Pese a las complicaciones de distancia ya se instaló la electricidad, el agua y continúan los trámites para obtener el servicio de gas. El proyecto conjunto de la Fundación Azara y el municipio pretende ser inaugurado en primavera y permitirá realizar estudios específicos en la zona.
MIRAMAR (Corresponsal). – Durante este verano se produjeron avances sobre el edificio donde funcionará a futuro la estación de investigación biológica en la lejana villa balnearia de Centinela del Mar, ubicada casi sobre el límite del distrito de General Alvarado con Lobería.
Cabe señalar, que hasta hace cinco años atrás funcionó allí la escuela 16 “Alfonsina Storni”, junto con un jardín de infantes, aunque cerraron por falta de matrícula.
Dada esta situación, y en virtud de que la región tiene mucho valor arqueológico y paleontológico, se amplió un convenio entre el municipio y la Fundación Azara, que ya se encontraba vigente desde la puesta en marcha del nuevo museo de Ciencias Naturales de Miramar en 2019.
Para esto, se lograron las gestiones necesarias con el fin de desarrollar en un espacio para actividades científicas y así estimular la conservación del patrimonio y la riqueza del ambiente natural.
“Vamos avanzando de a poco, Centinela está un poco lejos de Miramar, pero pudimos realizar unos trabajos en la temporada para ir dejando en condiciones ese espacio. Limpiamos todo el edificio, instalamos la electricidad, el agua y seguimos los trámites para conectar el gas. Luego quedarían los detalles de revoques y pintura”, indicó a LA CAPITAL, el museólogo Daniel Boh.
“Seguiremos las tareas a lo largo de este año y la idea es que el centro de investigación esté listo para funcionar a partir de la primavera”, agregó.
Según trascendió, el edificio contaría con una sala de exhibición con finalidad educativa para la interpretación del patrimonio natural y cultural de la zona para de esta manera facilitar el trabajo de los profesionales, entre ellos, geólogos, paleontólogos y ecólogos.
Además, se organizarán desde allí salidas de campo orientadas a estudiantes universitarios de carreras como ciencias biológicas, geología, geografía, turismo y gestión ambiental.
Cabe señalar que, en su momento, la cesión del dominio fue aprobada por unanimidad en el Consejo Escolar, mientras que la Fundación Azara aportaría el equipamiento para el desarrollo de los proyectos, según las metas propuestas.