Todos los entretelones de lo que es noticia en Mar del Plata.
Tiempos vertiginosos estos, de tensión, incertidumbre, anuncios, ajustes, eliminación de subsidios y nuevas medidas económicas. Un tema tapa o sepulta rápidamente al anterior. Un título del diario envejece en minutos. Tiempos en los cuales también se puede sacar “provecho político”, presentando iniciativas que muchas veces resultan antipáticas para la sociedad. Históricamente, la elevación del proyecto de presupuesto al Concejo Deliberante ha generado inquietud en las autoridades comunales, porque de la iniciativa de más de un millar de fojas, lo que realmente termina interesando como cuestión saliente es el incremento que se prevé para el año próximo de las tasas municipales. Con bolsillos flacos, inflación galopante y variables económicas sorprendentes, el anuncio de la suba de impuestos nunca es una buena noticia para los contribuyentes. Este año no fue la excepción y hace apenas algunas horas nada más, el intendente Guillermo Montenegro envió al Concejo Deliberante el presupuesto municipal 2024 que establece una suba del 120% en la Tasa del Servicio Urbano, aunque con la posibilidad de actualizarla por inflación. Al margen de los detalles de la iniciativa que se desmenuza en otros artículos publicados en este mismo medio, en el presupuesto aparece algo ciertamente novedoso como lo es la Tasa de Mantenimiento de la Red Vial Urbana Municipal que pagarán marplatenses, batanenses y turistas cada vez que carguen combustibles.
“No hay plata”, dice insistentemente el presidente Javier Milei -ya algunos “libertarios” lucen remeras con esa leyenda- y de ello rápidamente tomaron nota gobernadores e intendentes de todo el país. La llegada de fondos frescos, en este caso al municipio de General Pueyrredon, provenientes de la Provincia o de la Nación, se convertirá en un hecho excepcional, por lo que se analizaron distintas iniciativas y a la vez se decidió implementar medidas que ya están en vigencia, o se pondrán en práctica en otras ciudades, en el contexto de esta crisis económica. Así nace esta nueva tasa para mantenimiento de la red urbana municipal con el objetivo de “mejorar el esquema de financiamiento y cobertura del costo de los servicios que hacen al mantenimiento y conservación de la red vial urbana en General Pueyrredon”.
Dicho de otra manera más sencilla, se buscó un mecanismo que permita recaudar dinero para destinar a la reparación de calles. Los economistas de la comuna eliminaron uno de los componentes de la Tasa de Servicios Urbanos (TSU) que fue reemplazado por la nueva tasa, que es un 3% sobre el valor de los combustibles (no se incluye el GNC), pero que en cuanto al impacto en el bolsillo será del 1,86%. “La nafta tiene un 38% de impuestos, por lo que no se cobra sobre eso. En consecuencia, ese gravamen se percibe sobre el resto, con lo que constituye el 1,86% del valor final del litro de nafta”, detalló una de las fuentes municipales. Y se añadió, a la hora de defender la iniciativa, que se trata de una situación “más equitativa, ya que la van a pagar quienes usen el servicio específicamente, ya sean marplatenses o turistas. Para ser claros -enfatizó-, quienes caminan, andan en bicicleta o usan el colectivo o no carguen nafta no pagarán esa tasa”.
“Sin fondos de Nación o Provincia será imposible arreglar las calles, asfaltar, reparar o engranzar”, explican los funcionarios tras los anuncios del Presidente de cortar la obra pública para que sea financiada por privados y de revisar los fondos coparticipables, lo cual impactará en los proyectos de las provincias y los municipios. Sabido es también que el estado de las calles de Mar del Plata mucho deja que desear. Con la venta de chatarra y elementos de rezago para obtener fondos -lo reconoció el intendente en su reciente discurso de asunción ante el Concejo Deliberante- “compramos una nueva planta de asfalto que triplica la capacidad de producción y mejora ampliamente los tiempos de ejecución de una manera más económica”. Ahora, según estiman en la comuna, con esa tasa que surge del combustible, se prevé una recaudación de 4.000 millones de pesos, que se convertirán en 8.000 millones si se tiene en cuenta la proyección inflacionaria.
