La cifra se triplicó en los últimos cinco años. Medicina y Psicología, entre otras carreras ligadas a la salud, volvieron a ser las más elegidas. La gran sorpresa fue Martillero y Corredor Público, con casi 3000 inscriptos. Destacan la "feminización de la matrícula": el 60% son mujeres.
La Universidad Nacional de Mar del Plata (UNMdP) contabilizó en 2023 una inscripción récord de 28.000 nuevos estudiantes, la cifra más alta registrada en la historia de la universidad, tres veces más alta que hace tan solo cinco años atrás.
A semanas del inicio del segundo cuatrimestre, autoridades de la UNMdP revelaron a LA CAPITAL datos del proceso de inscripción de este año, en el que las carreras ligadas a la salud, como Medicina, Psicología, Enfermería, Bioquímica y Terapia Ocupacional acapararon la demanda y constituyen un tercio del total de los nuevos estudiantes.
Desde su apertura en la ciudad, la carrera de Medicina viene liderando los registros de inscripción con alrededor de 2000 personas que cada año se anotan para formarse como médicos en la universidad pública de Mar del Plata.
Pero luego de la pandemia, posiblemente a raíz del efecto provocado por la cuarentena y su impacto en la salud mental -entre otras razones-, la carrera de Psicología se posicionado como la de mayor demanda en la UNMdP, que este año registró cerca de 2200 nuevos estudiantes.
Daniel Reynoso, secretario académico de la Universidad Nacional del Plata, compartió la “gran satisfacción” que genera entre las autoridades este “número altísimo” de 28.000 estudiantes inscriptos en 2023, “la cifra récord de todas las inscripciones que ha tenido la Universidad hasta la fecha”.
Vale señalar que en 2018 se anotaron 9.000 personas, en 2021 alrededor de 21.000 y en 2022 unas 24.000, lo que marca un incremento exponencial que se reafirma en 2023, con más del triple de ingresantes que hace cinco años.
Entre octubre y noviembre se abrirá la instancia de inscripción para el 2024, pero “va a ser muy difícil igualar o superar lo que pasó este año”, cuando se dieron algunas situaciones puntuales que alentaron a muchos jóvenes y adultos a anotarse para empezar a cursar una carrera universitaria.
“La inscripción ha sido muy favorable en las carreras que tienen que ver con salud, como Psicología, Medicina, Enfermería, Bioquímica y Terapia Ocupacional. Todo eso arma un combo de un tercio del total de los ingresantes”, detalló el secretario académico.
Otro tercio, sin embargo, queda establecido dentro de las carreras cortas. Entre ellas, la reapertura de la carrera de Martillero y Corredor Público ha sido “una gran sorpresa”, al igual que la Tecnicatura Universitaria en Producción Vegetal Intensiva de la Facultad de Ciencias Agrarias.
La carrera de Martillero y Corredor Público, que se dicta en la Facultad de Derecho, reúne cierta condiciones que generaron un fuerte interés: es una carrera corta, tiene elevada salida laboral y, además, se puede cursar a distancia.
“La expectativa era superar los mil inscriptos, pero llegamos a 2800 y fue una sorpresa enorme”, admitió Reynoso.
Enseguida agregó que “también fue una sorpresa lo que sucedió con la Tecnicatura de Agrarias, porque los más de 400 estudiantes que registramos en esta inscripción, se suman a los más de 700 que teníamos anteriormente”.
Son múltiples las razones que permiten explicar este fenómeno que, vale aclarar, no solo se produce en Mar del Plata sino que guarda relación directa con lo que ocurre en otras universidades similares.
“Ha crecido el sistema universitario en general. La búsqueda de carreras cortas, la inclinación por el área de salud y la salida laboral se da en un contexto nacional”, dijo Daniel Reynoso y, a modo de ejemplo, señaló que “sucede algo similar en las universidades del Centro, Bahía Blanca, Cuyo y del Litoral”.
En particular con las carreras a distancia, como Martillero y Corredor Público, “el crecimiento tiene que ver con que no solo hay una gran extensión de las ciudades y provincias cercanas, sino por la misma Mar del Plata” ya que “hoy un estudiante puede vivir en cualquier lugar de la ciudad y cursar a distancia, lo cual tiene un atractivo para muchos”.
Al mismo tiempo, la Universidad Nacional de Mar del Plata ha incrementado y diversificado su oferta académica en los últimos años. “Hay una diversidad muy grande de la oferta educativa, con muchas posibilidades”, comentó el secretario académico.
Pero a su vez, otra de las razones que explican este aumento exponencial de los inscriptos es el crecimiento que la ciudad ha tenido en sí misma. “Mar del Plata es una ciudad muy atractiva desde todo punto de vista”, señaló al respecto y destacó la oferta de alquileres, la nocturnidad y propuestas culturales, además del mar y su encanto natural.
En cuanto a la inclinación por las carreras ligadas a la Salud, esto también se enmarca en un contexto nacional. En Medicina ha sido “más parejo”, con unos 2000 nuevos inscriptos por año, pero “la pandemia impactó muy fuertemente en el caso de Psicología”, que este año tuvo incluso más inscriptos que Medicina.
En la Universidad Nacional de Mar del Plata y en sintonía con otras universidades, el segmento más amplio dentro de los estudiantes es el que integran jóvenes de entre 20 y 27 años. Sin embargo, muchos adultos también se animan año a año a empezar una carrera.
Pero dentro de la población universitaria sobresale otro dato interesante: la “feminización de la matrícula”, ya que más del 60% de quienes se inscriben para estudiar una carrera son mujeres.
Por otro lado, año a año viene creciendo la cantidad de extranjeros que se radican en Mar del Plata para estudiar en la universidad. El 80% proviene de Brasil y en ese mismo porcentaje, la carrera más elegida es Medicina.
En la UNMdP actualmente hay también muchos estudiantes de Chile y Brasil, pero donde más se advierte esta realidad es en la Escuela de Medicina, que registra estudiantes de 14 países del mundo.
De acuerdo al relevamiento interno que realiza la Universidad, solo el 20% de los inscriptos alcanza completar la carrera y se recibe.
Sin embargo, sobre ese punto es clave aclarar que de los estudiantes que abandonan la carrera en primer año, instancia que constituye una especie de “filtro” para muchos, “el 40% vuelve a inscribirse en otra carrera”.
Esto implica que muchas personas eligen una carrera y al empezar a cursar, descubren que no es la indicada para ellos y la dejan. No obstante, casi la mitad vuelve a anotarse en otra carrera al año siguiente, es decir que no abandona el sistema universitario, por lo que la tasa de deserción “no es tan alta como se cree”, aclararon desde la UNMdP.
