De todas maneras, no se va a ejecutar hasta que la Cámara confirme y deje la resolución firme. Está detenido desde junio en una comisaría de Balcarce por haber atropellado y matado a la adolescente de 14 años.
La Justicia de Garantías le concedió el arresto domiciliario a Federico Sasso, el joven detenido por haber atropellado y matado a Lucía Bernaola (14) mientras conducía alcoholizado por la costa en la madrugada del 4 de junio.
Si bien la jueza de garantías Rosa Frende dio lugar al pedido de morigeración presentado por la defensa de Sasso, representado por el abogado Facundo Capparelli, aún no se va a ejecutar hasta que la Cámara confirme y deje la resolución firme.
Sasso, de implementarse la prisión domiciliaria fijada por la jueza Frende, deberá fijar como domicilio la casa de su madre -quien será su tutora legal- y tendrá que utilizar una pulsera electrónica que será monitoreada por el Servicio Penitenciario de la Provincia de Buenos Aires.
Además, la jueza de garantías dispuso de una serie de obligaciones “especiales” para otorgarle la prisión domiciliaria a Sasso, quien tendrá que realizar tratamiento psicológico y psiquiátrico, tendrá que abstenerse de abusar de alcohol y tendrá prohibido todo contacto personal o por cualquier otro tipo de medio (teléfono, redes sociales, etc) con los testigos hasta la culminación del proceso.
El fiscal Pablo Cistoldi solicitó la elevación a juicio para Federico Sasso por “homicidio simple”, una calificación con una expectativa de pena que va de los 8 a los 25 años de prisión. Subsidariamente, el fiscal también había solicitado la calificación de “homicidio culposo agravado”, con una pena que va de 3 a 6 años.
El hecho
Según pudo investigar la fiscalía desde el domingo 4 de junio, Sasso circulaba aquella madrugada, a las 2.50, en su Renault Clío modificado mecánicamente (altura no convencional, espirales cortados, entradas de aire) y con alcoholemia por encima del permitido más de dos veces (1,23 g/l). En tales condiciones ingresó a la curva de la calle Alberti –avanzaba por la costa desde el centro al Sur- por el carril izquierdo, a una velocidad muy superior a la máxima permitida (no menor a 78 km/h contra 30 km/h).
El rodado derrapó, invadió la contramano, subió a la vereda del paseo costero y embistió a un grupo de peatones que se hallaba allí. Producto del violento impacto, Lucía Bernaola falleció en el lugar y nueve personas padecieron lesiones de distinta gravedad. Sasso huyó del lugar pero regresó a los pocos minutos.