"Ese tipo de acontecimientos deberíamos cortarlos hasta que dejen de drogarse", razonó. El intendente reivindicó su decreto para "no autorizarlas" y dijo que no habrá nuevos eventos hasta que el Concejo tome una decisión de fondo.
Una vez realizadas todas las fiestas electrónicas que estaban previstas para el mes de enero, el intendente Carlos Arroyo aseguró que no volverá a haber nuevos eventos de este tipo hasta que el Concejo Deliberante tome una decisión sobre qué hacer al respecto.
De este modo el jefe comunal expresó su voluntad de que finalmente comience a cumplirse el decreto por el cual hace más de 20 días, él mismo había resuelto “no autorizar la realización” de fiestas electrónicas en todo el Partido de General Pueyrredon. Si bien aseguró que llegado el caso será respetuoso de lo que decidan los concejales, en una conferencia de prensa que se prestó para la discusión entre funcionarios y periodistas, Arroyo dejó expuesto qué piensa en relación a esta clase de eventos.
“Ese tipo de acontecimientos deberíamos cortarlos hasta que dejen de drogarse o hasta que no vengan todos drogados a las fiestas”, sostuvo.
El intendente se definió de este modo al hacer un balance de la actuación del municipio en los controles y operativos desarrollados en enero en el marco del programa denominado “Mar del Plata Segura”.
En ese contexto el tema excluyente fue el de las fiestas electrónicas. Ante la prensa Arroyo reivindicó su decreto, al cual definió como una “antorcha”.
“Más allá de las criticas que recibí ese decreto sirvió para que todo el mundo se pusiera a prestar atención a esta problemática y ahí tenemos los resultados”, sostuvo.
En los hechos, luego de que la norma fuera publicada el pasado 10 de enero, lo que sucedió fue que igualmente se realizaron siete fiestas electrónicas en los balnearios del sur, con amplios controles municipales y policiales, los cuales fueron elogiados por el secretario de Salud, Gustavo Blanco.
“Pudimos armar sobre la marcha un hospital de campaña para salvarle la vida a la gente”, dijo. Además comentó que mediante esa tarea hasta se obtuvieron datos que servirán para hacer una “publicación científica de carácter nacional e internacional”.
Luego el funcionario anticipó lo que a su juicio, debería ocurrir de ahora en más. “No queremos prohibir sino regularlas”, comentó en relación a las fiestas electrónicas, indicando que trabajará junto a los concejales para elaborar una “ordenanza para el control y el cuidado” de la gente.
A su lado, segundos después, Arroyo agregó sus propias definiciones: “No va a haber más fiestas electrónicas hasta tanto no haya una decisión del Concejo. Siempre he dicho que soy profundamente republicano y respetuoso de la opinión de los legisladores, que pienso cumplir. Vamos a colaborar, a llevar nuestra experiencia pero se va a hacer lo que diga el Concejo”, indicó.
A renglón seguido, el intendente opinó que en el debate que se produzca sobre esa eventual norma deberían diferenciarse los acontecimientos masivos de las fiestas electrónicas en sí ya que advirtió que “por una razón psicológica o sociológica, de cambio de generación, de tiempo o de lo que sea, es como una incitación, por lo que hemos visto, al consumo de drogas y nosotros estamos directamente enfrentados con el consumo y el tráfico de drogas”.
Asimismo el jefe comunal resaltó los resultados del programa Mar del Plata Segura que fueron presentados ayer, asegurando que su implementación es un “ejemplo de cómo Cambiemos trabaja en equipo”.
En este sentido, Arroyo también reivindicó la presencia del Estado en los controles. La Municipalidad “va a estar presente siempre, con todas las dependencias a mi cargo, le guste a quien le guste, le disguste a quien le disguste. Yo no le voy a pedir permiso a nadie para hacer lo que tengo que hacer”, afirmó con vehemencia.