Con esta forma “directa” de recaudación de 1,86% sobre el valor de los combustibles -cuando alguien llene el tanque de un auto mediano con nafta súper abonará una suma cercana a los 30 mil pesos, 558 de los cuales irán para el arreglo de las calles o, si se quiere, 12 pesos por cada litro de nafta súper de YPF que hoy cotiza a 649 pesos o 14 pesos por litro de premium YPF que se expende a 776 pesos-, la Municipalidad obtiene el 100% de cobrabilidad. En cambio, con el porcentaje que estaba incluido en la TSU era sensiblemente inferior ya que solo la abonaban el 62% de los contribuyentes. ¿Qué se puede hacer con 4.000 millones de pesos en materia de red vial? Según un especialista, una cuadra de una nueva calle hoy tiene un costo de aproximadamente 20 millones de pesos, contemplando cordón cuneta, preparación y carpeta asfáltica.
“Con los 4.000 millones se podrían hacer 200 cuadras nuevas, pero hay que tener en cuenta que no todo irá para ese fin, ya que las cuadras nuevas se hacen usualmente por contribución por mejoras. Esta plata va a ser muy útil para repavimentación y bacheo”, reconoció un funcionario municipal defensor de esta nueva tasa que ya se replica en Avellaneda, Rosario, Pinamar, Ituzaingó, Merlo, Moreno, Malvinas Argentinas, Vicente López, José C. Paz y Tigre, entre otras ciudades. “Con este panorama económico, en meses no va a haber intendencia en la Argentina que no aplique esta tasa”, vaticinó.
Tras una primera lectura del expediente, el bloque de concejales de Unión por la Patria (UxP) puso en duda que la Tasa de Mantenimiento de la Red Vial Urbana Municipal propuesta por el Gobierno municipal en el presupuesto 2024 se vaya a utilizar para el mantenimiento de las calles. “Lo único que le faltaba a la gente es que Montenegro le cobre una tasa nueva”, cuestionó Virginia Sívori. A su vez, consideró que “lo lógico sería que esos fondos se garanticen verdaderamente para lo que están diciendo”, pero “el intendente le quiere cobrar a la gente una tasa nueva para pagar discrecionalmente los gastos del municipio”. En ese sentido, apuntó: “Si de verdad quisieran arreglar las calles, esos fondos tendrían ese destino; sin embargo, no dice eso el proyecto que presentaron”. Sívori expresó que “en la desesperación por querer recaudar, han presentado un borrador que carece de consistencia”. Además, sostuvo que en momentos de tanta incertidumbre preocupa “que el intendente esté improvisando y que los afectados sean una vez más” los vecinos. “Bajo un discurso de austeridad, Montenegro aprovecha el caos y quiere recaudar para su comodidad. En el último tiempo los funcionarios municipales hablaron de ser creativos para buscar nuevas formas de financiamiento. Sinceramente, no veo creatividad en esta medida”, agregó.
A la hora de analizarse el presupuesto, se puede establecer que presenta un importante ajuste en lo que tiene que ver con la realización de obras, destinándose solo 100 millones de pesos más que hace un año. El próximo presupuesto -deberá ser aprobado por el Concejo Deliberante, donde el oficialismo cuenta con mayoría propia- contempla una suma de 6.491 millones de pesos para obras, aunque en el listado se incluyen algunas obras públicas nacionales, al tiempo que no hay partidas destinadas para la continuidad de la anunciada y oportunamente promocionada red de ciclovías. Se estableció que habrá 41 millones de pesos para trabajos varios en jardines de infantes, escuelas y centros de salud municipales, 53 millones para trabajos en edificios municipales, 551 millones para polideportivos barriales, 562 millones para el proyecto integral de hábitat y vivienda Villa Evita, 820 millones para desagües pluviales de la cuenca Marcos Sastre 2ª etapa, 170 millones para el Paseo Costero Norte, 1.257 millones para el CEMA Batán, 232 millones para el nuevo CAPS Belisario Roldán, 241 millones para mejoramiento del espacio público y otros 247 millones para la renovación integral del frente costero, entre los trabajos más importantes.
