Fracasado el intento de implantar el metrobús, en el Concejo Deliberante comenzaron a explorar la alternativa de desempolvar una de las conclusiones del Plan Maestro de Transporte y Tránsito: la de incorporar carriles exclusivos para el transporte en las avenidas centrales de Mar del Plata.

A través de un proyecto de comunicación impulsado por la concejal Natalia Vezzi, el bloque radical solicita que el Departamento Ejecutivo implemente carriles exclusivos en determinados puntos de la ciudad. A saber: avenida Independencia desde Colon hasta Luro (sentido hacia Libertad); avenida Luro desde Salta hasta Buenos Aires (sentido hacia el mar), calle Buenos Aires desde Luro hasta Colón; Colón desde Buenos Aires hasta Las Heras; Sarmiento desde Garay hasta Boulevard Marítimo; Boulevard Marítimo desde Sarmiento hasta la rotonda de Punta Iglesias; Diagonal Alberdi desde Entre Ríos hasta Mitre; 25 de mayo desde Córdoba hasta Independencia; Independencia desde 25 de mayo hasta Colón (sentido hacia Juan B. Justo) y Luro desde Mitre hasta Salta (sentido hacia Jara).

La intención es que los dos carriles de la derecha sean para colectivos y taxis, y quede un carril central para los vehículos particulares. Según la autora del proyecto, la división se puede hacer a bajo costo con la implementación de delineadores o cordones rectos doble montante, sumado al pintado del asfalto.

Vezzi menciona entre sus argumentos “el caos vehicular en la zona céntrica por el tránsito de las distintas líneas del transporte urbano de pasajeros y, particularmente, los embotellamientos producidos verano tras verano en la calle Buenos Aires entre avenida Luro y avenida Colón”.

Explica que eso es producto de “la gran cantidad de automóviles que se suman a la flota de colectivos del transporte público de pasajeros, que también ha aumentado”.

Hace notar que el sistema de metrobús, puesto en marcha en distintos distritos de la provincia, resultó exitoso en la Ciudad de Buenos Aires, pero es “muy oneroso y en determinados trayectos de difícil aplicación” en Mar del Plata “porque las avenidas de nuestra ciudad cuentan en algunos sectores con solo tres carriles habilitados de cada mano, motivo por el cual se restringiría demasiado el tránsito de vehículos particulares”.

Vezzi apunta que, a pesar de regir la prohibición de estacionamiento sobre las avenidas Independencia, Luro y Colón, las calles Buenos Aires, Sarmiento y Alberti y el Boulevard Marítimo, “es común ver que no se cumple efectivamente”.

Argumenta además que “la gran mayoría de las líneas de colectivos unifican sus recorridos a partir de Independencia y Colon, por un lado, y Luro y Guido, por el otro”. De esa manera, la zona delimitada por Luro desde Independencia hasta Buenos Aires y de Buenos Aires hasta Colón es la que sufre “mayor caos vehicular”.

Las vías preferenciales apuntan a dos objetivos, según el proyecto: “mejorar las condiciones de circulación de los colectivos tendiendo a que circulen por las avenidas y que asimismo se reduzcan los tiempos para atravesar la zona céntrica, lo que redundará en un beneficio para los pasajeros”, y “mejorar la seguridad vial y evitar los inconvenientes ocasionados por el hecho de compartir autos particulares y colectivos los mismos carriles”.

Esto, a su vez, “permitirá agilizar el tránsito y disminuir los tiempos de los recorridos de los colectivos”. Incluso las vías preferenciales “servirán para ser utilizados en casos de emergencia por la policía, bomberos o ambulancias”.

El de los carriles exclusivos fue uno de los puntos que estableció el Plan Maestro de Transporte y Tránsito que se elaboró durante el gobierno de Gustavo Pulti.

En junio de 2017, la gobernadora María Eugenia Vidal anunció la llegada del metrobús, pero la iniciativa recibió cuestionamientos y fue dejada en suspenso con un argumento repetido con insistencia por funcionarios nacionales y provinciales: “Primero vamos a arreglar las calles”.

PARADAS

En su proyecto, Vezzi también marca que, por “la gran cantidad de unidades y líneas de colectivo”, cada parada hoy es para “entre tres y cinco líneas”, por lo que muchas unidades “se detienen en ángulos de 45%, impidiendo la circulación o bien utilizando el tercer y cuarto carril para poder avanzar”. Por eso solicita que cada línea de colectivo “tenga asignado el espacio correspondiente” para hacer sus paradas “a fin de evitar los embotellamientos”.