Cuando llueve, el barrio Jardín se tranforma en un sitio impenetrable. Las calles se anegan y ni siquiera los servicios básicos pueden funcionar con normalidad.
En el barrio Jardín, ubicado al sur de la ciudad, las calles se han vuelto intransitables apenas cae una lluvia. Sin mantenimiento desde hace meses y dejadas a la suerte de los avatares climáticos, ese sector sufre una especie de aislamiento por la imposibilidad de tener buenos accesos.
Incluso los principales servicios corren riesgos de sostenerse y una muestra de ello fue lo sucedido hoy con un camión recolector de la basura que quedó encajado por horas hasta que pudo ser retirado.
El caso se produjo en la calle Einstein del mencionado barrio y los vecinos volvieron a manifestar su enojo por medio de la línea de whatsapp del diario LA CAPITAL.