La propuesta para las estructuras gastronómicas fue aprobada por la Comisión de Obras y se adelantó que podría ser votada en la próxima sesión del Concejo Deliberante. Se permitiría su coexistencia con sillas y mesas en las veredas.
El nuevo proyecto para el programa “Comemos Afuera”, el cual surgió durante la pandemia e impulsó la instalación de decks gastronómicos en distintas calles de Mar del Plata, fue aprobado este martes en la Comisión de Obras y se adelantó que existe la posibilidad de que se realice una jornada conjunta de las comisiones de Hacienda y Legislación para que la propuesta pueda ser votada en la próxima sesión del Concejo Deliberante.
La propuesta final respecto a las estructuras gastronómicas incorporó informes del ejecutivo, concejalías e instituciones y entre las principales novedades que contiene se destaca que los decks podrán contar con publicidad, ser techados y cerrados lateralmente, como así también los comercios propietarios podrán colocar sillas y mesas en las veredas, siempre y cuando se deje “espacio suficiente para la circulación peatonal”.
En este sentido, se adelantó que “los decks y los mobiliarios que se instalen sobre calzadas, estarán sujetos al pago de tributos que correspondan conforme las previsiones de las ordenanzas fiscal e impositiva del ejercicio 2023 en adelante”.
Asimismo, se precisa que los gastronómicos que cuentan con los permisos precarios y autorizados tendrán hasta el 30 de abril para adecuar sus instalaciones a la nueva ordenanza.
Tras detallar cómo deberán ser y que materiales podrán emplearse para estas estructuras gastronómicas, el proyecto impulsado por el oficialismo local indica que los elementos publicitarios propuestos para los decks “deben ser aprobados por la autoridad de aplicación” y que “en ningún caso deben interferir con la visibilidad y generar polución visual”.
En otro apartado, el documento señala que los “decks podrán techarse para lograr optimizar su uso en condiciones climáticas desfavorables”.
“El techado de las estructuras debe ser autorizado por la Comisión Asesora y de Revisión y se buscará el buen diseño, la menor interferencia visual en el espacio público, la seguridad vial y la armonía con los locales contiguos”, afirma y detalla que las estructuras se podrán techar con “toldos a dos aguas o a un agua con pendiente a la calle, estructura con parante central o estructura con parantes en perímetro”.
Respecto a los cerramientos laterales, se contempla que se podrá efectuar un perímetro en vidrio laminado o blindex transparente con la sujeción adecuada, sin superar la altura de un metro y ochenta centímetros, permitiendo la “perfecta visibilidad del interior del deck y sus ocupantes”.
“El cerramiento será de tres caras debiendo permanecer abierto el lado que da a la acera. La base del cerramiento no podrá exceder los 30 centímetros. No se permiten cerramientos opacos o vinilos autoadhesivos sobre las superficies vidriadas”, detallan.
Además, el proyecto indica que “la coexistencia de decks con mesas y sillas en la acera está permitida”, aunque se aclara que “por cuestiones de accesibilidad se debe dejar espacio suficiente para la circulación peatonal”.
En lo relacionado a la climatización de las áreas de espacio público intervenidas, se señala que “está permitida la colocación de estufas exteriores de gas butano o propano y tubos de calefacción a gas en altura”, como así también “la colocación de estufas eléctricas halógenas”.
De esta forma, desde el municipio esperan poder contar con una nueva regulación para el sector gastronómico antes de la temporada de verano.
Cabe recordar que, a pesar de las críticas de los comerciantes no gastronómicos a los decks, el intendente Guillermo Montenegro defendió su implementación y sostuvo que son “algo bueno”, pero que “tiene que estar controlado”.
Montenegro indicó a su vez que tanto él, como el resto de los concejales de Juntos por el Cambio, entienden que los decks “tienen que ver con generación de laburo y con la posibilidad de que haya más marplatenses que puedan estar mejor”.