El productor marplatense destacó que Mar del Plata sufrió "pérdidas económicas directas e indirectas" por la suspensión del show de la banda.
“Pasar por alto la censura al show de La Renga en Mar del Plata, y en plena democracia, es algo que no puede quedar en el olvido”, dijo el productor Pablo Baldini a través de un comunicado. Responsable del recital que ofreció La Renga en San Luis, aclaró que Mar del Plata sufrió “pérdidas económicas directas e indirectas” por no autorizar el recital.
Y se solidarizó con los marplatenses “que en su buena fe habían comprado su entrada y se quedaron sin posibilidad de ver a su banda favorita”.
“Sin explicaciones claras que pudieran contentar a las 40 mil personas que esperaban por su recital, no nos queda otra conclusión más que entender que la política se metió con la cultura de forma descarada, atropellando la voluntad de la gente y coartando su libertad de expresión”, agregó.
Y pidió que los bonaerenses no naturalicen “la censura, la discriminación, y se nos haga cotidiano que la libertad de expresión quede sujeta a un mero papel que alguien decida o no firmar sobre su escritorio, incidiendo en la vida social de miles de chicos”.
El productor, que es titular de NA, también se refirió a la “fiesta puntana” que vivió San Luis por el recital del sábado último, que se realizó “con absoluta normalidad gracias a la buena predisposición de funcionarios puntanos, a La Renga y a los más de 30 años de profesión que tengo”.