Empresarios de la nocturnidad de Playa Grande se reunieron y buscan que se apruebe un protocolo para poder abrir. “Es insostenible”, coinciden.
Empresarios de la nocturnidad de Playa Grande buscan acelerar el proceso de evaluación de protocolos para poder volver a la actividad.
Con este objetivo, los responsables de los alrededor de diez boliches que hay en la zona se reunieron para unir criterios a la hora de pensar cómo actuar de ahora en más, a poco más de dos meses de la temporada y con un panorama poco claro por delante.
“La necesidad es ya. No podemos esperar al 1 de enero”, definió ante La Capital, el responsable de Quba, Francisco Cochilobo.
Motivados por la falta de respuestas, los empresarios de las discotecas, bares y cervecerías de Playa Grande se juntaron para tratar de convenir un cronograma de trabajo en común y obtener alguna certeza en este mar de incertidumbre que los rodea, en un contexto de preocupación por el tiempo transcurrido y la disminución de los recursos para sostener sus estructuras.
“Es insostenible del lado económico, las ayudas son insignificantes y creemos que es momento que nos escuchen”, explicó Cochilobo y agregó que también hay que “pensar en los turistas y dar un panorama más claro”.
Tras el encuentro, los empresarios buscarán reunirse con autoridades locales, provinciales o nacionales para tener alguna certeza. No obstante, aclararon que por el momento no evalúan abrir las puertas sin la autorización correspondiente.
“En marzo, cuando todo era confusión, fuimos los primeros dispuestos en cerrar y sabemos que vamos a ser los últimos en abrir. Por eso es imperiosos que estemos en la mesa de trabajo con las autoridades de forma inmediata, para tomar decisiones en conjunto y desarrollar los protocolos pertinentes para el inicio de la actividad”, expresaron en forma conjunta.
A pesar del reclamo de los empresarios, la habilitación de la actividad no parece sencilla en un contexto como el actual. Así lo indicó el jefe de Gabinete bonaerense, Carlos Bianco al señalar que “hay actividades de mucha aglomeración, como la de los boliches, que veo bastante difícil que vuelvan hasta el fin de la pandemia, con la población vacunada”.