El intendente comunicó que la medida "está en línea con la programación financiera acordada con la Provincia". Algunas dependencias dispondrán de un tercio del presupuesto con el que contaban para pagar tareas adicionales del personal. Desarrollo Social resultó el área menos perjudicada.
El intendente Carlos Arroyo dispuso implementar desde este mes un drástico recorte en el gasto en horas extras.
Para comunicar la medida el jefe comunal resolvió distribuir un memo entre los responsables de todas las dependencias afectadas, precisando cuáles será desde ahora los recursos de los que dispondrán para abonar los servicios adicionales del personal.
“En el caso de que las horas e importes comunicados por horas realizadas durante los próximos meses superen” los montos consignados para cada dependencia “se reducirán proporcionalmente los importes a liquidar a cada agente hasta la concurrencia del citado límite, bajo la exclusiva responsabilidad de quien las hubiera autorizado, sin que se reconozca importe alguno por tales diferencias”, se advierte en el texto distribuido en los últimos días entre los funcionarios.
Fuentes consultadas por LA CAPITAL, indicaron que el recorte provocará que algunas áreas comiencen a disponer de “un tercio” del presupuesto con el contaban, con excepción de Salud y Desarrollo Social.
De la lectura de la comunicación que lleva la firma del intendente se desprende que sumando los recursos autorizados para cada una de las secretarías y entes descentralizados, la comuna no podrá gastar en horas extras más de $7.610.000 por mes.
Fuentes del Sindicato de Trabajadores Municipales (STM) explicaron que el uso de horas extras “es una atribución del Ejecutivo” y que por lo tanto el gremio no puede oponerse a su recorte.
Sin embargo dejaron trascender su inquietud por el impacto que la medida podría tener en la prestación de algunos servicios que requieren de la presencia de personal en horarios nocturnos como por ejemplo los controles de Tránsito o de Inspección General.
En el memo, el intendente justificó el recorte asegurando que la comuna se encuentra en una “difícil situación económica y financiera” y planteó que la medida “está en línea con la programación financiera acordada con la Provincia de Buenos Aires”.
Según indicó, en este contexto “deberán arbitrarse todos los medios al alcance de cada secretario para adecuar el total de horas extras a realizarse en los próximos meses a los importes” otorgados para cada dependencia.
Entre las áreas que mayor cantidad de dinero dispondrán figura en primer lugar la Secretaría de Desarrollo Social, con una suma de $2,5 millones, para garantizar entre otras cosas, las tareas de quienes trabajan con personas en situación de calle o se desempeñan en hogares o en el área de minoridad.
El mes pasado Desarrollo Social fue una de las las áreas en las que mayor controversia hubo a causa del “excesivo” gasto en horas extras.
A mediados de mayo, la Secretaría que conduce Vilma Baragiola fue denunciada por haber otorgado significativas sumas de dinero a algunos agentes, provocando que uno de ellos percibiera más de 35 mil pesos por ese concepto, obteniendo así una remuneración total de más de 64 mil pesos.
Según trascendió, ese y otros casos generaron recelos y una fuerte controversia dentro del gabinete del intendente Arroyo, impulsando que luego de eso se resolviera profundizar el recorte.
Después de Desarrollo Social, el área con más recursos para pagar horas extras es Salud, con un total de 2,2 millones de pesos.
El tercer lugar lo ocupa la Secretaría de Gobierno (de la cual dependen Tránsito e Inspección) con un monto de 680 mil pesos y le siguen los entes de Servicios Urbanos, con 600 mil pesos y los de Vialidad y Alumbrado y Deportes, con 500 mil pesos cada uno.