El director de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Mar del Plata quedó varado en Florencia de vacaciones con su familia y debió cambiar el itinerario de viaje por el brote de coronavirus en Italia. Intentarán adelantar su regreso a Argentina.
Al director de la carrera de Medicina de la Universidad Nacional de Mar del Plata, Adrián Alasino, las medidas de bloqueo en Italia, el país fuera de China con mayor cantidad de infectados por el coronavirus, lo sorprendieron en plenas vacaciones con su familia en Florencia, obligándolo a cambiar su itinerario de viaje.
“Llevamos un poco más de dos semanas acá. Las dos primeras semanas la vida fue normal, podíamos entrar a los museos, viajar por el país, todo normal. Todo cambió el lunes, cuando el gobierno aplicó restricciones varias y ahora hay un control de los movimientos por el país“, señaló a LA CAPITAL Alasino, quien ejemplificó el endurecimiento de las medidas con su propia experiencia.
“Por ejemplo, nosotros ahora tenemos que volvernos a Roma y no podemos ir a ninguna otra ciudad de turismo como teníamos pensado porque los desplazamientos por razones que no sean de salud no están permitidas”, señaló.
Según indicó Alasino, el panorama en el país europeo que cuenta con miles de casos confirmados y cientos de muertes por Covid-19 es de una extrema precaución. Al tiempo que en redes circulan videos de patrulleros recorriendo las calles de ciudades del norte del país y recomendando por altoparlantes la “cuarentena” de toda la población, el médico docente aseguró que hay muchos espacios turísticos cerrados y “pocos turistas”.
“Cerraron todos los museos, mientras que las iglesias solo están abiertas para oración. Siguen abiertos los supermercados, las farmacias, las casas de cambio de dinero y solo algunos locales de ropa, aunque la mayoría de las marcas grandes están todas cerradas”, señaló. Y agregó: “De todas maneras, todos los negocios y restaurantes tienen que cerrar a las 6 de la tarde, por lo que la vida nocturna se ha cortado”.
Desde hace varios meses que Alasino había planificado el viaje con su familia. Finalizado el ingreso de los estudiantes de primer año de Medicina en la ciudad, el rector contaba con un poco más de tres semanas para disfrutar de un tiempo en familia. Tras recorrer Roma y el sur de Italia sin mayores inconvenientes, el lunes pasado llegó a Florencia -ubicada hacia el norte del país, donde se focaliza la mayor cantidad de casos- y comenzó a percibir allí un cambio en la política gubernamental italiana.
“A pesar de que la mayor cantidad de casos están en el norte, se tomaron las medidas en todo el país. Hoy ya no es posible trasladarse por el país por razones turísticas”, indicó y aseguró que hoy volverá con su familia a Roma, donde se quedarán hasta la fecha de su pasaje de vuelta: 21 de marzo.
“El tema de los vuelos es un enigma porque hay una tanda de vuelos publicados que están cancelados y dejaron otros días para que la gente se acomode y pueda volver. Nuestro vuelo no está cancelado hasta el momento”, señaló, aunque aseguró que, ante el panorama actual y la declaración de pandemia por parte de la Organización Mundial de la Salud, su intención es intentar “adelantar el regreso”.
En cuanto a la conducta de la gente en el lugar, Alasino aseguró que “la gente sale, la gente está en las calles, algunos usan barbijos, pero la mayoría no porque la vida tiene que seguir”. “Lo que sí, se ven muy pocos turistas”, agregó. “Divino…¡pero sin gente!”, dijo.
Sobre los controles que implementaron con su familia, Alasino aseguró: “Hacemos lo que recomendaron las autoridades: lavado de mano frecuente, uso de alcohol en gel en algunas ocasiones, no estar en lugares con mucha gente”.