La botadura se realizó en un marco de reflexión y celebración en el astillero, donde además se inauguraron nuevas instalaciones. El buque será para la firma armadora Piscal SRL. El intendente Montenegro destacó la capacidad de generar empleo de la industria.
El pesquero “Nuevo Quequén” se convirtió esta mañana en el buque N°132 en ser botado ante gran cantidad de público en el Astillero Naval Federico Contessi, marco oportuno para inaugurar además un nuevo espacio dentro de las instalaciones de la histórica firma.
Se trata de un nuevo buque de 20,9 metros de eslora, 7 de manga y 3,18 metros de puntal construido a lo largo del 2019 para reemplazar al “Quequén Salado” -de 54 años de vida-, a pedido del armador Roberto Valle y su familia, y que tendrá a Leonela Soledad Valle como madrina.
La botadura se llevó a cabo este sábado por la mañana en un clima de absoluta celebración pero también de reflexión sobre la situación de la pesca, el empleo y la industria naval.
Entre las autoridades presentes se encontraron el intendente Guillermo Montenegro y su familia, el obispo diocesano Monseñor Gabriel Mestre, el presidente del Consorcio Portuario, Martín Merlini, el presidente del Ente Municipal de Turismo (Emtur), Jorge Zaniel, el diputado Juan Aicega, los concejales Cristina Coria y Roberto Gandolfi, representantes de la Armada Argentina, la Prefectura Naval, la Universidad Tecnológica Nacional, la Universidad Nacional de Mar del Plata, la Unión del Comercio la Industria y la Producción (UCIP) gremios, cámaras empresarias del sector pesquero, la princesa de los pescadores Camila Mústico y por supuesto el experimentado Federico Contessi junto a su familia, entre otros.
Domingo Contessi leyó el mensaje en representación del directorio del Astillero. Sus primeras palabras fueron de agradecimiento a todo el gran equipo de trabajo y a la familia Valle, por encomendar la construcción de esta nueva embarcación que ya se encuentra en el mar, dentro del Puerto de Mar del Plata.
“Entregamos este pequeño gran barco para una familia emprendedora como es la de Roberto Valle y sus hijos”, expresó Domingo Contessi y señaló: “Nos sentimos cómodos con este tipo de proyectos pero también nos gusta cuando el cliente nos pide requerimientos especiales para el barco. Salir de la zona de confort es indispensable para crecer y evolucionar”.
Seguido, dijo sentirse “lleno de alegría” al poder “darle continuidad al sueño de Federico (Contessi), que sigue más vivo que nunca”. Luego, el obispo Gabriel Mestre realizó una pequeña ceremonia para bendecir al “Nuevo Quequén”, a su capitán, Jorge Luis Gatica, y a todas las familias que acompañaron la botadura. Hizo extensiva la bendición a las nuevas instalaciones del astillero inauguradas antes de la botadura, con el objetivo de ampliar la capacidad operativa de la empresa.
Por su parte, el intendente Guillermo Montenegro, quien contó que llevó especialmente a sus “mellis” para ver el momento culmine del encuentro, es decir, cuando el buque se adentra en el mar un marco tan festivo como tradicional del Puerto, dirigió una breves palabras de espaldas al nuevo pesquero.
“Las botaduras son momentos de profunda emoción, es muy movilizante”, dijo y deseó a la familia Contessi “que sigan haciendo lo que arrancaron hace muchos años, que cada vez lo hagan mejor, que sigan apostado, creciendo y generando empleo”.
“Es un orgullo para todos los marplatenses que esto se pueda hacer”, agregó el intendente, destacó la capacidad de la industria para crear puestos de trabajo y por último sostuvo: “Con el laburo es la única forma que se crece. Y nosotros desde el Estado estamos para tratar de generar las mejores herramientas para que ustedes puedan hacer mejor las cosas”.
Poner el hombro
Parte del discurso de la familia Contessi en la botadura del buque N°132 del emblemático astillero se centró en la nueva etapa política de la Argentina a partir del cambio de gobierno.
De acuerdo con el titular del directorio de la empresa, Domingo Contessi, “poner en marcha a la producción nacional es el máximo desafío del nuevo gobierno” de Alberto Fernández y en ese sentido afirmó que el astillero, su directorio y el personal “está listo para poner el hombro y hacer su aporte”.
En el mismo sentido, mencionó que “atrás queda un gobierno con luces y sombras” y destacó que “el desafío que tenemos es no reiterar los errores del pasado pero tampoco desechar todo lo hecho, sino retomar las políticas bien encaminadas”.
Por último, Contessi subrayó la capacidad de generar empleo de la industria naval, insistió en la necesidad de “superar la actual coyuntura” para reactivar la producción y dijo “confiar en nuestras capacidades en la fuerza transformadora del trabajo para salir adelante”.