Pese a la reducción de la planta política, la eliminación de secretarías y subsecretarías, las fusiones de dependencias y la reducción o donación de un porcentaje de los salarios de los funcionarios de la comuna, sigue siendo altísimo el porcentaje destinado al pago de sueldos. El presupuesto contempla 121 mil millones de pesos en gasto de personal, un 176% más que el del presente año. Surge entonces del documento elevado al Concejo Deliberante que el 61 por ciento del presupuesto de casi 200 mil millones de pesos se destina al pago de salarios, aportes y cargas sociales de los trabajadores municipales. Si se quiere, seis de cada diez pesos de los contribuyentes se destinan a la masa salarial de los trabajadores municipales. “Se ha priorizado la asignación de recursos para orientar la gestión del municipio a la prestación de servicios, así como a recuperar la capacidad del municipio de realizar trabajos públicos con financiación de recursos ordinarios”, señalan desde el Ejecutivo.
Mar del Plata celebrará el próximo 10 de febrero el 150º aniversario de su fundación. Así como desde el municipio se trabaja en la organización de distintos acontecimientos para tal festejo, desde el sector privado ya hubo sondeos de representantes de empresas con funcionarios del Emtur para la realización de programas que puedan atraer a marplatenses y turistas. La realización de un espectáculo con drones, recitales, festivales musicales y gastronómicos y presentaciones de afamados DJ figuran en la agenda de los privados para este 10 de febrero. En tanto, de la lectura del presupuesto municipal, surge que la Secretaría de Desarrollo Local, Inversiones e Integración propondrá la realización de un concurso de guiones para series y largometrajes que tengan como eje principal visibilizar las diferentes identidades productivas de General Pueyrredon. La idea es incentivar la autoría en historias con identidad local como una comedia romántica en un viñedo o la historia de una comunidad surfer en Chapadmalal. “Está comprobada -se apunta- la influencia de la cinematografía en la posterior elección de productos o destinos turísticos”.
Se indicó al respecto que las identidades productivas posibles van desde viñedos, olivos, cultivos como el kiwi, hasta destilerías, cervecerías, gastronomía, hotelería, tecnología, deportes acuáticos, “industrias de enorme potencial para ser atravesadas por el storytelling, un intangible de enorme valor”, poniendo como ejemplos películas como “Entre copas”, “Break point”, “De Roma con amor”, “En la Toscana”, “Historias de Nueva York” y “Vicky, Cristina, Barcelona”. Por última se hace hincapié en que con esta acción se pretende “agregar valor a través del audiovisual a otros sectores productivos, usar el storytelling como herramienta de publicidad y promoción, utilizar la instancia para amortiguar las deficiencias que estamos detectando en la educación formal y alimentar el programa de Fomento MarplaLAB con proyectos autorales más y mejor elaborados con alguna sociedad de autores como Argentores”.
Con la mirada puesta en lo inmediato en la próxima temporada estival, pero más aún en las consecuencias directas e indirectas en distintos sectores y estamentos productivos y comerciales de la ciudad, tanto desde la comuna como desde sectores gremiales, empresariales y financieros de la ciudad siguen con especial atención los anuncios de las nuevas medidas dispuestas por el Gobierno nacional. Mientras se aguardan pronunciamientos en las próximas horas de aquellos sectores que se sentirán afectados por las iniciativas gubernamentales, en una avanzada el senador nacional Maximiliano Abad solicitó al Gobierno nacional que se desestime cualquier suba de retenciones al sector pesquero hasta tanto el secretario de Bioeconomía, Fernando Villela, se reúna con los distintos sectores de industrialización del recurso ictícola. “La propuesta del Gobierno nacional -sostuvo el legislador marplatense- plantea una alícuota igual para todo el sector pesquero sin analizar en detalle su impacto”.
