Tercera derrota al hilo para el "xeneize", que venía de perder los clásicos ante Racing y River. San Lorenzo ganó con un doblete de Muniain.
Belgrano aprovechó la crisis futbolística de Boca Juniors y le ganó 2 a 0 en Córdoba en partido correspondiente a la decimosexta fecha de la Liga Profesional que marcaría el final del ciclo de Diego Martínez al frente del “xeneize”.
Fue la tercera derrota al hilo para un Boca que venía de perder los clásicos ante Racing y River, que quedó eliminado en la Copa Sudamericana y que está lejísimos del líder Vélez en la Liga Profesional.
En los primeros 45′ Boca no pateó el arco. Con poco Belgrano fue un poco más y estuvo más cerca de romper el cero. Pero Jara y Nicolás Fernández no tuvieron puntería y el tedioso primer tiempo se fue al descanso sin goles.
Boca afrontó el complemento con otra actitud. Pero el local también creció en el juego, llegó con mayor frecuencia al arco defendido por Brey y terminó inclinando la balanza.
Al minuto, Rafael Delgado se proyectó por izquierda y tiró un centro que se fue cerrando y dio en el travesaño ante un Brey que se había confiado.
La visita tuvo un pasaje favorable que exigió dos muy buenas respuestas de Juan Espínola ante los remates de Exequiel Zeballos (a los 4′, tras la mejor maniobra colectiva boquense en la noche) y Edinson Cavani (7′).
Sin embargo, a los 9′, Nicolás Fernández recibió con espacios de contragolpe, buscó el arco y la pelota dio en la mano de Nicolás Figal en su trayectoria. El ábitro cobró penal a instancias del VAR y a los 14′ Jara lo canjeó por gol aprovechando el rebote tras la atajada de Brey en el remate inicial desde los doce pasos.
Boca sintió el impacto. Y la pasó mal. A los 19′, en una misma jugada, Jara y Compagnucci estrellaron sus respectivos remates en los palos.
Hasta que a los 23′ “Uvita” Fernández sentenció la historia al capitalizar un despeje corto en una pelota parada y meter un derechazo violento que dejó sin respuestas a Brey.
La tibia reacción que ensayó Boca no pareció preocupar a Belgrano, que terminó agrandado y cerca de aumentar su ventaja.
El pitazo final desató la alegría de Belgrano y dejó a Diego Martínez con las horas contadas al frente del plantel “xeneize”.