El objetivo es reinaugurar la sala para esta temporada. "Este es el lado B de las salas, el mantenimiento para quee pueda haber más obras" sostuvo el propietario del complejo, Carlos Rottemberg.
El teatro América recibirá la próxima temporada con un cielorraso totalmente reconstruido, en el marco de una obra integral que está requiriendo un importante despliegue de estructuras de metal y madera.
“Se está rehaciendo el cielorraso de punta a punta, con sus desagües a la calle, para inaugurarlo para este verano. Necesitaba este cambio y tiene que ver con la apuesta de siempre, como dice nuestro eslogan: ‘construir teatros es nuestra obra, para más obras de teatro’. En este caso sería mantener los teatros es nuestra obra para más obras de teatro” compartió Carlos Rottemberg.
El América es la “sala de arriba” del complejo que también alberga al Teatro Atlas, en Luro y Corrientes, donde antiguamente funcionaba el Cine Nogaró, que sufrió un incendio en enero de 1968.
“Cuando nos sentamos en una sala no pensamos en los años que llevan construidas, cómo se mantienen, cuál es el costo de todos estos monstruitos. Esta es la parte que no se ve, el lado B de la actividad teatral, que es bastante distinta a sentarse a una butaca para ver un espectáculo terminado. Esto es lo que pasa cuando la gente no está en las salas” reflexionó el propietario del complejo.
El arquitecto Marcelo Martínez, responsable de la obra, especificó que la tarea se inició para resolver una filtración que venía de la cubierta. Al observar el sector, se decidió “reconstruirlo totalmente”.
“Se trataba de un viejo cielorraso de yeso armado, tradicional, y se está rehaciendo con la misma tecnología y respetando “toda la geometría del proyecto original, porque tiene una función acústica”.
Para el arquitecto, la particularidad de la obra no fue el yeso, sino que, “como la sala tiene el piso inclinado y el techo es muy alto, tuvimos que generar un trabajo de andamiaje entre medio de las butacas, para trabajar en la altura”. El desafío adicional, fue subir los materiales de los andamiajes, por las escaleras del edificio.
“La complejidad de la obra no es el trabajo en si, sino subir los materiales y el armado de los andamiajes, con el objetivo de terminarla antes de diciembre, porque se avecina la temporada, con lo importante que es para la ciudad” compartió el profesional, que está trabajando con un equipo de 7 personas: “carpinteros que van armando toda la estructura de madera y metal desplegado y yeseros que van proyectando y dándole forma y terminación al trabajo”.
“La sala va a quedar con una mejora sustancial” concluyó el arquitecto, director de la constructora Miconi.