A propósito, la consultora Circuitos realizó una encuesta para indagar en la opinión pública sobre las primeras medidas económicas tomadas por el gobierno de Javier Milei. Los encuestados, incluso una parte del núcleo duro que lo apoya, considera que estas medidas afectan mayoritariamente a los trabajadores, por más que el relato libertario insista en que el ajuste lo pagará la “casta política”. En general, el 61,5% de los encuestados dijo que cree que los principales afectados por las medidas económicas son los trabajadores. Solo el 14,4% respondió “la casta política”. Además, casi el 60% considera que estas medidas tendrán un “impacto alto” en su economía personal o familiar. Asimismo, la consultora realizó una segmentación de los encuestados, ubicando a un núcleo duro, otro blando y otro opositor. En cuanto al núcleo duro, se trata de sus votantes de primera vuelta, un segmento del voto a Patricia Bullrich y a Juan Schiaretti. Tienen una imagen muy positiva del presidente Javier Milei, apoyan sus medidas de gobierno en estos primeros días, creen que los principales perjudicados son la casta y los beneficiarios son los trabajadores. Asimismo, consideran que el impacto de las medidas sobre su economía personal y familiar es moderado, y su estado de ánimo es de optimismo y esperanza.
Diferente es el panorama cuando se aborda al núcleo blando, votantes de Patricia Bullrich y en menor medida de Sergio Massa. Tienen una imagen regular y aún indeterminada del presidente Javier Milei, no están de acuerdo con sus medidas implementadas en esta primera etapa aunque no saben quiénes son los beneficiarios de estas políticas y consideran que los trabajadores son los perjudicados. Creen que el impacto sobre su economía personal y familiar es entre alto y moderado, y los caracteriza un ánimo de preocupación, incertidumbre y esperanza. En cuanto al núcleo opositor, constituido en su mayoría por los votantes de Sergio Massa, se determinó que tienen una imagen negativa del Presidente, no acuerdan con sus medidas de gobierno, creen que benefician a los grandes empresarios y perjudican a los trabajadores. Además, sostienen que el impacto sobre su economía personal y familiar es alto y su estado de ánimo es pesimista y de preocupación e incertidumbre. Con respecto a esta segmentación, también hay un dato importante: dentro del núcleo duro, la mayoría (92%) manifestó estar de acuerdo con el paquete de medidas de Milei. Un 4,4% no está de acuerdo, mientras que 3,6% aún no sabe. Pero, siguiendo dentro de este núcleo duro, también la mayoría (35,7%) cree que los principales afectados por las medidas económicas de Milei son los trabajadores. En menor medida, un 33,3% considera que es “la casta política”.
En el núcleo blando, en cambio, la diferencia es mucho mayor: 68,1% respondió que los más afectados son los trabajadores; mientras que el 9,2% considera que son los pequeños empresarios y comerciantes. En este sector, la minoría (solo 1,8%) cree que es la casta la más afectada. Asimismo, dentro de este sector, el 41,6% no está de acuerdo con las medidas, mientras que el 20,9% sí está de acuerdo. Como era de esperar, en el núcleo opositor, el 92,9% no está de acuerdo, y solo el 1,2% dijo estar de acuerdo (5,9% aún no sabe). Además, el 85% considera que los trabajadores son los principales afectados. La ecuación se mantiene similar en lo que respecta a cómo impactarán estas medidas en la economía personal o familiar. En el núcleo duro, la mayoría (59,5%) considera que tendrán un impacto moderado; mientras que el 23,9% refiere un alto impacto. En el núcleo blando, la mayoría (68,1%) considera que tendrá alto impacto en su economía personal o familiar, mientras que el 22,7% cree que tendrá un impacto moderado. En el núcleo opositor, directamente el 92,5% considera que las medidas de Milei-Caputo tendrán alto impacto en sus economías personales o familiares.
