La institución recibió un mail anónimo en el que se advertía que había un explosivo en el interior del edificio, ubicado en Rondeau 551. El inmueble fue evacuado.
Una amenaza de bomba en el colegio La Sagrada Familia hizo que el edificio completo debiera ser evacuado este jueves a la mañana.
La institución recibió un mail anónimo en el que se advertía que había un explosivo en el inmueble, ubicado en Rondeau 551. De inmediato, las autoridades del establecimiento educativo llamaron a la policía, y personal de la comisaría tercera -que está ubicada exactamente enfrente- se presentó en el lugar.
Más tarde, hicieron lo propio los especialistas en explosivos, que trabajaron en el interior del edificio, que ya había sido desocupado. La novedad fue comunicada al fiscal Leandro Arévalo, quien ordenó la realización de diversos peritajes para determinar el origen del correo electrónico desde el cual se realizó la amenaza anónima, a los fines de identificar al autor.
“Vamos a intentar descubrir quién fue el vivo que hizo la amenaza, para ubicarlo y que estas cosas no pasen como si nada”, adelantó el investigador, tras una consulta de LA CAPITAL.
La Sagrada Familia es un colegio tradicional de la zona del Puerto, que en los últimos tres años tomó relevancia pública debido a que dicho establecimiento educativo concurrió, de niño, el arquero marplatense Emiliano “Dibu” Martínez, campeón de América y del mundo e ídolo de la Selección Argentina de fútbol, lo cual le valió cierta repercusión nacional tras los títulos obtenidos por el jugador.
Otro caso
Otro caso de similares características había ocurrido este jueves a la madrugada en un hotel céntrico con 60 habitaciones que también tuvo que ser desalojado.
En esta oportunidad, se trató de un edificio ubicado en Moreno, entre Buenos Aires y Entre Ríos. Uno de los empleados recibió una llamada telefónica en la que una persona anónima le advirtió que en uno de los cuartos había una bomba.
En el lugar, trabajó en el lugar el personal especialista en explosivos. Tras evacuar a los presentes y revisar cada una de las dependencias del inmueble, descartaron que hubiera peligro y la situación se normalizó.