Le ganó 4-0 en La Bombonera con tres goles de Lionel Messi y uno de Sergio Agüero.
Por Vito Amalfitano
Desde Buenos Aires
Andá decirle a ese pibe que viene a ver a Messi por primera vez que este es un partido ante un rival de quinto nivel y que no le hace bien al prestigio de la Selección. Andá a decirle a esa familia que se hizo miles de kilómetros para sumarse a la despedida de Argentina que en la previa del Mundial se debió haber buscado, al menos, un rival de nivel medio, una selección de más peso..
Acá importa la fiesta, la despedida. Que es también deseo, pedido, bandera, ilusión, grito, canto y esperanza. Poco les interesa, a quienes llenaron la Bombonera, con entradas compradas con tiempo de anticipación, o con entradas regaladas, o los que vienen por promociones de las empresas auspiciantes, que Perú se despide con Escocia o que Francia lo hace con Italia. Que la mayoría de las selecciones fuertes o de nivel medio que juegan el Mundial tienen encuentros de cierre más serios, que sirven mejor de evaluación.
A quienes vinieron, y se pusieron la camiseta con orgullo, y cantaron el himno a destiempo, no al mismo ritmo que La Sole, no les interesa demasiado que con el poco rodaje de esta Selección, con la incertidumbre que hay sobre la formación de Jorge Sampaoli, esta era una oportunidad para elegir una medida más acorde a las circunstancias.
También debió haber estado a la altura de una Selección como la de Argentina el estado del campo de juego. Pero pesan algunos nombres y algunos hombres y se jugó en la Bombonera. Así como casualmente se eligió también otro campo de juego en estado pésimo, el de la cancha de Huracán, para el entrenamiento a puertas abiertas del domingo a la mañana.
Todo con afecto
Sí estuvo muy bien, en la fiesta previa, el homenaje a los ex campeones del mundo de la Selección. Asistieron y recibieron su distinción el Pato Fillol, Burruchaga, Ruggeri, Carlos Tapia, Oscar Garré, Giusti, Omar Larrosa, “Checho” Batista, Pumpido, “el Vasco” Olarticoechea.
También para destacar la plaqueta del presidente de la AFA, “Chiqui” Tapia, para Javier Mascherano, por sus 143 partidos en la Selección. Recibió un aplauso cerrado. Antes, en el aplausómetro en la previa, obvio Messi estuvo fuera de competencia, pero detrás de él la mayor ovación fue para el “local”, Cristian Pavón. Igual fue aplaudido Armani en el calentamiento previo de los arqueros y sobre los 20’ del partido prácticamente todo el estadio cantó “Pipa/Pipa”, un un jugador muy ligado al pasado de River, a quien le ofrendaron ese aliento espontáneo después de un remate al arco que le tapó el golero Placide, y por toda la carga previa, de goles decisivos perdidos e hirientes “memes”. En la Bombonera, en cambio, fue todo con afecto. Aunque también desde la cabecera que da a Casa Amarilla en algún momento de la previa se cantó el “Queremos la Copa…”, clásico de la hinchada de Boca.
Messi, Tagliafico, Lo Celso.. y Sol Pérez
Y en la cancha, además, hubo un partido, más para sacar conclusiones en el primer que en el segundo tiempo, por “la parada” inicial del equipo que eligió Sampaoli. Sorprendió la ubicación de Salvio, quien no anduvo bien. Se lució en el arranque Giovanni Lo Celso, y cuando penetró con decisión y atrevimiento al área le cometieron penal con una peligrosa “paralítica”. La conversión del 10 sirvió para que recrudeciera el canto “Que de la mano / de Lío Messi / todos la vuelta…”.
También sobresalió Tagliafico con sus proyecciones por izquierda, transformándose en una muy interesante alternativa de pase para Messi o Lo Celso. Y se destacó Manuel Lanzini, quien empezó bien volcado a la derecha, para casi un 4 3 1 2, pero que después, con el correr del partido, alternó como “interno”.
El cambio de Marcos Rojo por Fazio para todo el segundo tiempo puede ser indicativo de algo. Quizá una idea del entrenador de darle más tiempo y una posibilidad al hombre de Manchester United para la zaga.
Por la brusquedad de algunos jugadores de Haití los futbolistas de Argentina levantaron “la piernita” muy seguido y el partido perdió aun más seriedad. Llegó a los 13’ el segundo de Messi, quien solo tuvo que empujar la pelota tras un buen desborde de Gonzalo Higuaín y un cabezazo de Lo Celso. La hinchada de Boca festejó la entrada de Pavón.
También Lio, quien marcó el tercero tras un centro del delantero local, y le tributó su agradecimiento. Messi después se lo sirvió a su amigo Sergio Agüero, tras una buena combinación con Meza y Lo Celso, quien fue una de las figuras, y se nota que lo libera mucho a Lío en el abastecimiento del juego.
Messi se preocupó sobremanera porque Agüero estuviera a gusto, hasta lo esperó en varias jugadas, y el delantero de Manchester City terminó siendo más efectivo que Higuaín en la red.
Mientras en la cancha Haití no podía siquiera ensayar un tiro al arco y Messi se quedaba hasta el final de su show, en las tribunas Sol Pérez, con toda la simpatía y paciencia, se sacaba la enésima foto, con hinchas, y también con periodistas. Así de liviana terminó la noche. Pero los aficionados se llevaron lo que vinieron a buscar, los pibes que llegaron por Messi disfrutaron sus goles y lujos dosificados, y los jugadores el afecto que necesitaban. Rusia, allá vamos.
La síntesis
Argentina 4
Wilfredo Caballero (5); Salvio (5), Otamendi (5), Federico Fazio (5) y Tagliafico (8); Manuel Lanzini (6), Mascherano (6) y Angel Di María (5); Lo Celso (8); Lionel Messi (9) y Gonzalo Higuaín (6). DT: Jorge Sampaoli.
Haití 0
Placide (5); Arcus Carlens (4), Ade (5), Jerome (4) y Vorbe (4); Alceus (4) y Herivaux (3);Sanon (5), Cantave (4) y Alex Christian (5); Nazon (4). DT: Marc Collar.
Goles: en el primer tiempo, 17’ Lionel Messi de penal; en el segundo tiempo, 13’ y 21’ Lionel Messi; 24’ Sergio Agüero.
Cambios en Argentina: en el segundo tiempo, en el inicio, Marcos Rojo (5) por Federico Fazio, 14’ Cristian Pavón (7) por Angel Di María, Sergio Agüero (7) por Gonzalo Higuaín, Maximiliano Meza (6) por Lanzini; 25’ Marcos Acuña por Tagliafico; 29’ Ever Banega por Lo Celso
Cancha: de Boca (mala).
Arbitro: Arnaldo Samaniego, de Paraguay (6).