Por otra parte, se conoció este fin de semana un trabajo de la consultora Zuban Córdoba, en el cual se resalta que “las imágenes de los principales dirigentes del oficialismo están hoy polarizadas con predominio de lo negativo. El propio presidente Milei tiene poco menos de 50% de imagen positiva y 50% negativa. El ministro de Economía no es muy popular, aunque eso no es novedad ni determinante de éxito o fracaso. Hay solo dos excepciones y quizás por motivos diferentes. Patricia Bullrich, ministra de Seguridad, mantiene su protagonismo y mejora en términos relativos. El otro dirigente, es el exgobernador de Córdoba Juan Schiaretti, quien mejora de modo importante tanto su conocimiento nacional como su imagen positiva en general. ¿Este dato es importante? Lo sabremos más adelante. En la oposición, están peor”, se consigna.
“El contexto -se detalla- tiene jerarquía en el análisis político y por eso consultamos sobre la responsabilidad en la brutal escalada de precios de los últimos días. La mala performance del gobierno saliente se lleva casi un 50% de las respuestas mientras que solo uno de cada tres responsabiliza a la actual administración. Las ideas de que “Milei recibe la peor herencia de la historia”, “no hay solución alternativa al ajuste”, “hay luz al final del túnel”, todas frases pronunciadas por el presidente, han logrado una aceptación alta, aunque las opiniones siguen mostrando una gran polarización. Por eso, la trama del traspaso de poder muestra una situación muy compleja para el oficialismo. Si bien en la mayoría de los ítems registrados y evaluados tiene una ventaja, no parece determinante; consensos precarios le dicen. ¿Por qué? Las expectativas negativas lo explican: el dato es que un 75% cree que este ajuste lo va a pagar la gente, contra solo un 45% que sostiene que lo va a pagar la política. Solo un 48% confía en el gobierno de Javier Milei mientras que un 50% desconfía. Misma proporción, pero levemente a favor, es el optimismo, que llega al 51% versus el 47% de pesimismo”.
En cuanto a las medidas, aclarándose que “esta parte puede quedar desactualizada en minutos”, se apunta a que los apoyos se encuentran en “privatizar televisión pública y radio nacional”, “eliminar la pauta a medios de comunicación por un año”, “reformar el sistema laboral”, “aumentar AUH”, “reducción de ministerios” y “despido de empleados estatales”. Las resistencias altas están en “suspender la obra pública”, “tomar nuevos préstamos”, “bajar sueldos y jubilaciones”, y “aumentar servicios públicos y el transporte”. La sorpresa: “derogar la IVE” tiene más del 50% de rechazo. “Y acá -se enfatiza- se explica mejor aún el concepto de consensos precarios: “si Milei aumenta luz, gas y transporte”, el 47% lo seguiría apoyando; “si congela los sueldos en contexto de hiperinflación”, el 39%; y “si privatiza la salud pública”, el 33%. Relevamos esos tres ejes de políticas públicas en contexto de ajuste, que no parecen tener el mismo efecto e impacto en la potencialidad de apoyo político a Milei desde la sociedad argentina”.
Por último, se indica que “un 80% de los entrevistados cree que las políticas de ajuste que está proponiendo Milei van a afectar a ellos y a sus familias. Parece, en una primera lectura, un porcentaje muy transversal y abarcador de la sociedad argentina. También, un límite que debiera ser leído adecuadamente por los que toman las decisiones políticas y económicas en el Gobierno. ¿Votamos un cheque en blanco para el ajuste? ¿O votamos finalizar y castigar al peronismo de Alberto Fernández, Cristina Kirchner y Sergio Massa?”, se apunta finalmente en el informe de Zuban Córdoba.