Un 62,8% de los ocupados marplatenses trabajan en relación de dependencia y es el índice más bajo del país. Los subocupados también marcan porcentajes récord.
En Mar del Plata, el porcentaje de ocupados que trabaja en relación de dependencia alcanza su mínimo histórico de 62,8% (182.000 personas) y representa el valor más bajo de los 31 aglomerados urbanos que reveló la Encuesta Permanente de Hogares del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
El dato fue destacado por los investigadores de la Universidad Nacional de Mar del Plata, Eugenio Actis Di Pasquale y Marcos Esteban Gallo, en el último Informe Sociolaboral de General Pueyrredon, en el que se analizaron los datos del tercer trimestre de 2019, publicados por el organismo nacional y que colocaron a la ciudad en el séptimo lugar del ranking de desempleo nacional con el 10,2% (33.000 personas).
En el trabajo, los profesionales advirtieron, entre otras cosas, que durante el periodo relevado, en Mar del Plata, “se produjo una caída significativa de 1,7 puntos porcentuales en la proporción de asalariados dentro del total de ocupados, respecto el tercer trimestre de 2018”. “Un valor que ya era sumamente bajo y que, ahora, llega a un mínimo histórico de 62,8% (182.000 personas)”, indicaron.
Además de destacar que el porcentaje es el más bajo del país (sigue Santa Rosa, La Pampa, con 64,6%), Di Pasquale y Gallo aclararon que “si se compara esta situación con la que había en 2017, cuando la proporción era del 69,1%, se encuentra que también había 182.000 asalariados”. “La diferencia -aclararon- es que en 2019 creció el número de trabajadores por cuenta propia dentro del total de ocupados, que es lo mismo que explica el crecimiento de la Población Económicamente Activa en los últimos años”.
Este panorama (nuevos cuentapropistas en el mercado laboral) es también el que explica la reducción de la tasa de desocupación en la comparación interanual (pasó del 11,8% al 10,2%), según señalaron los investigadores, quienes también aseguraron que “continúa el efecto del ‘trabajador adicional’ que se inició entre fines de 2016 y principios de 2017”.
El efecto Trabajador Adicional es el fenómeno que la literatura económica utiliza para explicar la situación que se da cuando, ante la pérdida del empleo del jefe de hogar y/o ante la caída del salario real, otros integrantes del hogar se ven obligados a salir a buscar trabajo para intentar cubrir o complementar el ingreso familiar. En Mar del Plata, al igual que en otros territorios, son las mujeres, sobre todo en las edad centrales ( 30 a 64 años), las que explican en mayor proporción el aumento en la participación laboral.
Calidad de ocupación
En el informe, los investigadores también destacaron que si bien se registró una baja de la desocupación por un incremento superior de la tasa de empleo por sobre la suba dada en la tasa de actividad (una suba de 2,5 puntos porcentuales contra una de 2), “este aumento del empleo no significa necesariamente que se hayan creado puestos de trabajo genuinos”.
Para evaluar la calidad de la ocupación, los investigadores analizaron la tasa local de subocupación, que representa la cantidad de ocupados que trabajan menos de 35 horas semanales por causas involuntarias, advirtiendo así un índice que alcanzó un valor “récord”.
“A nivel nacional, este indicador se incrementó en 1 punto porcentual llegando al 12,8%, el valor más alto para un primer trimestre desde el año 2005. A nivel local, en tanto, alcanzó un valor de 16,9% muy similar al de un año atrás y que representa un récord histórico para la serie de datos que comienza en el tercer trimestre de 2003″, señalaron.
Para Di Pasquale y Gallo, “esto es una evidencia de que la recesión iniciada a mediados de 2018 aún continúa afectando a la población trabajadora. En valor absoluto son 55.000 personas en esta situación, y ubica a Mar del Plata en el quinto lugar del ranking nacional”. “Asimismo, la elevada proporción de asalariados no registrados (37,2%) da cuenta de la gravedad por la que atraviesa el escenario laboral actual”, agregaron.