Un hombre fue aprehendido por denunciar que el automóvil de su ex pareja había sido robado de la calle cuando en realidad se lo había vendido a un gitano.

El caso, uno más en la serie de falsas denuncias de robo automotor que se dan en la ciudad, tiene algunas aristas singulares. Es que más allá de la estafa al integrante de la comunidad zíngara el imputado habría efectuado la maniobra por despecho.

De acuerdo a información oficial surgida de la propia policía, el hombre de 36 años domiciliado en la zona portuaria denunció el martes pasado la sustracción de un auto Fiat Uno que había estacionado en Avellaneda y Alsina.

Desde la fiscalía de Determinación de Autores se comenzó a investigar y se estableció que desde hacía ya varios días que el denunciante no utilizaba el automóvil que, además, pertenecía a su ex pareja. Además, el hombre y la mujer atravesaban una etapa de ruptura sentimental.

De inmediato se dispusieron actuaciones por el delito de falsa denuncia y se libró un pedido de secuestro para el Fiat Uno, el cual finalmente fue localizado en la zona de Jara y Castelli en poder de un gitano. La policía secuestró el vehículo pese a que el hombre insistía en que lo había adquirido de buena fe y lo tenía ofrecido para la venta. El miembro de la comunidad zíngara fue imputado del delito de “encubrimiento”.

Se  investiga ahora lo que se supone: si el hombre de 36 años habría cobrado una suma de dinero por el total del automóvil y además pretendía obtener la indemnización de la compañía de seguros.