El asesinato del médico encierra una trama que mezcla drogas, prostitución, engaños, corrupción policial y la soledad de un hombre de 72 años. La policía Rosa Saino y Erika Córdoba son juzgadas por el Tribunal Oral N°4.
La policía Rosa Saino y Erika Córdoba comenzaron a ser juzgadas este martes en el Tribunal Oral N°4 por el crimen de Roberto Tortorella, el médico de 72 años que en marzo de 2017 fue asaltado, asesinado y su cuerpo enterrado en proximidades del arroyo De los Padres.
Los jueces Alfredo José Deleonardis, Gustavo Raúl Fissore y la magistrada Silvina Darmandrail serán los encargados de juzgar uno de los casos que cobraron mayor impacto en Mar del Plata en 2017.
Cabe recordar que hay otra mujer imputada por el crimen de Tortorella, Deborah Faijós, que no participa de este debate ya que había solicitado ser juzgada por jurados, pero su juicio quedó suspendido ya que no se logró seleccionar a doce ciudadanos titulares y seis suplentes que integrasen el cuerpo.
La policía Rosa Saino llega al debate como la principal acusada de haber asesinado a Tortorella y está imputada por “robo agravado y homicidio triple mente agravado, criminis causa, premeditado y ensañamiento“, mientas que Erika Córdoba, vinculada a la barra brava de Alvarado, es acusada de haber entregado información para cometer el delito y está imputada por su “participación necesaria” en el robo.
Además del fiscal Arévalo, en el debate participará la abogada Liliana Pérez, como querellante de la familia Tortorella; la defensora oficial Gabriela Zapata, en representación a Córdoba y los abogados Armando Zelaya y Natalia Scalogna, en representación de Saino.
En la apertura del juicio, Arévalo sustuvo la hipótesis de la investigación, que involucra a Saino como una de las autoras materiales del hecho -Faijós sería la otra, pero en este juicio no participa-, a Córdoba como quien le habría aportado el “dato” de que Faijós estaba con Tortorella, un hombre con dinero en su casa y a otra persona que no pudo ser identificada, que habría ayudado a trasladar el cuerpo.
Por su parte, la abogada Scalogna adelantó que buscarán demostrar la inocencia de Saino y solicitarán una sentencia absolutoria.
La abogada trazó, a modo de introducción, un perfil de Rosa Saino, de quien destacó que se trata de una policía que se desempeñaba en la subcomisaría casino, madre de dos nenes y próxima a dar el curso para ser oficial. Además, la letrada dijo que había prestado servicios en el Ejército Argentino y que su defendida conocía desde hacía años a Faijós, al haberse encontrado en la cárcel de Batán mientras visitaban parientes.
Según la letrada, la relación entre Saino y Faijós se centraba en la “vocación” de ayuda de la policía, ya que había encontrado en Faijos a una mujer con un profundo problema de adicciones que necesitaba ser rescatada.
Según explicó Scalogna, ese verano de 2017, Saino quería comprar un auto usado y eso, por casualidad, la llevó a comunicarse con Faijos los días previos del crimen de Tortorella y volvieron a verse y hablar por redes sociales.
“Rosa (Saino) se hallaba trabajando cuando fue el hecho”, aseguró Scalogna, quien consideró que Faijos busca incriminarla en el crimen.
Finalmente, la defensora oficial Zapata, dijo que discutirá la participación en el hecho de su defendida, Erika Córdoba y que discutirá la calificación del hecho.
Tortorella