La concejal de Acción Marplatense criticó en duros términos al Gobierno municipal.
La concejal Eva Ayala, de Acción Marplatense lanzó este jueves duras críticas al Gobierno municipal por la forma en que presentó el presupuesto y el fracaso de la audiencia pública, que debió suspenderse por falta de oradores.
Ayala aseguró que el intendente Guillermo Montenegro “bloqueó la discusión porque no tiene nada para mostrar”. “Esta es la política presupuestaria de Montenegro: mentir una vez al año y después tirarla afuera, marear la perdiz y repartir excusas”, señaló.
La concejal remarcó que la participación de ayer del secretario de Hacienda, Mauro Martinelli, en el Concejo Deliberante, “fue lamentable”. “Nunca se vio que los funcionarios corten y peguen el mensaje de elevación del presupuesto. Repiten hasta las frases año a año. Pero más insólito aún es que reúnan a los concejales para leerles el corte y pegue. Convierte el debate presupuestario en un ritual vacío y descarado. En la misma línea de vaciamiento de todo análisis y de participación vaciaron la audiencia pública del día de hoy. Es histórico: no fue nadie por primera vez desde que se hace”.
Ayala apuntó: “Ayer manejaron la estrategia del aburrimiento y, sobre todo, de eludir preguntas sin brindar información. Por primera vez en la historia democrática. Esconden los datos del presupuesto ejecutado y las partidas de todas las áreas de gobierno”. Y agregó “Prometen seguridad pero no podemos saber cuánto invierten. Prometen modernizar el Estado pero no se conoce la aplicación de recursos. Abrir la biblioteca Marechal ni siquiera lo prometen, pero tampoco sabemos si gastaron un peso en intentarlo. No hay medicamentos en los centros de salud, el servicio de emergencias médicas está en emergencia, los barrios abandonados, las calles rotas y las luces apagadas”.
En ese mismo sentido, Ayala subrayó que “Montenegro hizo de la excusa y el escapismo su identidad de gestión”. En esa línea, concluyó: “Todos los años el intendente repite un listado de obras que después no hace. Milei no financia obras públicas y Montenegro no las gestiona: un cóctel para el atraso”.