Mauricio Lescano, Hernán Pari y Hernán Castiello jugaron en el club portuense entre los 80 y los 90. Hoy los tres se dedican a la música.
por Víctor Molinero
A lo largo de los años, por las filas de Aldosivi han pasado jugadores que dejaron diversos recuerdos. Por sus condiciones futbolísticas, por sus logros, sus fracasos o por ser protagonistas de divertidas anécdotas.
También pasaron por el club portuense tres futbolistas que hoy viven de la música y se destacan en distintos géneros.
Se trata de Hernán Pari, Hernán “Cucuza” Castiello y Mauricio “Junior” Lescano, quienes tuvieron suerte dispar en su paso por Aldosivi.
“Cuando muere mi viejo un amigo suyo me trajo a Mar del Plata para trabajar y jugar a la pelota. Arranqué en Aldosivi en la sexta, hice quinta, cuarta y salté a la primera. Ahí hice la pretemporada y jugué todos los amistosos. Pero cuando empezó el campeonato fui al banco en la primera fecha, enseguida discutí con el técnico y al poco tiempo largué”, recuerda Hernán Pari en diálogo con LA CAPITAL.
“Me fui y no quise jugar más a la pelota. Me dediqué a la música. No te digo que era Fernando Redondo jugando de cinco pero… Más bien raspaba jaja. Pero bueno, nunca se va a saber si hubiese dado para más”, agrega.
Hernán Pari aparece abajo (el segundo desde la izquierda, con una camiseta con bolsillo que había sido de su padre y usaba por cábala).
De Lanús, se había iniciado futbolísticamente en Defensores de Arena, de Gerli, donde fue campeón del torneo de papi fútbol en el que solía enfrentarse con el equipo de Leo Rodríguez.
“De ahí fui a la pre novena de Independiente de Avellaneda. Dejé cuando tuve que arrancar el secundario pero un día, estando en tercer año, jugamos un partido con un equipo del colegio contra la sexta del “rojo”. El técnico de ellos era Omar Larrosa. Ganamos 4-1 e hice un golazo desde muy lejos. Ahí me propusieron volver a Independiente”, cuenta sobre sus inicios con la pelota.
Hernán Pari y una pose bien tanguera.
“Jugaba de volante central y además tenía una banda de heavy metal, Conan”, remarca Gustavo Seira, referente de consulta siempre si de historia aldosivista se trata. Seira fue desde mascota del equipo en la década de los 70, hasta jefe de prensa, dirigente y candidato a presidente del club portuense.
En efecto, en 1993 Pari grabó su primer disco de heavy metal, “Conan”, y en 1996 se radicó en México, donde afianzó su carrera como cantor y compositor, con giras incluidas por España, Estados Unidos, Bolivia y Perú. A partir de 2007 su carrera giró definitivamente hacia el tango, género con el que logró premios a nivel local (Estrella de Mar 2016) e internacional (Medellín 2015).
Hernán Castiello, un lateral derecho nacido en 1969, se formó en el famoso club Parque e hizo inferiores en Argentinos Juniors. Allí compartió planteles con Fernando Redondo, Fernando Cáceres y Silvio Rudman y fue dirigido por Néstor Pekerman. Fue suplente en primera división con Nito Veiga, quien en 1992 lo trajo a Aldosivi.
Hernán Castiello.
En el medio tuvo un paso fugaz por Tigre, en el Nacional B. Aquí tampoco pudo afianzarse Castiello y una grave lesión lo sacó del fútbol con apenas 24 años. Jugó poco y nada en el club portuense.
Con el retiro trabajó como mecánico dental y también en el depósito de una empresa. Mientras, cantaba cada vez que podía. En 2001 comenzó a hacerlo con más frecuencia, casi profesionalmente. Integró grupos y fue solista. Tango pero también rock. Hasta se dio el gusto de cantar junto a Diego Maradona el año pasado, en un partido homenaje realizado en La Paternal.
Mauricio Lescano hizo una mejor carrera dentro del fútbol. Nació en Quilmes en 1972 y en el club más trascendente de aquella ciudad llegó a jugar entre 1992 y 1994. Inclusive en el 92 integró el equipo recién ascendido a primera división.
Mauricio Lescano en Aldosivi.
Llegó a Aldosivi para jugar el Torneo del Interior en la temporada 1994/1995 y tuvo bastante protagonismo. Ingresó en 13 partidos como titular y en otros dos desde el banco de los suplentes. Convirtió cuatro goles. Dos en un 4-2 como visitante de Social Ramallo, en San Nicolás; uno en el 2-1 como local de Grupo Universitario y otro para la victoria 1-0 en Paraná frente a Patronato. Además vio la tarjeta roja en Bahía Blanca, en un triunfo ante Villa Mitre (2-1).
Sin embargo no permaneció. Jugó la temporada siguiente para Berazategui y del 96 al 98 estuvo en Defensa y Justicia, donde se retiró. Es que para entonces ya había conformado su banda, “La 25”, un popular grupo de rock que ya editó diez discos.
“Los dos eran muy técnicos. Uno como defensor y el otro como enganche. Y tenían pinta de rockeros. Hernán escuchaba soda, Melero, Spinetta… pero cantaba unos tangos bárbaros. Delarroca siempre le decía ‘Cucuzita’ por el tango”, recuerda Daniel Valdés, quien como jugador compartió plantel con Hernán Castiello y Mauricio Lescano y desde hace años trabaja en las divisiones inferiores del club portuense.
Daniel Valdés y Gustavo Seira aportaron recuerdos sobre el paso por Aldosivi de los ahora músicos.
“Lescano en ese plantel era muy amigo de Camoranesi es verdad. En julio del año pasado lo crucé en un hotel en Tucumán, donde él estaba con la banda y yo con los planteles de cuarta, quinta y sexta de Aldosivi. Pensé que no se iba a acordar pero fue todo lo contrario”, agrega el defensor que integró -entre otros- el equipo que jugó la final con Belgrano en 1998 y el que ascendió a la B Nacional en 2005.
Tres historias de futbolistas que, con distinto suceso pasaron por Aldosivi, y hoy se dedican a la música.