Gastón Fossati, director de la Agencia de Recaudación, fue el encargado de explicar este cambio de perfil en la orientación de las acciones de verano.
Lejos quedaron los tiempos en que los contribuyentes de la provincia de Buenos Aires encontraban pegados en los parabrisas de sus autos obleas rojas, a través de las cuales el fisco les comunicaba el monto de sus deudas y, a la vez, los escrachaba públicamente por su condición de morosos.
El panorama en el operativo de verano que ARBA realiza en la costa cambió drásticamente y, por estos días, el uso de herramientas tecnológicas, el contacto por medios digitales, la comunicación directa con el contribuyente y el trabajo de fiscalización coordinado junto a los municipios y AFIP, reemplazaron el despliegue masivo de inspectores y los operativos de saturación en zonas comerciales.
Al explicar este cambio de perfil en la orientación de las acciones de verano, Gastón Fossati, director de la Agencia de Recaudación, afirmó que “la incorporación de tecnología y las nuevas formas de contacto que establecimos con los contribuyentes nos permitieron ser más eficientes a la hora de cobrar y fiscalizar, sin incomodar a turistas ni vecinos”.
Fossati aseguró que “ahora los controles son más precisos y ordenados. Contamos con el aporte de la fiscalización electrónica, que nos evita tener que saturar las calles con cientos de inspectores. Además, construimos un vínculo muy importante con los municipios y AFIP, lo cual amplía el alcance de nuestra información fiscal, potencia el cruce de datos y nos posibilita actuar en conjunto cuando hace falta”.
A lo largo de 2016, ARBA suscribió convenios de colaboración e intercambio de datos con 121 distritos de la provincia de Buenos Aires en el marco del Programa de Gestión Tributaria Territorial, que apunta a mejorar la labor de recaudación en todas las jurisdicciones.
En términos operativos, esos acuerdos de trabajo abrieron la posibilidad de operativos conjuntos, tanto en el verano como en el resto del año, así como el uso compartido de herramientas tecnológicas para combatir la evasión, espacios comunes de capacitación y otras instancias de gestión tributaria en equipo.
“La labor coordinada junto a otras áreas del Estado y el desarrollo tecnológico que alcanzamos en ARBA hacen innecesario el despliegue que había en años anteriores. En definitiva, el cambio que implementamos nos está permitiendo mayor eficiencia, ya que optimizamos recursos y obtenemos mejores resultados”, explicó Fossati.
Controles específicos
Los controles durante esta temporada se centran en temas específicos, como por ejemplo verificar la emisión de ticket y la operatoria de facturación, y se desarrollan con un movimiento acotado de agentes, priorizando el accionar de aquellos que cumplen tareas en la región a fiscalizar.
El director de ARBA subrayó que “nuestro objetivo es fomentar el cumplimiento voluntario de los contribuyentes. No nos interesa la lógica de ocupación territorial que imperaba antes ni la estigmatización de deudores. Por eso, más allá de algunas fiscalizaciones puntuales, este verano nos enfocamos en estar cerca de los vecinos para brindarles buenos servicios, que es lo que nos pide la gobernadora María Eugenia Vidal”.
Para fortalecer la atención personalizada al contribuyente y facilitar sus trámites tributarios, el organismo puso en marcha la campaña “Punto ARBA” e instaló nuevos puestos móviles en lugares turísticos y zonas de la Provincia que concentran un flujo importante de público.
Esas bocas de servicio, que ya son 13 en la costa atlántica, permiten abonar impuestos de manera inmediata, obtener liquidaciones de deuda, suscribir planes de pago, adherir a la boleta por mail, efectuar consultas y realizar todo tipo de gestiones tributarias.
Los contribuyentes acceden en esos puntos de atención a los mismos servicios que el organismo ofrece vía web, tanto en www.arba.gob.ar como en “ARBA Móvil App”, la aplicación que funciona con dispositivos Android y se descarga desde Google Play.
Fossati sostuvo que “con Punto ARBA ofrecemos distintas alternativas de atención para que el vecino elija la que mejor se adapta a sus necesidades. La intención es que tanto en los canales presenciales como digitales siempre encuentre opciones rápidas para pagar, gestionar o consultar. Es decir que pueda cumplir con sus impuestos, estando en la playa o en su casa”.