Salió campeón en los Juegos Panamericanos de Lima 2019. Ahora se prepara para intentar ingresar al Preolímpico Sudamericano y correr el Mundial sub 23.
Agustín Scenna parece haber recorrido muchas más aguas de las que su corta edad le permitió. Es que con tan solo 19 años, el remero marplatense ya obtuvo la medalla dorada en remo de ocho con timonel en los Juegos Panamericanos de Lima 2019, salió Bicampeón Nacional de Remo en 2019 y consiguió el primer lugar en cuatro sin y ocho Sudamericano y Latinoamericano en 2018; por mencionar algunos de sus logros.
Comenzó a remar casi de casualidad. Cuando era más chico, varios de sus amigos lo hacían y él se quedaba solo cuando iban a entrenar. Por eso, decidió anotarse en el club náutico y seguirles la corriente. Agustín jugaba al fútbol y recién había terminado la temporada, el remo no le parecía un deporte difícil y empezó con la idea de “hacer algo para mantenerse en estado” antes del comienzo de una nueva pretemporada futbolística.
La conexión con el remo fue instantánea: apenas se inició en la práctica, le encantó. Las carreras también surgieron rápidamente, primero enfrentando a sus amigos por diversión y, luego, en competencias. Los entrenadores notaron sus cualidades ya que, a los pocos meses de entrenar, ya les ganaba a sus amigos que se preparaban hacía años. En consecuencia, lo seleccionaron para empezar a competir. Con las competencias llegaron los viajes y eso lo motivó todavía más a enfocarse en este deporte.
Su primera convocatoria a un seleccionado fue en representación de la provincia de Buenos Aires, en plena preparación de los Juegos Olímpicos de la Juventud 2018. La convocatoria apuntaba a chicos de las categorías 2000 a 2003, por lo cual entró “con lo justo”. A partir de ese momento, concentró un año con chicos de toda la provincia. Después, formó parte un campeonato nacional entre zonas, distinguiendo las regiones Sur, Norte, Litoral y Buenos Aires. Del buen desempeño en esa competencia surgieron algunos remadores que tendrían el honor de representar a la Argentina en Chile y en Brasil al año siguiente. Así fue como Scenna empezó a correr con la albiceleste en 2016.
Las competencias en Chile y en Brasil eran “encuentros sudamericanos”, porque los deportistas eran sub 16 y no se consideraban parte de los torneos oficiales. La primera vez que pudo participar en un torneo oficial fue en el Sudamericano de Brazilia en 2017, donde obtuvo el segundo puesto. Nuevamente, para poder ser parte del torneo, tuvo que sortear numerosas pruebas. En enero del mismo año, habían comenzado los selectivos en simulador y en agua y, en base al rendimiento, se iban descartando aspirantes por zonas. Luego de ese proceso de depuración del equipo, los seleccionadores juntaron a todos para correr entre sí y de ahí sacaron los mejores botes. Entre el inicio y el fin del proceso de reclutamiento hubieron, como para la mayoría de las competiciones, cinco meses de pruebas.
En noviembre de 2018 arrancó a prepararse para los Juegos Panamericanos de Lima 2019. Haber formado parte siendo tan joven representa todo un logro en sí mismo: es de los más chicos en la categoría sub 23 y se encuentra por debajo de los senior A, la categoría libre. “Fui con pocas expectativas, ya que hay mucha diferencia de edad entre los más grandes del sub 23 y ya más todavía con los de senior A”, contó Scenna. Sin embargo, se sentía bien preparado. En el selectivo “había entrenado un montón” y se sentía confiado corriendo. La preparación dio sus frutos y Agustín pudo ganarlo y posicionarse como el mejor sub 23 en singles. Además, por la buena marca obtenida, consiguió meterse entre los ocho mejores del senior A.
Una vez conseguido el lugar en el bote nacional, volvieron las concentraciones y los entrenamientos en Nordelta. Aprovechando las boyas y el agua cristalina del lugar, los deportistas iniciaron trabajando en duplas, siguieron en cuartetos y culminaron la preparación en el bote de ocho. “La preparación estuvo muy buena, remamos bastante y el bote siempre anduvo muy bien desde el primer día, ya que había muchos experimentados”, comentó el deportista.
La ciudad peruana que ofició de sede de la disciplina fue Huacho, ubicada 148 kilómetros al norte de Lima. En dicha locación consiguieron la tan anhelada presea dorada. El equipo estaba sólido y contaba con la participación de tres marplateneses más: los hermanos Cristian y Brian Rosso, referentes nacionales del remo, e Ignacio Pezzente. La fuerte presencia de deportistas locales fue un factor positivo para Agustín, quien destacó la confianza que había entre ellos y la ventaja que representa entrenar juntos con frecuencia, “sabiendo que todos dan el máximo” y lo incentivan a equipararlos. “Seguirles el tramo es lo que lo hace divertido. Sabés que si los seguís vas a tener buenos resultados”, destacó.
El deporte ocupa gran parte de su tiempo. Sin embargo, Agustín prefiere tomárselo más como un hobbie que como un trabajo, para quitarle peso y permitirse disfrutar de lo que le está pasando. El click es reciente, ya que el año pasado sí se presionaba para llegar a los resultados y, en algunas ocasiones, era la misma presión la que lo alejaba de alcanzar las metas establecidas.
Hoy Agustín está terminado de cursar el primer año de la Licenciatura en Kinesiología y Fisiatría y sueña con seguir creciendo en este deporte. Para 2020, sus principales objetivos son ingresar al Preolímpico Sudamericano y correr el Mundial sub23. Aquellos amigos que lo iniciaron en este deporte hoy se alegran por él y lo acompañan: “Todos demuestran cierto orgullo y eso me pone muy contento”, expresó Scenna. El éxito no es casualidad: entrena, descansa y se alimenta como un campeón.
Por Julieta Fernández para Pibxs