Libro - investigación sobre el presidente del club de La Ribera.
En estos tiempos en los que aflora nuevamente el proyecto noventista tardío de convertir a los clubes de fútbol en sociedades anónimas, Ignacio Damiani, coautor de la biografía del Daniel Angelici que publica Ediciones B, afirma que el actual presidente “profundizó el modelo privado en Boca” que había iniciado la gestión de Mauricio Macri en el club de La Ribera.
“Nuestra investigación lo que logra es destapar la hiperconcentración de poder que tiene Angelici, el modelo de disciplinamiento que ha tenido con periodistas críticos en Boca, el control de la ?barrabrava? con carnets de socios para que recauden dinero, la privatización del Museo de Boca y los diferentes negociados”, dice Damiani, uno de los autores de El Tano, la biografía sobre el presidente de Boca que publica Ediciones B y que cobra actualidad en los últimos tiempos, no solo por lo futbolístico.
“Angelici representa el modelo Macri en Boca: un negocio tras otro con representantes de futbolistas, la entrega de obras de infraestructura a constructoras amigas de Macri que agregan sobreprecios, la utilización de terrenos fiscales otorgados de forma irregular para levantar otra Bombonera con palcos privados, shopping y restaurantes; es decir, el Boca fashion que excluye al socio común. El Boca privado, el de los negocios empresariales y que recorta el presupuesto a las áreas sociales y deportes amateurs del club”, añade Damiani sobre el resultado del libro que escribió junto a Julián Maradeo.
“Angelici es un dirigente ?moderno? de esos que utilizan su condición de empresario para influir en la política y viceversa. Es un dirigente modelo del siglo XX pero con un detalle particular: podría haber sido sólo dirigente político, únicamente empresario del juego o ahora del fútbol, pero es todo eso junto, y más. Se trata de un ajedrecista acostumbrado a las partidas simultáneas. Si algo queda plasmado en la investigación es que tiene una multiplicidad de caras. Es un hombre influyente en la mesa chica del presidente Mauricio Macri; es empresario del juego, su agenda de vínculos políticos y judiciales, su poder territorial, su condición de presidente de Boca, lo definen como un jugador capaz de acumular poder enfrentando rivales y situaciones diversas”, describe Maradeo.
“En Boca sabe explotar lo que es el Boca Social, y a su vez, cuando habla de las barras, se muestra hasta sincero: quienes conocen a fondo el desarrollo de la causa del juez De Campos, cuentan que cuando Angelici fue a declarar, inicialmente enfrentó al juez, pero cuando éste le muestra que muchos hombres de su entorno ?por ejemplo Carlos Martínez, ex policía bonaerense, o Carlos Mechetti, estaban complicados-, él baja la guardia y declara durante 7 horas. Hasta señalan que a partir de ese momento puso a disposición videos que mostraban lo que pasaba en determinados sectores de la cancha en algunos partidos; sabe jugar, según cómo se vaya acomodando la partida”, agrega Maradeo.
Ignacio Damiani cuenta que “la relación política con Macri nace en 2003, en la segunda vuelta que Macri enfrenta a Ibarra, ahí Angelici jugó a fondo, acercó radicales, coincidió en la lógica de negocios con Macri y profundizó el modelo privado en Boca”.
“Bianchi o Riquelme, por citar a dos ídolos indiscutibles de la institución fueron utilizados para maniobras políticas internas; cuando ambos resultaron incómodos Angelici los despidió sin ningún problema”, remarca Damiani.
“Angelici no sólo profundiza el modelo de negocios con el presidente, sino que además le agregó soluciones judiciales y cuadros políticos para ubicar en lugares estratégicos. Por algo a pesar de todos los magros resultados en Boca Angelici parece intocable. No hay muchos que se animen a cuestionarlo, es lógico, nadie lo toca, criticarlo es pelearse con el mismísimo poder”, dice finalmente el periodista Ignacio Damiani, uno de los autores de la biografía no autorizada del presidente de Boca.