Los policías secuestraron un arma del mismo calibre que la empleada para asesinar a Lucas Rosales (17). Los testimonios y otras pruebas son contundentes y sostienen que el ahora prófugo fue el autor del crimen.
Un joven de 24 años y dueño de un frondoso prontuario que incluye hechos de tentativa de homicidio, robos y actividades vinculadas a la venta de drogas fue acusado de ser el autor del asesinato de Lucas Rosales (17), el menor que murió el sábado de un disparo en el pecho en el barrio San Martín.
Tres allanamientos desplegados por personal de la DDI local tuvieron por misión localizar a Alan “Pol” Acosta (24), señalado por testigos como quien disparó contra Rosales. Sin embargo al requisar los tres domicilios no pudieron dar con él.
En cambio la policía logró se secuestrar una pistola calibre 9 milímetros, similar a la empleada en el asesinato del menor, el que ocurrió frente a su casa de Sáenz Peña al 2000.
El fiscal Juan Pablo Lódola solicitó esta mañana a la jueza de garantías Rosa Frende la autorización para allanar los domicilios de Genova 2600, Gutemberg 5800 y Gianelli esquina 83 en busca de Acosta y de elementos de importancia para la causa.
Para ello Lódola presentó una serie de pruebas irrefutables sobre la participación de Acosta en el crimen de Rosales, las cuales fueron consideradas admisibles por Frende.
Rosales recibió un disparo en el pecho cuando se encontraba junto a un amigo -en las cercanía había otros familiares suyo. Según se pudo reconstruir, poco después de las 13.30 del sábado Rosales habría mantenido una discusión con Acosta por frivolidades. Después del intercambio de palabras Acosta se retiró y regresó pasadas las 14, en motocicleta y acompañado por otro joven.
Sin mediar esta vez palabras, Acosta descendió de la moto, extrajo un arma y efectuó varios disparos contra Rosales. Uno de los proyectiles dio en el pecho del menor. Acosta escapó, mientras que los familiares y allegados de Rosales lo trasladaron hasta el HIGA, donde se confirmó el fallecimiento.
Los testimonios y otras pruebas permitieron identificar al autor de los disparos como Acosta, algo que no pudo logarse con el conductor de la moto.
En el allanamiento a la vivienda de la calle Gutemberg los policías de la DDI hallaron el arma calibre 9 milímetros.