Es por el plazo de 20 años y alcanza a 3.860 máquinas que funcionan en los casinos de la provincia. El Casino Central de Mar del Plata quedó para “Casino de la Victoria”.
El gobierno bonaerense aprobó este viernes, mediante el Decreto 182 publicado en el Boletín Oficial, la licitación pública llevada a cabo en enero último para la explotación, por el plazo de 20 años, de 3.860 máquinas tragamonedas que funcionan en los casinos del distrito.
El 23 de enero, el Instituto Provincial de Lotería y Casinos de la provincia abrió los sobres con las ofertas de las empresas que se presentaron a la licitación para la explotación de las máquinas tragamonedas que funcionan en los casinos estatales Central de Mar del Plata, Anexo III de Mar del Plata (Hotel Hermitage), de Miramar, Monte Hermoso, Pinamar, Tigre y Tandil.
Así, a la empresa Boldt, de Antonio Tabanelli, se le adjudicó el manejo de las salas de los casinos de Tigre y de Pinamar y, según se explicita en el decreto, “contará como única retribución el porcentaje de 53% de la rentabilidad mensual producida por la explotación de las máquinas electrónicas de juego de azar que se instalen los casinos”.
En tanto, el Casino Central de Mar del Plata y el de Monte Hermoso quedaron para al oferente “Casino de la Victoria”, dirigida por Daniel Mautone, el cual recibirá el 55,5% del total recaudado en esas salas.
El gobierno de María Eugenia Vidal rechazó la oferta realizada por la UTE conformada por las empresas “Entretenimientos Saltos del Moconá y el Bingo Oasis de Pilar”, de Ricardo Glazman y Alejandro Gravier para los casinos Hermitage, y los de Tandil y Miramar “por no resultar conveniente al interés fiscal”, por lo que ese “renglón” fue declarado como “fracasado”.
El plazo de concesión se fijó en 20 años, con posibilidad de prórroga por un año, condiciones particulares y especificaciones técnicas de la provisión y mantenimiento de máquinas electrónicas de juegos de azar.
También especificó el control online de las máquinas electrónicas de juegos de azar y la remodelación, construcción y/o cesión, y puesta en valor de las distintas salas de juego y servicios complementarios a la actividad lúdica.