El conjunto de Rosario venció 2-1 a Deportivo Riestra y pasó a octavos de final.
BUENOS AIRES.- Rosario Central se clasificó esta tarde a los octavos de final de la Copa Argentina, tras derrotar 2 a 1 a Deportivo Riestra en un partido jugado en cancha de Argentinos Juniors.
Fernando Zampedri, a los 10 minutos del complemento, puso en ventaja a Central, mientras que Elías Gómez, en contra, a los 20 puso el empate, el cual fue quebrado definitivamente por José Leguizamón, sobre los 27.
Ya clasificado, Central enfrentará en la siguiente instancia al ganador de la llave que jugarán, el miércoles 13 de setiembre en el estadio Malvinas Argentinas de Mendoza, Guillermo Brown de Puerto Madryn y Boca Juniors.
El triunfo de Central resultó sumamente justo, ya que en el juego superó con cierto margen a Riestra, que llegó a La Paternal con el objetivo de alcanzar la definición del tiro de los puntos del penal y dar el batacazo.
Si bien fue más, el equipo rosarino careció de claridad a lo largo del encuentro, en parte por mérito de Riestra y en parte por carecer, al menos hoy, de un jugador que aportara claridad.
En los primeros cuarenta y cinco, Central tuvo dos ocasiones de gol nacidas de la misma fórmula: centro de Gómez para el ingreso de Zampedri. En una el delantero cabeceó y produjo una buena intervención del arquero Carlos Morel, y en la otra la tiró por encima del travesaño tras un toque con su pierna derecha.
Similar fue el desarrollo del complemento hasta los 10 minutos, instante en que llegó la apertura del marcador. Corner desde la derecha, cabezazo de Washington Camacho, Morel la sacó hacia un costado, justo por donde apareció Zampedri para empujar al gol.
Parecía que Central tenía el camino allanado, pero a los 20 llegó el empate. Corner desde la derecha, Gómez quiso rechazar de cabeza pero no hizo más que introducir el balón en su arco.
Central no se desesperó y fue en busca del segundo, pero continuó careciendo de claridad. Los disparos de media distancia, como un disparo de Mauricio Martínez que fue bien neutralizado por Morel, fueron su única vía de llegada.
Por insistencia el empate estaba al caer y cayó a los 27 minutos. Corner desde la derecha, rechazo, nuevo centro, y ante una pelota que quedó boyando, Leguizamón sacó un violento derechazo que depositó la pelota en el fondo de la red.
Central ganó, y ganó bien, aunque debió trabajar más de lo esperado.