Propone dos espectáculos con entrada solidaria.
En el marco de la celebración de sus 40 años en la danza, la bailarina y coreógrafa Anahí Ramos propone dos espectáculos en esta temporada. Hoy, a las 23.15, la particular y multitudinaria “Bailando la Misa Criolla”, en el Teatro Colón, bajo la dirección de Héctor Paredes.
Además, preparó “Frank & Liza Deluxe” con lo mejor de Frank Sinatra y Liza Minnelli.
– Estás celebrando 40 años con la danza, eligiendo dos espectáculos muy diferentes: el jazz y el folklore, ¿cómo decidiste estos espectáculos?
– Decidí, después de 40 años de trayectoria, tener variedad en los espectáculos, hacer cosas distintas, por eso tenemos un “Frank & Liza Deluxe” con lo mejor de Frank Sinatra y Liza Minnelli; hay cantantes, bailarines, es un show con mucha coreografía, un vestuario muy bonito y una puesta sumamente mágica. Después está el espectáculo de “Bailemos… la Misa Criolla” que es un trabajo de casi cien personas, tenemos el lujo de que esté el coro Arsis Nova de la mano de Graciela Véspoli. El elenco es el taller folklórico Tercer Arte, el grupo de estilización Mar del Folk, el Instituto de Danzas de Anahí Ramos. Y sí, quería hacer cosas distintas, era un desafío para mí porque era una complicación bastante compleja por trabajar con tanta gente. Estoy contenta porque son propuestas realmente muy lindas, hechas con mucha pasión y amor y eso es en lo que trato siempre de hacer hincapié. A lo mejor no me interesa tanto que levanten la pierna muy alto sino que realmente bailen con pasión, con amor y eso se nota.
– También los producís, ¿qué desafíos implica la producción de propuestas con tanto despliegue de personas y recursos técnicos?
– Producir es realmente un desafío difícil, con mucho riesgo y también encontrar buena gente, buenos equipos de trabajo, eso es muy importante fundamentalmente en toda área que encares. Es importantísimo la gente que te rodea, los recursos técnicos son muy grandes porque hay una pantalla led que proporciona el teatro Colón, pero hay que realizar las imágenes, elegirlas acorde a los espectáculos y que no sea cansador. En fin, atrás de todo esto hay un trabajo de todos realmente de equipo, nadie hace nada solo, solamente los egoístas hablan así, es un trabajo de gente que hace mucho tiempo está en el estudio, nos conocemos y sabemos las debilidades de cada uno y por eso funcionamos .
– Por otra parte, esta celebración tiene su componente solidario. ¿Cómo se gestó?
– Sí, es a beneficio de la “Fundación Pupi” para el proyecto “Construyendo un nosotros”. Una persona amiga me convocó para esta propuesta que están haciendo para que coordine la parte cultural, entonces la idea fue hacer los espectáculos a beneficio de la fundación. Y es también una manera de devolverle a la gente el afecto de todo este tiempo.
– A 40 años de vivir la danza, ¿cómo definís lo que significa para vos? ¿Sentís la disciplina de la misma manera o fue cambiando tu relación con ella? ¿Por qué?
– Mi relación fue cambiando porque uno va cambiando y va creciendo y va cumpliendo etapas y cambiando ciclos. En mi caso estudié, viajé, bailé, me dediqué a la docencia, trabajé en muchos colegios, dirigí, hice coreografías, trabajé en muchos espectáculos en Buenos Aires y ahora es la etapa de producir, de dirigir el estudio (que no es tarea fácil) y después el haber creado la productora FLUX, junto con mi hijo, Ezequiel Gómez, y nuestra idea es seguir produciendo espectáculos de todo tipo para Mar del Plata; ya nos han llamado para hacer cosas afuera, así que estamos realmente muy felices con eso.
– ¿Cómo observás el panorama de la danza en Mar del Plata?
– La veo muy enriquecedora, con muchas cosas, algunas muy buenas y algunas medias mamarrachas (combinan y fusionan cosas que, para mi gusto ya no van o inventan cosas que no me gustan). Lo que es la danza en sí es muy enriquecedora, acá en Mar del Plata hay mucho talento y realmente hay que ver para darse cuenta la cantidad de gente que hace realmente cosas increíbles; estoy muy feliz de estar en este mundo y de la pasión que siento por la danza.