El equipo marplatense hizo un buen trabajo en los dos extremos del campo y derrotó con autoridad 2-0 a Patronato. Sumó su tercer triunfo al hilo en el Minella, tomó más aire en la tabla y consolidó su idea de juego.
Por Juan Miguel Alvarez
Alvarado fue superior en las dos fases del juego, venció con autoridad 2-0 a Patronato en el José María Minella y, por funcionamiento y resultados, empieza a recorrer un camino distinto en la Primera Nacional de fútbol. Mucho más prometedor.
El equipo marplatense defendió muy bien los noventa minutos y, con menor elaboración que el rival, atacó mejor.
Patronato dominó en la parte central del campo, donde sumó posesión y pases laterales. Alvarado prevaleció en los extremos del campo, donde se resuelven los partidos.
Los tres centrales estuvieron sólidos. Robledo y Ortiz ganaron casi siempre en el uno contra uno y rechazaron cada envío aéreo. El único fallo, por un resbalón, fue compensado con una salvada providencial de Irazoque, quien corrió a toda velocidad y se lanzó en el momento justo desde atrás para evitar una definición mano a mano de Russo.
No fue igual la primera y la segunda etapa. En la inicial, Alvarado perdió mucho más rápido la pelota. Pero Patronato, el dueño del balón, careció de profundidad. En cambio, el local, con su juego directo, generó algunas situaciones de gol (no muchas). Producto de la tarea complementaria de sus tres jugadores ofensivos, quienes buscaron los espacios disponibles y, en general, tomaron buenas decisiones con la pelota.
Albertengo aguantó todo y descargó siempre al hombre indicado, Ramírez estuvo siempre en el radio de acción y José Luis Fernández le dio toque de distinción a cada ataque.
Patronato había goleado a Alvarado 6-0 en Paraná en la primera rueda.
El marcador se abrió con un penal sancionado en una jugada de pelota quieta: Ojeda apenas apoyó su brazo sobre Ortiz (aunque no hubo sujeción) y el árbitro cobró la pena máxima. Ramírez convirtió con un derechazo fuerte, cruzado, abajo.
José Luis Fernández, con un tiro libre que pegó el horizontal, estuvo cerca de marcar el segundo antes del entretiempo.
Igual el gol de la tranquilidad llegó pronto en el complemento. Cuando creció la tarea de Bellocq, clave en la presión alta por su capacidad para leer y anticipar los pases rivales. El ex Independiente recuperó y en el mismo toque asistió a Albertengo, el “9” engachó dos veces para sacarse rivales de encima pero abrió demasiado para Ramírez, quien se perfiló para la derecha y metió un centro fuerte por bajo, paralelo a la línea de fondo, que conectó Fernández para el 2-0.
Con la confianza por las nubes y un rival inofensivo, el equipo de “Pancho” Martínez jugó a placer el resto del partido. Patronato remató al arco (en realidad desviado) recién a los 34′ de esa segunda etapa.
Irazoque llegó a la quinta amarilla y no podrá estar en el partido del viernes ante Güemes en Santiago del Estero.
Los hinchas explotaron con cada cruce y rechazo y se deslumbraron ante el talento y la exquisita pegada de Fernández. Los minutos finales fueron una fiesta, dentro y fuera del campo. Como diría el relator y DT de Patronato, Rodolfo De Paoli, “Que viva el fútbol”, Alvarado.
Síntesis
Alvarado (2): Lungarzo (6); Nicolás Ortiz (6), Robledo (6) e Irazoque (6); Malagueño (5), Bellocq (7), Boasso (5) y Olivera (5); José L. Fernández (7), Mauro Albertengo (7) y Sebastián Ramírez (7). DT: José M. Martínez.
Patronato (0): Salvá (5); Geminiani (5), Sergio Ojeda (4), Cristian González (5) y Lucas Kruspzky (5); Kevin González (4), Fabio Vázquez (4), Nicolás Domingo (5) y Juan C. Esquivel (5); Ignacio Russo (4) y Mateo Levato (4). DT: Rodolfo De Paoli.
Goles: primer tiempo, 33′ S. Ramírez, de penal; segundo tiempo, 7′ José L. Fernández.
Cambios: primer tiempo, 42′ Ghirardello (4) por C. González; segundo tiempo, inicio, Novero (5) por Esquivel, 8′ Juan P. Barinaga (5) por Levato, 13′ Lacunza (6) por Irazoque, 28′ Lamardo por Malagueño y Rebecchi por Albertengo, 30′ Tomás Cáceres por Vázquez y Miró por K. González y 32′ Vitale por S. Ramírez y Vadalá por Boasso.
Cancha: estadio José María Minella (regular).
Árbitro: Rodrigo Rivero (4).