Lo decidieron luego de reunirse en un natatorio. No cumplirán con la medida que comienza a regir hoy ante el avance de casos de coronavirus.
BALCARCE (Corresponsal).- Representantes de diferentes rubros del comercio, la actividad gastronómica y centros de actividad física no respetarán las condiciones de cierre que impone haber pasado a Fase 3.
Así lo decidieron durante una reunión desarrollada este martes ante la inminente puesta en marcha de las restricciones que dio a conocer el municipio, atento a la decisión de Provincia que fuera comunicada al intendente por el jefe de Gabinete, Carlos Bianco.
Si bien a partir de hoy deberían cerrar las puertas de sus locales atentos a que la Provincia hizo retroceder de fase a la ciudad anunciaron que no la cumplirán, ya que entienden que los contagios no se producen en sus locales comerciales sino en otros ámbitos.
Se trata de los comerciantes que fueron habilitados en el último turno para reabrir sus puertas después de que comenzara la pandemia a mediados de marzo y que en más de una oportunidad habían dicho que su situación económica era desesperante.
Un natatorio fue el epicentro de la reunión que congregó a una veintena de representantes de diferentes rubros e inclusive un pastor evangélico se hizo presente atento que también las reuniones de culto fueron suspendidas.
“Creemos que es una decisión desacertada porque en los lugares donde nosotros trabajamos no creemos que sean focos de contagios. Le pedimos a la gente que nos entienda. Tenemos familia y necesitamos trabajar”, expresaron una vez concluido el encuentro.
También consideraron oportuno apuntar que “en este tiempo nos pusimos al día con un montón de deudas y encontrarnos con esto cuando hacemos las cosas bien con todos los compromisos que tomamos es tristísimo. Si van a clausurar un local el resto de los comerciantes lo vamos a ir apoyar para que eso no suceda”.
Es que se agruparon a través del Whastapp y desde allí toman decisiones en conjunto.
Postura
El presidente de la Cámara de Comercio e Industria local, Andrés Lombardini, pidió que se equilibren las medidas para que no se perjudique al comercio y la industria local ante una situación económica difícil.
En ese ámbito, también se desarrollaron reuniones, donde los asociados solicitaron que se busquen alternativas.
“Entendemos lo complejo de la situación sanitaria, a ninguno de nosotros eso nos deja de preocupar. Sentimos que es una cuestión prioritaria. Pero también creemos que el sector que nosotros representamos no puede contraer la actividad porque para muchos, cerrar durante dos semanas, significa no poder volver a levantar la persiana”, analizó el dirigente.
Lombardini pidió además “no repartir culpas” y dijo que “lo central será analizar todos los medios con los que contamos para encontrar un equilibrio y que nadie salga perjudicado”.