales, colores que nadie eligió, hasta la ausencia de tela en vestidos de fiesta. La seguidilla de imágenes se viralizó en cuestión de pocas horas y nos recordó la importancia de no creer todo lo que nos venden por la web.